Rev.int.med.cienc.act.fís.deporte – vol. 6 - número 24 - diciembre 2006 - ISSN: 1577-0354
Gutiérrez Sanmartín, M. y Pilsa Doménech, C. (2006)
Actitudes de los alumnos hacia
ACTITUDES DE LOS ALUMNOS HACIA
STUDENT ATTITUDES TOWARD PHYSICAL EDUCATION AND THEIR TEACHERS
Gutiérrez Sanmartín, M.* y Pilsa Doménech, C.
* Doctor en Psicología.
Profesor de Psicología de
**Licenciada en CC. de
RESUMEN
El
propósito de este trabajo ha sido analizar las actitudes de los alumnos hacia
los contenidos de las clases de educación física y la conducta de los
profesores. En él han participado 910 alumnos de Educación Secundaria
Obligatoria, de
Palabras
clave: adolescentes, alumnos de
ESO, educación física, actitudes.
SUMMARY
The purpose of the study was
to determine the attitudes of middle school students toward their physical
education teachers and physical education classes. Participants selected
consisted of 1st. to 4th grade students (N=910) from six
middle schools of Valencian Community. Participants were asked to complete a
29-item of a spanish adapation of the Teacher Behavior and Program Content in
School Physical Education Questionnaire, by Luke and Cope (1994). The results
indicated that middle school students have positive attitudes toward teacher
behavior and physical education content, boys valuated more than girls fitness
exercises, girls liked cooperation better than competition, and yonger students
enjoyed physical education classes more than the older.
KEY WORDS: adolescents, middle school students, physical
education, attitudes.
1. INTRODUCCIÓN
El desarrollo de actitudes positivas hacia la
actividad física es un objetivo importante que todos deberíamos tener presente
en los distintos niveles educativos y programas de educación física (EF). Pero,
para desarrollar esas actitudes positivas, parece razonable comenzar por un
asunto previo, el conocimiento de lo que los alumnos/as piensan sobre los
contenidos de
Las actitudes pueden ser consideradas como
sentimientos, predisposiciones, ideas, miedos y convicciones personales hacia
un determinado tópico u objeto social (Aicinena, 1991), y pueden inferirse a
partir de lo que una persona dice o hace. De este modo, las respuestas que los
alumnos nos comunican constituyen un compendio de lo que conocen o piensan
acerca de
Sabemos que los diferentes aspectos de
Según la literatura especializada, hace tiempo que el
desarrollo de actitudes positivas hacia la actividad física viene siendo uno de
los principales objetivos de los programas de EF, tanto en escuelas elementales
como secundarias (Siedentop, 2000). Y esto es así porque existe un
convencimiento general de que los adolescentes con actitudes positivas hacia la
actividad física están más ilusionados por aprender y por tanto tienen una
mayor posibilidad de beneficiarse de los principales objetivos de
Sin embargo, aunque existen diversas evidencias de lo
importante que resulta conocer la valoración que los alumnos hacen de
Las investigaciones sobre las actitudes hacia
Hendry y Welsh (1981) midieron las actitudes hacia
los profesores mediante una serie de afirmaciones que los alumnos percibían
como importantes en el rol del profesor de EF. El punto de vista mostrado por
los alumnos respecto de sus profesores de EF confirma un patrón diferencial de
las percepciones que opera en el contexto deportivo escolar, viendo a sus
profesores como amistosos y próximos, más competitivos y prestando mayor
atención a los alumnos con mayores habilidades. En correspondencia con esto,
los alumnos competidores mostraron un punto de vista más favorable de sus
profesores de educación física, manifestando sus buenas relaciones con sus
profesores.
Convencido también de que la imagen que los
profesores aportan a sus alumnos resulta crucial en el desarrollo de estos
últimos, Friedmann (1983) llevó a cabo una investigación con un numeroso grupo
de alumnos a quienes planteó preguntas como las siguientes: ¿qué es un buen
profesor?, ¿cuál es la esencia de una buena enseñanza?, ¿cuáles son los
criterios que se deben seguir para evaluar la competencia de los profesores?,
¿cuál es la forma más efectiva de producir buenos profesores? Friedmann partió
de dos hipótesis en el desarrollo de su trabajo: (a) la personalidad de un buen
profesor y sus métodos de enseñanza suponen un importante reto para los
alumnos; (b) el sentimiento que los alumnos experimentan durante las clases es
lo más importante para su motivación, su aprendizaje y su realización personal.
