ORIGINAL
CALIDAD DE VIDA PERCIBIDA Y ESFUERZOS
ESPECÍFICOS EN PERSONAS MAYORES
PERCEIVED
QUALITY OF LIFE AND THE SPECIFIC PHYSICAL ACTIVITIES BY THE ELDERLY
Gomez-Piriz, P.T.1; Puga González, E.2;
Jurado Gilabert, R.M.3 y Pérez Duque, P.4
1Doctor. Educación Física. Universidad de Sevilla. España
ptgomez@us.es
(https://personal.us.es/ptgomez/)
2Doctora. Educación Física. Universidad de Granada. España
(estherpu@yahoo.com)
3Licenciada en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte. España (roseliya@hotmail.com)
4Licenciado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte. España (pably86@hotmail.com)
Código
UNESCO / UNESCO code: 5899
Educación Física y deporte / Physical Education and Sport
Clasificación
del Consejo de Europa / Council of Europe Classification: 4. Educación física y deporte
comparado/Comparative physical education and sport / Comparative physical education and sport
Recibido 31de octubre de 2011 Received October 31, 2011
Aceptado 11 de
noviembre de 2013 Accepted November 11, 2013
Se
analizaron indicadores de salud con respecto a la percepción de la calidad de
vida (CVRS) mediante el cuestionario Short Form-36 Health
Survey (SF-36) y parámetros cinemáticos manifestados
en el movimiento press banca (12 kilos) como
predictores de las adaptaciones neurofisiológicas que se producen con la
actividad física. Se trataron valores de potencia, de velocidad, aceleraciones,
fuerza y variables temporales. Se utilizaron dos grupos, uno activo, de
práctica física habitual (12H, 6M, 68,4±5,6 años, 1,65±0,074m, 74,57±15,41kg,
BMI 26,93±4,02; act/sem
4,5±1,65h.), y otro sedentario (16H, 7M, 69 ± 7,07 años, 1,67 ± 0,072m, 74,95 ±
7,4kg, BMI 26,84±2,78) Se encontraron diferencias significativas (p<0,05;gl=1,39;dz=0,5). El grupo considerado activo se percibe con
mejor calidad de vida y manifiesta de manera más rápida y con mayor fuerza el
movimiento solicitado. Las conclusiones son relevantes para posteriores estudios
que se centren en la pérdida de propiedades neuromusculares acompañada a la
falta de práctica y al efecto del envejecimiento.
PALABRAS CLAVES: Personas mayores. Salud. Actividad física. Envejecimiento.
ABSTRACT
Quality of life related to health indicators
(QLRH) were analyzed by means of the Short Form-36 Health Survey (SF-36)
questionnaire and the specified kinetic parameters of the bench press movement
(12 kg) as predictors of the neurophysiological adaptations produced by
physical activity. These were the values of power, velocity, acceleration,
strength and temporal variables. Two groups were studied: the first group was
active, undertaking regular physical activity (12 male; 6 female; 68,4±5,6
years; 1,65±0,074m; 74,57±15,41kg; BMI 26,93±4,02; weekly activity 4,5±1,65h.);
the second group was sedentary (16 male; 7 female; 69±7,07 years; 1,67±0,072m;
74,95±7,4kg; BMI 26,84±2,78). Significant differences were found (p<0,05;df=1,39;dz=0,5). The group regarded as active considered
itself as having a better quality of life and was able to perform the requested
movement with greater speed and strength. The conclusions are relevant for
future studies that centre on the loss of neuromuscular properties accompanied
by a lack of physical activity and the effects of aging.
KEY WORDS:
Old people. Health. Physical activity.
Aging.
INTRODUCCIÓN
La presente investigación se dirige hacia un grupo
social en constante crecimiento y que reclama con urgencia atención, planificación,
innovación, educación programada e investigación. El beneficio de esta
orientación atencional no hace más que proyectar para los futuros mayores
mejores condiciones de vida. Las nuevas perspectivas de salud en mayores
necesita de la integración de muchos aspectos de sus vidas (Muñoz-Mendoza et
al, 2010). Desde la salud pública se establecieron la salud mental y la
capacidad funcional como los factores que más influyen en la percepción del
estado de salud y la calidad de vida de las personas mayores (Azpiazu et al, 2002). Guerra (2009) recomendó también
elaborar un sistema multidisciplinar para evitar sentimientos de segregación,
de depresión e inseguridad. Los aspectos relacionados con la calidad de vida
son muchos; su incidencia relacional o grupal, aspectos cognitivos sobre
longevidad, así como las circunstancias especiales en los procesos del
envejecimiento referidas a aspectos neurofisiológicos.