Entre los resultados obtenidos hay que destacar que los alumnos valoraron muy
positivamente la competencia profesional, la deportividad, apariencia agradable
y autoconfianza de sus profesores, y como características negativas resaltaron
la falta de objetividad en las calificaciones y el favoritismo hacia algunos
alumnos, a pesar de que en términos generales la objetividad fue valorada
positivamente. Entre las sugerencias que los alumnos hicieron sobre cómo
deberían ser sus profesores se encontraban, por ejemplo, generar mayor placer y
diversión en el desarrollo de sus clases; que los profesores debían ser un
ejemplo para ellos, tanto en comportamiento como en habilidades; y que debían
tener autoridad a la vez que ser apreciados.
Luke (1991) entrevistó a 120 alumnos preguntándoles
lo siguiente: a) cuéntame qué cosas son las que más te divierten en la clase de
educación física; b) cuéntame qué cosas te disgustan de tu clase de educación
física; c) ¿en qué actividades físicas participas de manera regular y
organizada después de salir de la escuela o durante el fin de semana, y en las
que tú verdaderamente disfrutas? Concluyó que las tres cuestiones más
resaltadas fueron las actividades propias de cada lección, el equipamiento y
material utilizado y el desarrollo de la habilidad. Por el contrario, la
conducta del profesor, la percepción de competencia de los alumnos y el ganar o
perder, fueron situados al final de la relación.
Browne (1992) analizó las razones por las que las
alumnas de nivel 12 habían elegido o no
Otra investigación importante es la de Luke y Cope
(1994), que investigaron a 386 alumnos
de 3º, 7º y 10º cursos (9, 13 y 16 años), para conocer sus actitudes hacia la
conducta del profesor y el contenido del programa de EF. Sus resultados
indicaron que las actitudes de los alumnos hacia la conducta del profesor
fueron positivas en todos los niveles escolares ya que los items relativos a
esta dimensión puntuaron con una media positiva, obteniendo las mejores
valoraciones los items referidos al conocimiento del profesor sobre su materia,
las explicaciones claras del profesor y el buen ejemplo que daba en clase. Por
el contrario, aunque positivas, las puntuaciones más bajas correspondieron a
los ítems que hacían referencia a la preocupación del profesor por lo que
sentían los alumnos, a tomar parte el profesor en las clases de EF, y a su
capacidad comunicativa. La valoración que hicieron los alumnos sobre el
contenido del programa fue menos positiva que la concedida a su profesor/a. Las
puntuaciones más elevadas hacían referencia al deseo de que se contemplase en
el boletín de calificaciones la actitud de los alumnos, el disfrute con las
actividades de clase, y que los alumnos pudiesen elegir las actividades a
practicar. Las puntuaciones más bajas correspondieron al estrés de los alumnos,
la valoración de la condición física como parte de la nota de clase y la
ocupación de mayor tiempo practicando ejercicios de condición física.
Además, Luke y Cope (1994) encontraron que las actitudes
de los alumnos hacia su profesor/a eran más positivas en los niveles escolares
más infantiles (3º curso) y se iban haciendo menos positivas a medida que
aumentaba la edad (7º curso), mejorando de nuevo al acercarse al 10º curso. Las
actitudes de los alumnos hacia el contenido del programa de EF siguieron un
comportamiento paralelo al mostrado para el profesor/a. Comparando chicos y
chicas, en general, no aparecieron diferencias estadísticamente significativas
en cuanto a las actitudes hacia el profesor/a y el contenido de la asignatura,
aunque en este último apartado existió menor coincidencia entre alumnos y
alumnas. La interpretación que Luke y Cope
le dieron a tales diferencias fue que el fuerte deseo de actividad
física que caracteriza a los niños de 3º curso puede incrementar las
percepciones favorables tanto del comportamiento del profesor como del
contenido del programa. Por el contrario, en 7º curso, que coincide con la
adolescencia temprana, los alumnos podrían ser más críticos y demandar más
exigencias tanto al profesor como al programa de la asignatura. En cuanto al
género, las actitudes de chicos y chicas fueron muy similares en todos los
niveles, aunque se diferenciaron ligeramente en 7º curso en algunos aspectos de
la conducta del profesor, pero no en cuanto al programa de EF.