Al respecto, han existido grandes diferencias entre
el autoestereotipo, que muestran los mayores, y el heteroestereotipo analizado socialmente (Gómez y León del
Barco, 2010). En general, la percepción
de la salud, percepción de las limitaciones a causa de enfermedades,
realización de ejercicio físico y satisfacción vital se han considerado como
predictores del nivel de dependencia en personas mayores (Gázquez
et al, 2008). En dicho estudio, a medida que aumenta la satisfacción vital y la
realización de actividades físicas, disminuye el nivel de dependencia.
Para medir la Percepción de la Calidad de Vida en
Relación con la Salud (en adelante CVRS.) uno de los instrumentos genéricos más
utilizados en la medición es el cuestionario SF-36 por sus buenas propiedades
psicométricas (Garratt et al, 2002), que junto a la
multitud de estudios ya realizados lo han convertido desde hace tiempo en uno
de los instrumentos con mayor potencial en el campo de la CVRS. Es una escala
que proporciona un perfil del estado de salud y es aplicable tanto a los
subgrupos específicos como a la población general, permitiendo valorar hasta el
estado de salud de pacientes individuales.
Por otro lado, en cuanto a la influencia del
ejercicio en la salud de las personas mayores, son asumidos diversos beneficios
con la práctica general de actividad física de intensidad leve o moderada
(ACSM., o Instituto Nacional sobre el Envejecimiento, NIA. EEUU.; Heyward, 2008). También se encontraron beneficios con otras
más específicas, como la práctica de algunas artes marciales en la mejora de
las perspectivas de salud en mayores (Carrillo, Gómez y Vicente, 2009), incluso
se recomiendan mejoras en la cualidad fuerza para la obtención de una mejor
calidad de vida y para que las actividades cotidianas no resulten tan
difíciles, evitando riesgos, y disminuyendo el número de caídas (Lara, Miranda
y Moral, 2008; Pizzigalli et al, 2011). La diversidad
de beneficios se mostró así mismo sobre capacidades específicas como el
equilibrio y estabilidad (Foschi et al., 2010) o
sobre equilibrio y agilidad (Sampedro, Meléndez y Ruiz, 2010).
Los perfiles de activación muscular van
disminuyendo con la edad, se han mostrado diferencias con respecto a sujetos
más jóvenes en movimientos con altas cargas (Hoffrén,
Ishikawa & Komi, 2007), o en saltos desde una altura previa (Candow & Chilibeck, 2005).
Estos patrones de activación reflejan, en los mayores, una disminución de la
eficiencia para realizar diversos trabajos, así como una mayor rigidez en las
articulaciones (Van Dieen, Cholewicki
& Radebold, 2003; Morse et al, 2004).
Las fibras musculares inervadas por isoformas rápidas (tipo II), destinadas especialmente a
acciones que requieren rapidez, parecen ser más vulnerables al envejecimiento
por atrofia selectiva, más que por desaparición del número de fibras (Izquierdo
y Aguado, 1999), en relación a ello la involución de la cualidad fuerza, así
como su retardo con la práctica de actividad física regular, ha quedado
suficientemente constatada (Carbonell, Aparicio y Delgado, 2009). Pero para Duchateau, Klass and Baudry (2006) la evolución de la adaptación al entrenamiento
del sistema neuromuscular durante el envejecimiento no solo se manifiesta por
razones de fuerza sino también debido a los recursos del mayor en tareas de
precisión y control neural. Estos autores concluyeron en la existencia de
reversibilidad de estos procesos con el entrenamiento en personas mayores.
Estas adaptaciones neuronales van a ser solicitadas
en tareas de diversas exigencias; soportar pesos adicionales, responder rápido
a una alteración repentina del entorno más próximo, en general, cada vez que se
exija preactivación y, sobre todo, se requiera un
control de la actividad con el predominio de las cualidades coordinativas (Gomez-Piriz, 2011). Con ello se explica la rápida respuesta
en situaciones de estrés, permitiendo entre otras características, una mayor
capacidad de aplicar fuerza, o hacerlo con mayor Índice de Manifestación de
Fuerza (IMF, Rate of Force Development RFD.), es decir, mayor incremento de fuerza por
unidad de tiempo (González-Badillo y Gorostiaga,
1995). También mejoran la capacidad de aplicar más fuerza durante el movimiento
o hacerlo a más velocidad. Las características cinemáticas con las que se
manifiesta el movimiento permiten valorar estas adaptaciones neurofisiológicas
que se producen con la actividad física.
Las hipótesis de investigación se definen en
función de parámetros observables, en este caso, sobre la base de las variables
de la percepción de la calidad de vida (CVRS.) mediante el cuestionario SF-36,
por un lado, y las variables cinemáticas manifestadas en un ejercicio
específico de press banca, por otro. Para demostrar tales
afirmaciones, se han establecido las siguientes hipótesis:
1. Las personas mayores activas perciben mejor la
calidad de vida que las sedentarias sobre la base del cuestionario SF-36.
2. Existen diferencias significativas
estadísticamente entre las personas mayores activas y sedentarias en las
variables cinemáticas manifestadas en el movimiento press banca obtenidas
mediante un medidor de posicionamiento lineal.
3. Existen correlaciones positivas entre el grupo
de variables que miden la CVRS. mediante SF-36 y las
variables cinemáticas analizadas, demostrando que a mayor percepción de la
calidad de vida mejores resultados en el movimiento press banca para las variables cinemáticas obtenidas.
OBJETIVOS
Los siguientes objetivos explican la orientación
dada en la presente investigación:
- Evaluar y analizar las diferencias en cuanto a la
CVRS., sobre la base del cuestionario SF-36, entre personas mayores activas y
sedentarias.
- Evaluar y analizar las diferencias en cuanto a
las variables cinemáticas manifestadas en press banca entre personas mayores activas y sedentarias.
- Correlacionar ambas variables: 1, las personas
activas manifiestan mejores procesos neurofisiológicos en las condiciones de
investigación establecidas, y 2, las personas activas perciben mejor calidad de
vida mediante el SF-36. Estas relaciones deben interpretarse como indicios de
posible relación causa-efecto para futuras investigaciones.
PARTICIPANTES
Las características de la muestra se muestran en
tabla 1. Para considerar a un sujeto en el grupo activo debía realizar al menos
3 sesiones semanales de actividad física variada de 60’ de duración como mínimo
(Lara, Miranda y Moral, 2008), 3.46h. semanales, en
hombres, y 2.53h, en mujeres, fue la media obtenida en los hábitos de actividad
física de los mayores en España (Martínez del Castillo et al., 2009).
Tabla 1. Características de la muestra.
Sujetos (41*) |
H |
M |
Edad |
Altura |
Peso |
BMI |
Act/sem1 |
Activos
(18) |
12 |
6 |
68,40
± 5,60 |
1,65
± 0,074m |
74,57
± 15,41kg |
26,93
± 4,02 |
4,50
± 1,65 |
Sedentarios
(23) |
16 |
7 |
69
± 7,07 |
1,67
± 0,072m |
74,95
± 7,4kg |
26,84
± 2,78 |
0 |
*Tamaño
muestral con un error α de 0.05, una potencia
del estudio 0.34 (1-β) y un tamaño de efecto de 0.5, medio/grande
(Cohen, 1988; 1992). La proporción del tamaño de muestra fue de 0.78,
considerando las hipótesis a demostrar de dos colas. 1.
Horas de actividad por semana. |
Los participantes son sujetos mayores del municipio
de Sevilla. Dieron su consentimiento informado para la participación voluntaria
en el estudio, detallándoseles el objetivo y la naturaleza de cada prueba, los riesgos
asociados y los beneficios esperados, asegurándoles la confidencialidad del
proceso. Los criterios de exclusión para la realización de los diferentes test
fueron; padecer enfermedad pulmonar o cardiovascular, hipertensión,
limitaciones ortopédicas al ejercicio o uso de fármacos betabloqueantes. Esta
investigación fue aprobada por el Comité Ético de la Universidad de Sevilla,
siguiendo las normas de la Declaración de Helsinki (revisión 2.004).
INSTRUMENTOS
Se utilizó el Cuestionario SF-36 para la medición
de CVRS. con 36 ítems organizados en las dimensiones
esquematizadas en Tabla 1.