Estos resultados corroboran los hallados en estudios
anteriores, en los que se indica que los alumnos, en general, tienen actitudes
más positivas que negativas hacia
En nuestro contexto, Moreno, Rodríguez y Gutiérrez
(1997) investigaron los intereses y actitudes de los alumnos hacia
Más recientemente, Ryan, Fleming y Maina (2003),
fundamentados en los trabajos de Rice (1988), analizaron las actitudes de los
estudiantes de grado medio hacia su profesor/a de EF y las clasee de EF. De su
investigación dedujeron la valoración positiva que los alumnos hacen de la
realización de actividades variadas en las clases de EF, así como una mejor
valoración de los profesores que poseen buenas habilidades físicas, son
amistosos con los estudiantes, y se comportan de manera imparcial con todos
ellos, resultados coincidentes en su mayoría con los referidos por Silverman y
Subramamam (1999), Stewart, Green y Huelskamp (1991), Strand y Scantling (1994)
y Tannehill y Zakrajsek (1993).
A pesar de los trabajos antes mencionados, dado el
escaso número de investigaciones sobre las actitudes de los alumnos hacia
a) Conocer cuáles son las actitudes de los alumnos
hacia el comportamiento de los profesores
y los contenidos del programa de EF.
b) Conocer si existen diferencias en las actitudes de
los alumnos hacia los contenidos del programa de EF y sus profesores, según el
curso (nivel escolar).
c) Conocer si existen diferencias en las actitudes de
los alumnos hacia los contenidos del programa de EF y sus profesores, según el
género.
2. MÉTODO
2.1
Participantes
En esta investigación han participado 910
estudiantes de edades comprendidas entre los 13 y 16 años, 422 hombres (46.4%)
y 488 mujeres (53.6%), procedentes de centros públicos y concertados de
Tabla 1. Distribución de la
muestra por curso y género
Hombres Mujeres Total
Curso n % n % n %
1º 109 12.0 119 13.1 228 25.1
2º 112 12.3 131 14.3 243 26.6
3º 119 13.1 122 13.4 241 26.5
4º 82 9.0 116 12.8 198 21.8
Total 422 46.4 488 53.6 910 100.0
El muestro realizado fue de tipo incidental, a través de colaboradores, al final del curso escolar 2005. Únicamente se tuvieron en cuenta los cuestionarios que habían sido totalmente cumplimentados, desestimando el 0.8% por falta de algunas respuestas. Todos los alumnos y profesores participantes lo hicieron dando su consentimiento previo, después de haber sido informados de los objetivos que nos habíamos propuesto en esta investigación.
2.2.
Instrumentos
El instrumento utilizado ha sido una traducción
española del Cuestionario de Actitudes de los Alumnos Hacia
Una vez pasado el cuestionario a un grupo piloto, para comprobar la comprensión de los ítems y los posibles problemas en su aplicación, se les pidió a los alumnos que respondieron a una escala tipo Likert con 5 alternativas, desde (1) totalmente en desacuerdo, hasta (5) totalmente de acuerdo.
La fiabilidad del cuestionario obtenida por Luke y
Cope (1994) fue de 0.86. A partir de nuestros datos hemos obtenido unos
coeficientes alpha de 0.93 para el factor de las actitudes hacia el
comportamiento del profesor (ítems impares), y 0.83 para las actitudes hacia el
contenido de los programas de EF (ítems pares). El alpha total de la escala ha
sido de 0.94.
2.3.
Análisis de los datos
A partir de las respuestas al Cuestionario de
Actitudes hacia
3. RESULTADOS
Los resultados serán expuestos separadamente, en relación con los tres objetivos planteados en el estudio.
3.1.
¿Cuáles son las actitudes de los alumnos hacia el comportamiento de los
profesores y los contenidos del programa
de EF?