Tabla 1. Dimensiones del Cuestionario SF-36 para la medición de la CVRS (adaptado de Freire de Oliveira, 2007)
Dimensiones |
Características que valora |
|
|
Función
física (PF) |
Grado
en el que la falta de salud limita las actividades físicas de la vida diaria,
como el cuidado personal, caminar, subir escaleras, coger o transportar
cargas, y realizar esfuerzos moderados e intensos. |
||
Función
social (SF) |
Grado
en el que los problemas físicos o emocionales derivados de la falta de salud
interfieren en la vida habitual. |
||
Rol
físico (RP) |
Grado
en el que la falta de salud interfiere en el trabajo y otras actividades
diarias, produciendo como consecuencia un rendimiento menor del deseado, o
limitando el tipo de actividades que se puede realizar o la dificultad de las
mismas. |
||
Rol
emocional (RE) |
Grado
en el que los problemas emocionales afectan al trabajo y otras actividades diarias,
considerando la reducción del tiempo dedicado, disminución del rendimiento y
del esmero en el trabajo. |
||
Salud
mental (MH) |
Valoración
de la salud mental general, considerando la depresión, ansiedad, autocontrol
y bienestar general. |
||
|
|
|
|
Vitalidad
(VT) |
Sentimiento
de energía y vitalidad, frente al de cansancio y desánimo. |
||
Dolor
corporal (BP) |
Medida
de la intensidad del dolor padecido y su efecto en el trabajo habitual y en
las actividades del hogar. |
||
Salud
general (GH) |
Valoración
personal del estado de salud, que incluye la situación actual, las
perspectivas futuras y la resistencia a enfermar. |
||
Percepción
de la Salud General (PCS) |
|
||
Cambio
de Salud en el tiempo (MCS) |
|
||
Para la cuantificación de los datos se realizó una
transformación lineal de las puntuaciones a una escala entre 0 y 100, teniendo
un recorrido desde 0 (el peor estado de salud para esa dimensión) hasta 100 (el
mejor estado de salud).
Para la medición de las variables cinemáticas se
usó el Medidor de posicionamiento lineal (MPL), dinamómetro inercial (Model TF-100, T-Force System Ergotech, Murcia, España)
con una constante de calibración K= 0,4899 (software T-Force
v. 2.28).
Para la realización del ejercicio una barra de
alzamiento (1.200mm, 7kg) y dos discos (2,5kg) adicionales (marca Salter).
Se establecieron como variables independientes de
investigación el grupo Activo y Sedentario al que pertenecían los sujetos. Las variables
dependientes de investigación, en cuanto a la CVRS. mediante
el cuestionario SF36, fueron las dimensiones descritas anteriormente (Tabla 1). En relación a las
variables cinemáticas (VC) se establecieron las siguientes: pico de potencia
máxima (power máximum, PMAX), tiempo para la
obtención de la potencia máxima (time power max., TºPMAX), duración del
ejercicio (time exercise up, TºSUBE),
velocidad máxima en fase propulsiva (speed average phase propulsive,
VMFPRO), velocidad máxima en el ejercicio (speed max., VMAX), tiempo para la obtención de velocidad máxima
(time speed max., TVMAX),
aceleración máxima en fase propulsiva (aceleration average phase propulsive,
AMFPRO), aceleración máxima en el ejercicio (aceleration
max., AMAX), duración de fase propulsiva (time phase propulsive, TFPROPUL),
fuerza máxima manifestada (strenght max., FMAX) y tiempo para la obtención de fuerza máxima
(time strenght max., TºFMAX).
PROCEDIMIENTO
Los ensayos consistieron en la realizaron del
movimiento press banca con la barra de peso libre más
dos discos de peso adicional (total 12kg). La posición inicial fue: decúbito
supino en banco, rodillas flexionadas y pies apoyados en el mismo, codos 90º en
flexión y hombros 90º en abducción. La distancia de separación de las manos se
evaluó previamente, el agarre permitió las angulaciones en las articulaciones
descritas en esa posición inicial, bajando hasta 4-6cm del pecho del sujeto (Chulvi y Cantalejo, 2008).
Los sujetos fueron entrenados para la realización
correcta del ejercicio. Los sujetos desplazaron la barra hacia arriba
verticalmente, de manera libre, en un movimiento concéntrico y con la intención
de hacerlo a la máxima velocidad. Se realizaron 3 ensayos por sujeto, con 30’’
de descanso entre ellos, seleccionándose el ensayo que mostró mayor Potencia (power maximum). El dispositivo de
medición se colocó en el lateral de la barra. Posterior a la realización del
test los sujetos realizaron el cuestionario SF-36.
ANÁLISIS ESTADÍSTICO
El análisis de datos se desarrolló con el paquete Statistical Package for the Social Sciences (SPSS Inc., versión 18, Chicago, IL). Se realizó
estadística descriptiva, U de Mann-Whitney para el contraste de hipótesis, con
potencia, grados de libertad, tamaño de efecto encontrado y un valor de p≤0.05.
Se realizan pruebas de correlaciones utilizando el estadístico Rho de Spearman. Se evaluó el tamaño de efecto y la potencia
estadística (G*Power 3.1.0 Universität
Kiel, Germany), obtenidos en cada caso de acuerdo con
los niveles propuestos por Cohen (1988; 1992).
RESULTADOS
Los descriptivos de cada variable, el valor de los
estadísticos, el de significación, grados de libertad y tamaño de efecto se
pueden observar en Tabla 2, con respecto a la
variable Calidad de Vida relacionada con la Salud (CVRS.) en personas mayores
activas y sedentarias y, en Tabla 3, en relación al grupo
de variables cinemáticas. En gráficos 1, 2 y 3 se representan dichas variables.
Tabla 2. Resultados variable Calidad de Vida relacionada con la Salud (CVRS.) en personas mayores sedentarias y activas.
CVRS |
Mayores Activos |
Mayores Sedentarios |
U de Mann-Whitney |
p |
PF |
91,39 ± 8,37* |
72,61 ± 26,33 |
130 |
0,039 |
RP |
93,05 ± 18,8 |
67,39 ± 43,59 |
150 |
0,062 |
BP |
85,11 ± 22,16* |
70,65 ± 18,87 |
131,5 |
0,04 |
GH |
85,89 ± 11,03* |
60,26 ± 16,12 |
39,5 |
0,000 |
VT |
84,72 ± 12,42 |
80,65 ± 16,87 |
185 |
0,559 |
SF |
91,66 ± 10,50 |
72,83 ± 30,77 |
139 |
0,059 |
RE |
90,74 ± 25,06* |
60,87 ± 41,02 |
119,5 |
0,009 |
MH |
84,44 ± 16,8 |
74,26 ± 22,5 |
155 |
0,169 |
PCS |
54,07 ± 5,67* |
46,67 ± 10,65 |
110 |
0,011 |
MCS |
55,84 ± 7,94 |
50,08 ± 13,31 |
163 |
0,248 |
* Diferencias
estadísticamente significativas (p<0,05; gl=1,39,
dz=0,5) |
Se encontraron diferencias, estadísticamente
significativas, a favor del grupo considerado activo, para el grupo de variable
dependiente CVRS. (Tabla 2, Gráfico 1), en las siguientes dimensiones: PF
(Función física), BP (Dolor corporal), GH (Salud general), RE (Rol emocional) y
PCS (Percepción de la Salud General). Se encontraron diferencias
significativamente estadísticas, a favor del grupo considerado activo, para el
grupo de variable dependiente variables cinemáticas (Tabla 3, Gráfico 2 y 3),
en concreto en: duración del ejercicio (time exercise
up), velocidad máxima en fase propulsiva (speed max.), tiempo para la obtención de velocidad máxima (time speed max.), aceleración máxima
en fase propulsiva (aceleration average
phase propulsive),
aceleración máxima en el ejercicio (aceleration max.), duración de fase propulsiva (time phase propulsive), fuerza máxima
manifestada (strenght max.)
y tiempo para la obtención de la potencia máxima (time power
max.). Todas ellas con un tamaño de efecto
medio/alto.
Hay que constatar la no existencia de
significatividad estadística en las variables velocidad máxima (speed max.) y potencia máxima (power máximum) aunque se encuentren muy próximo a las
mismas (p=0,055 y p=0,098 respectivamente).
Tabla 3. Resultados variables cinemáticas en press banca en personas mayores sedentarias y activas.