Considerada la muestra en su conjunto, las actitudes
de los alumnos hacia la conducta del profesor/a de EF han sido positivas,
puesto que los 15 ítems que componen este factor han superado el valor 3 en la
escala de
Como puede observarse, los dos primeros ítems hacen
referencia a cualidades positivas de los profesores de EF, tanto a su
preparación profesional como a la capacidad de explicar la materia y ayudar a
los alumnos.
Frente a esto, los ítems menos valorados, aunque
positivos, han sido:
En cuanto a las actitudes
de los alumnos hacia el contenido de
Las puntuaciones más elevadas se han obtenido en los
ítems:
26. En mis clases de E.F. debería incluirse mi
actitud y esfuerzo como parte de mi calificación (X = 4.08).
10. En mis clases de E.F disfruto practicando juegos
y deportes de equipo más que juegos individuales (X = 3.95).
18. En mis clases de E.F. nos enseñan nuevas
actividades y juegos cada trimestre (X = 3.95).
Estos tres ítems resaltan el disfrute de los alumnos
en las clases de EF, su satisfacción por la variedad de juegos y actividades
que les proponen en las clases, y su deseo de que en la calificación de la
asignatura también se incluyan las actitudes positivas y el esfuerzo como
valores a considerar por parte del profesor/a.
Las puntuaciones más bajas se han obtenido en los
ítems:
6. En mis clases de E.F., podemos elegir siempre las
actividades que realizamos (X = 2.39).
12. En mis clases de E.F. hay mucho estrés por el
deseo de triunfo de los alumnos (X = 2.95).
Como puede verse, una de las cosas con la que los
alumnos manifiestan estar menos contentos es la elección de las actividades,
dando a entender que existe cierta imposición por parte de los profesores. Por
otro lado, el estrés en las clases de EF no llega a alcanzar el punto medio de
la escala, aspecto que en este caso resulta ser positivo.
Tabla 2. Análisis de
Ítem X DS Contenido de cada ítem
1. 3.82 1.24 Mi profesor/a de E.F. explica claramente lo
que tenemos que aprender.
2. 3.70 1.16 En mis clases de E.F., disfruto con las
actividades y juegos que tengo que aprender.
3. 3.59 1.30 Mi profesor/a de E.F. es comprensivo con los
alumnos que no son
demasiado buenos en deporte.
4. 3.68 1.18 En mis clases de E.F., las actividades y
juegos que realizamos están bien organizados.
5. 3.67 1.26 Mi profesor/a de E.F. da un buen ejemplo con
su comportamiento.
6. 2.39 1.27 En mis clases de E.F., podemos elegir las
actividades que realizamos.
7. 3.63 1.11 Es importante que mi profesor/a de E.F.
participe en las actividades de clase.
8. 3.94 1.10 En mis clases de E.F. me enseñan nuevas
habilidades cada trimestre.
9. 3.60 1.22 Mi profesor/a de E.F. me apoya y anima en el
desarrollo de la clase.
10. 3.95 1.18 En mis clases de E.F disfruto practicando
juegos y deportes de equipo más que juegos individuales.
11. 3.50 1.22 Mi profesor/a de E.F. tiene un buen control
sobre los alumnos en clase.
12. 2.95 1.29 En mis clases de E.F. hay mucho estrés por el
deseo de triunfo de los
alumnos.
13. 3.65 1.21 Mi profesor/a de E.F. demuestra muy bien las
habilidades que debemos
practicar.
14. 3.11 1.30 En mis clases de E.F. deberían hacerme
pruebas de condición física para determinar mi nota final.
15. 3.64 1.28 Mi profesor/a de E.F. trata a todos los
alumnos de la clase de manera justa.
16. 3.87 1.12 En mis clases de E.F. las actividades y
juegos deberían resaltar más la
cooperación (colaboración) que la competición.
17. 3.25 1.26 Mi profesor/a de E.F. se preocupa (se
interesa) por lo que yo siento.
18. 3.95 1.14 En mis clases de E.F. nos enseñan nuevas
actividades y juegos cada
trimestre.
19. 3.93 1.12 Mi profesor/a de E.F. es buen conocedor de la
educación física.
20. 3.39 1.14 En mis clases de E.F. debería emplear más
tiempo mejorando mi
condición física.
21. 3.60 1.17 Mi profesor/a de E.F. es muy dialogante
(comunicativo/a).
22. 3.47 1.19 En mis clases de E.F. me dan suficiente
tiempo para practicar las
habilidades que tengo que aprender.
23. 3.53 1.24 Mi profesor/a de E.F. me motiva para que dé
lo mejor de mi mismo/a.
24. 3.57 1.20 En mis clases de E.F. el nivel de habilidad
que se exige para aprobar es
justo.
25. 3.56 1.29 Considero que las notas (calificaciones) que
me pone mi profesor/a de E.F. son justas.
26. 4.08 1.12 En mis clases de E.F. debería incluirse mi
actitud y esfuerzo como parte de mi calificación.
27. 3.53 1.21 Mi profesor/a de E.F. resalta mis méritos
cuando hago algo bien.
28. 3.90 1.11 En mis clases de E.F., me enseñan algunos
ejercicios nuevos cada trimestre.
29. 3.74 1.18 Mi profesor/a de E.F. me ayuda cuando tengo
algún problema para aprender una nueva habilidad.
3.2.
¿Existen diferencias en las actitudes de los alumnos hacia los contenidos de EF
y sus profesores, según el nivel de estudios (curso)?
Tabla 3. Comparación de las respuestas de los alumnos
según el curso: Conducta del profesor/a de EF.
1º Curso 2º
Curso 3º Curso 4º Curso valor
F Significativo
Item X DS X DS X DS X DS (p) entre
1 4.10 1.12 3.84 1.30 3.70 1.24 3.63 1.26 .000*** 1-3;
1-4
3 3.84 1.28 3.52 1.32 3.46 1.32 3.54 1.25 .008** 1-2; 1-3
5 3.85 1.23 3.66 1.28 3.54 1.26 3.61 1.26 .063 1-3
7 3.53 1.14 3.60 1.17 3.69 1.08 3.72 1.04 .253 ninguno
9 3.83 1.14 3.62 1.25 3.53 1.21 3.39 1.23 .002** 1-3; 1-4
11 3.73 1.15 3.58 1.25 3.33 1.19 3.33 1.25 .001** 1-3; 1-4
13 4.03 1.08 3.55 1.30 3.56 1.19 3.44 1.21 .000*** 1-2; 1-3; 1-4
15 3.92 1.15 3.64 1.28 3.45 1.31 3.55 1.31 .001** 1-3; 1-4
17 3.48 1.25 3.31 1.30 3.20 1.20 2.96 1.26 .000*** 1-4; 2-4
19 4.11 1.08 3.95 1.15 3.84 1.14 3.79 1.11 .019* 1-4
21 3.75 1.16 3.77 1.11 3.49 1.16 3.34 1.19 .000*** 1-4;
2-3; 2-4
23 3.74 1.19 3.63 1.26 3.50 1.21 3.20 1.25 .000*** 1-4;
2-4
25 3.74 1.30 3.57 1.31 3.44 1.25 3.50 1.28 .077 ninguno
27 3.63 1.24 3.67 1.18 3.45 1.21 3.31 1.21 .007** 1-4;
2-4
29 3.91 1.09 3.79 1.19 3.63 1.23 3.62 1.19 .023* 1-3
*: Diferencias significativas al
nivel de p<.05 **: Diferencias
significativas al nivel de p<.01
***: Diferencias significativas al nivel de p<.001
Las actitudes de los alumnos hacia el contenido de las clases de EF (Tabla 4), han resultado también significativas en 10 de los 14 ítems que componen este factor. De igual modo que para el factor anterior, siguen siendo los alumnos más jóvenes quienes marcan las diferencias con los otros alumnos, valorando más positivamente los contenidos de las clases de EF. No obstante, cabe señalar que así como en el factor relativo al comportamiento del profesor existía una gran constancia en la dirección de los resultados, en este caso aparece una mayor diversidad, a pesar de que cuatro ítems no aportan diferencias entre ninguno de los grupos, valorándolos todos los alumnos con puntuaciones positivas, por encima de 3. Éstos, son los ítems 14, 18, 22 y 24, relativos al deseo de que en clase se instauren pruebas de condición física para determinar la calificación final, la confirmación de que se incorporan actividades nuevas cada trimestre, el deseo de prácticas de condición física, y la justicia entre el nivel de habilidad que se exige y la calificación que finalmente se concede. Destaca el ítem nº 26 (En mis clases de EF debería incluirse mi actitud y esfuerzo como parte de mi calificación), que es muy valorado tanto por los alumnos más jóvenes como por los mayores, aportando menor puntuación los cursos intermedios, aunque todos ellos valoran este ítem entre 4.22 y 3.85, es decir, se trata de una petición recalcada por todos ellos, a pesar de sus diferencias en el grado de consideración.
Tabla 4. Comparación de las
respuestas de los alumnos según el curso: Contenido de las clases de Educación
Física.
1º Curso 2º
Curso 3º Curso 4º Curso valor
F Significativo
Item X DS X DS X DS X DS (p) entre
2 3.97 1.06 3.74 1.14 3.59 1.17 3.49 1.22 .000*** 1-3;
1-4
4 3.87 1.14 3.74 1.24 3.56 1.14 3.54 1.19 .008** 1-3; 1-4
6 2.29 1.29 2.71 1.32 2.39 1.21 2.12 1.19 .000*** 1-2; 2-3; 2-4
8 4.14 1.05 3.97 1.14 3.84 1.08 3.80 1.12 .004** 1-3; 1-4
10 4.07 1.18 4.05 1.17 3.76 1.25 3.93 1.05 .013* 1-3;
2-3
12 3.22 1.29 2.95 1.35 2.91 1.26 2.69 1.19 .000*** 1-3; 1-4
14 3.26 1.29 3.22 1.33 2.99 1.29 2.96 1.29 .022* ninguno
16 4.07 1.03 3.69 1.20 3.80 1.17 3.96 0.99 .001** 1-2; 1-3; 2-4
18 4.06 1.22 3.98 1.17 3.92 1.05 3.83 1.10 .228 ninguno
20 3.43 1.15 3.41 1.23 3.35 1.15 3.36 1.03 .837 ninguno
22 3.76 1.14 3.55 1.21 3.35 1.16 3.19 1.19 .000*** 1-3; 1-4; 2-4
24 3.65 1.23 3.65 1.22 3.44 1.20 3.54 1.12 .176 ninguno
26 4.22 1.07 4.06 1.11 3.85 1.25 4.21 1.01 .001** 1-3;
4-3
28 4.13 1.10 3.93 1.10 3.83 1.10 3.69 1.12 .000*** 1-3;
1-4
*: Diferencias significativas al
nivel de p<.05 **: Diferencias
significativas al nivel de p<.01
***: Diferencias significativas al nivel de p<.001
3.1.
¿Existen diferencias en las actitudes de los alumnos hacia los contenidos de EF
y sus profesores, según el género?
Puesto que la literatura especializada nos ofrece
con frecuencia datos relativos a las diferencias de género en numerosos
aspectos del campo de la práctica físico-deportiva, recogemos en
Según los datos de
Tabla 5. Comparación de las
respuestas de los alumnos según el género en cada curso: Conducta del
profesor/a de Educación Física
1º Curso 2º Curso 3º Curso 4º Curso
varones mujeres t-test varones mujeres t-test varones mujeres t-test
varones mujeres t-test
Item X DS X DS p X DS X DS p X DS X DS p X DS X DS p
1 4.15 1.18 4.06 1.06 .555 3.88 1.27 3.80 1.32 .662 3.61 1.32 3.79 1.15 .257 3.54 1.38 3.69 1.18 .416
3 3.94 1.20 3.75 1.24 .248 3.56 1.27 3.48 1.37 .634 3.46 1.30 3.46 1.34 .985 3.65 1.22 3.47 1.27 .318
5 4.03 1.20 3.68 1.23 .033* 3.66 1.28 3.66 1.28 .984 3.59 1.27 3.50 1.25 .589 3.44 1.38 3.73 1.17 .119
7 3.55 1.11 3.51 1.16 .803 3.57 1.19 3.63 1.15 .718 3.58 1.11 3.80 1.05 .111 3.55 1.18 3.84 0.91 .061
9 3.90 1.09 3.76 1.19 .378 3.73 1.22 3.53 1.27 .204 3.50 1.23 3.55 1.20 .775 3.33 1.29 3.44 1.18 .536
11 3.72 1.25 3.74 1.06 .924 3.57 1.29 3.59 1.22 .920 3.27 1.22 3.39 1.16 .420 3.30 1.24 3.35 1.26 .789
13 4.05 1.05 4.02 1.10 .840 3.67 1.21 3.45 1.37 .191 3.51 1.24 3.61 1.14 .542 3.28 1.26 3.55 1.16 .121
15 4.06 1.08 3.79 1.19 .083 3.71 1.28 3.59 1.29 .479 3.39 1.32 3.51 1.31 .475 3.50 1.42 3.59 1.23 .659
17 3.60 1.19 3.37 1.20 .173 3.26 1.30 3.35 1.31 .585 3.30 1.17 3.09 1.23 .173 3.00 1.35 2.94 1.20 .742
19 4.17 1.07 4.04 1.09 .357 3.95 1.19 3.95 1.12 .999 3.76 1.23 3.92 1.04 .299 3.60 1.22 3.93 1.00 .044*
21 3.82 1.18 3.68 1.15 .381 3.86 1.08 3.69 1.15 .260 3.38 1.24 3.61 1.08 .130 3.20 1.22 3.45 1.16 .142
23 3.92 1.17 3.58 1.19 .032* 3.59 1.32 3.66 1.21 .681 3.39 1.23 3.60 1.19 .196 3.13 1.30 3.25 1.21 .522
25 3.81 1.31 3.68 1.28 .464 3.75 1.27 3.42 1.34 .051 3.47 1.25 3.42 1.26 .746 3.30 1.43 3.64 1.16 .085
27 3.67 1.30 3.59 1.18 .621 3.63 1.23 3.71 1.15 .620 3.43 1.27 3.48 1.15 .765 3.26 1.24 3.35 1.19 .580
29 4.03 1.15 3.81 1.03 .130 3.88 1.20 3.73 1.18 .330 3.55 1.32 3.70 1.13 .372 3.55 1.29 3.67 1.15 .476
*: Diferencias significativas al
nivel de p<.05 **: Diferencias
significativas al nivel de p<.01
***: Diferencias significativas al nivel de p<.001
Sin embargo, los resultados expuestos en
Tabla 6. Comparación de las
respuestas de los alumnos según el género en cada curso: Contenido de las
clases de Educación Física
1º Curso 2º
Curso 3º
Curso 4º Curso
varones mujeres t-test varones mujeres t-test varones mujeres t-test varones mujeres t-test
Item X DS X DS p X DS X DS p X DS X DS p X DS X DS p
2 4.19 1.00 3.77 1.08 .003** 3.67 1.19 3.80 1.09 .370 3.45 1.22 3.71 1.11 .086 3.33 1.40 3.61 1.06 .108
4 4.03 1.15 3.73 1.12 .052 3.86 1.16 3.63 1.29 .162 3.43 1.20 3.70 1.07 .069 3.37 1.30 3.66 1.10 .103
6 2.19 1.26 2.38 1.32 .281 2.71 1.41 2.72 1.23 .944 2.45 1.24 2.33 1.19 .423 2.21 1.45 2.05 0.97 .401
8 4.26 0.90 4.04 1.17 .126 3.94 1.18 4.00 1.12 .673 3.68 1.16 3.99 0.97 .026* 3.62 1.22 3.92 1.03 .072
10 4.16 1.15 3.99 1.20 .295 4.01 1.20 4.08 1.15 .620 3.52 1.38 3.98 1.08 .004** 3.90 1.10 3.96 1.02 .722
12 3.23 1.34 3.21 1.25 .911 3.04 1.33 2.88 1.37 .339 2.81 1.28 3.02 1.24 .200 2.89 1.29 2.54 1.10 .044*
14 3.61 1.19 2.95 1.30 .000*** 3.33 1.37 3.13 1.30 .245 3.22 1.29 2.76 1.25 .006** 3.33 1.34 2.70 1.18 .001**
16 4.14 0.94 4.01 1.10 .347 3.54 1.23 3.81 1.17 .088 3.68 1.15 3.92 1.17 .115 3.79 1.09 4.09 0.91 .041*
18 4.12 1.17 4.00 1.26 .462 3.88 1.27 4.05 1.09 .264 3.81 1.14 4.03 0.95 .097 3.68 1.18 3.94 1.04 .117
20 3.53 1.15 3.34 1.13 .219 3.57 1.25 3.27 1.19 .055 3.34 1.20 3.36 1.10 .869 3.45 1.19 3.29 0.89 .313
22 3.83 1.13 3.69 1.14 .336 3.48 1.23 3.60 1.20 .441 3.29 1.22 3.42 1.10 .379 3.05 1.23 3.29 1.15 .157
24 3.72 1.24 3.60 1.23 .470 3.70 1.23 3.61 1.21 .588 3.43 1.22 3.46 1.19 .845 3.44 1.22 3.61 1.03 .300
26 4.15 1.12 4.29 1.02 .302 3.94 1.24 4.17 0.97 .114 3.62 1.32 4.07 1.13 .006** 4.17 1.07 4.24 0.97 .631
28 4.15 1.05 4.11 1.14 .798 3.92 1.15 3.94 1.05 .892 3.74 1.21 3.92 0.98 .211 3.45 1.15 3.85 1.04 .012*
*: Diferencias significativas al
nivel de p<.05 **: Diferencias
significativas al nivel de p<.01
***: Diferencias significativas al nivel de p<.001
4. DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES
En esta investigación hemos examinado las actitudes de los alumnos de 1º a 4º curso de Educación Secundaria Obligatoria (ESO), hacia los contenidos de las clases de EF y la conducta de los profesores/as que la imparten.
Aunque nos hemos basado en gran medida en los
trabajo de Luke y Cope (1994), aplicando una traducción y adaptación de su
Cuestionario de Actitudes de los Alumnos Hacia
De los resultados obtenidos podemos concluir que
las actitudes de los alumnos, tanto hacia
Podríamos decir que, en general, los resultados obtenidos a través de este estudio coinciden en gran medida con los aportados por Luke y Cope (1994), no obstante, existen algunos matices diferenciales, por ejemplo, en su trabajo los alumnos rechazaban las pruebas de condición física como parte de la evaluación y calificación final, resultado que también habían obtenido Figley (1985), Luke y Sinclair (1991) y Silverman y Subramamam (1999), mientras que nuestros alumnos no plantean problemas a este respecto, valorando con 3.11 la conveniencia de realizar tales pruebas para que formen parte de la calificación final (si bien es cierto que esta opinión la apoyan más los alumnos que las alumnas, como se ha explicado anteriormente). Esta idea también la exponía Brustad (1996), explicando que los chicos son más partícipes de las actividades competitivas y de condición física, mientras que las chicas están más orientadas hacia los aspectos sociales de la educación física y el deporte.
Por tanto, podemos concluir diciendo que los
alumnos analizados valoran positivamente tanto las clases de EF como a los
profesores/as que las imparten, se encuentran poco estresados en su ambiente
educativo cotidiano, valoran también muy positivamente la variedad de actividades
y la inclusión de nuevos ejercicios y juegos cada trimestre, están de acuerdo
con que se incluya como parte de su calificación final la actitud y el
esfuerzo, prefieren participar en juegos de equipo más que en juegos
individuales, y valoran más a los profesores que dominan su materia (son buenos
conocedores de
El conocimiento por parte del profesor/a de lo que los alumnos piensan y sienten en las clases de EF, puede aportarle una importante herramienta para mejorar su ambiente diario de trabajo y favorecer el desarrollo de actitudes positivas hacia aquellos aspectos que aún no se encuentran suficientemente valorados.
Por último, como también indicaron Ryan y cols.
(2003), consideramos que aún se necesita seguir investigando en las actitudes
de los alumnos, los padres y la sociedad en general hacia las clases de EF y
sus profesores, para tomar en consideración los resultados obtenidos a favor de
una mejorar práctica docente, así como la elevación del estatus de
5.
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