Variables Cinemáticas |
Mayores Activos |
Mayores Sedentarios |
U de Mann-Whitney |
p |
Time exercise up (ms) |
500,33 ± 158,49* |
777,26 ±
391,11 |
111,50 |
0,012 |
Speed average phase propulsive (cm/s) |
1,10 ± 0,40* |
0,68 ±
0,36 |
89 |
0,002 |
Speed max. (cm/s) |
1,60 ±
0,46 |
1,24 ±
0,61 |
134 |
0,055 |
Time speed max. (ms) |
274,66 ±
102,04* |
413 ±
137,27 |
77,50 |
0,001 |
Aceleration average phase propulsive (cm/s2) |
4,21 ±
3,53* |
2,01 ±
2,25 |
121 |
0,024 |
Aceleration max.
(cm/s2) |
15,46 ±
9,52* |
6,06 ±
3,44 |
74 |
0,000 |
Time phase propulsive (ms) |
402,05 ±
200,41* |
725,22 ±
430,22 |
103 |
0,006 |
Strenght max. (N) |
303,21 ±
114,29* |
190,45 ±
41,34 |
74 |
0,000 |
Time strenght max. (ms) |
25,55 ±
44,23* |
190,61 ±
149,29 |
32 |
0,000 |
Power máximum (w) |
256,35 ±
105,11 |
193,74 ±
115,21 |
144 |
0,098 |
Time power max. (ms) |
196,39 ±
123,24* |
357,87 ±
138,74 |
70,50 |
0,000 |
* Diferencias
estadísticamente significativas (p<0,05; gl=1,39, dz=0,5) |
Gráfico 1. Variable Calidad de Vida relacionada con la Salud (CVRS.) en personas mayores sedentarias y activas (* dif. Sig.)
Gráfico 2. Variables cinemáticas en press banca (1) en personas mayores
sedentarias y activas (* dif. Sig.)
Gráfico 3. Variables cinemáticas en press banca (y 2) en personas mayores
sedentarias y activas (* dif. Sig.)
En cuanto a las correlaciones; la dimensión Función
Física (PF) correlaciona con todas las variables cinemáticas obtenidas de manera
significativa media/baja (Cohen, 1992), siendo moderada/alta con velocidad max (Rho=0,601, p=0,000). La valoración personal del estado
de salud (GH) correlaciona con strenght max. (Rho=0,621,
p=0,000) y la percepción de la salud a nivel general (PCS) con todas de manera
débil, además de con el tiempo destinado a obtener la fuerza máxima manifestada
(time strenght max.).
(Rho=0,461, p=0,002).
DISCUSIÓN
Los resultados obtenidos en cuanto a ambas variables
de investigación, en general, han sido mayores en personas activas que en
sedentarias. En comparación con otros estudios se han mostrado muy superiores
las relativas a CVRS, en estos los valores de las distintas dimensiones superan
por muy poco el valor de 50 (Kimura et al., 2010).
Por ejemplo, el mayor valor obtenido en dicho estudio correspondió a la
dimensión vitalidad (VT), con 57,1 ± 8,4, en nuestro estudio el valor de dicha
dimensión ha sido de 84,72 ± 12,42 en activos y 80,65 ± 16,87 en sedentarios.
La Función Social (SF) en los sujetos activos de nuestra muestra ha obtenido
91,66 ± 10,50, frente a 53,6 ± 6,3 en el estudio referenciado. Tales
diferencias mostradas en CVRS pueden deberse, entre otros aspectos, a la
diferencia de edad en la muestra utilizada, 73,6 ± 4,7 años en sujetos activos,
frente a 68,4 ± 5,6 de nuestro estudio. Todo ello confirma que la edad, el
envejecimiento, es un factor determinante para la percepción de CVRS (Guerra,
2009; Gázquez et al., 2008).
El contraste de hipótesis constata que las personas
mayores activas perciben mejor la calidad de vida que las sedentarias sobre la
base del cuestionario SF-36 (Hipótesis 1), concretamente en las siguientes
dimensiones: Función física (factor que limita las actividades físicas de la
vida diaria, que incluye esfuerzos leves, moderados e intensos), Dolor corporal
(percepción del dolor padecido y su efecto en actividades habituales), Salud
general (Valoración de la salud mental y bienestar general), Rol emocional
(relación de problemas emocionales con el rendimiento) y Percepción de la Salud
General (PCS). Estos elementos fueron considerados predictores del nivel de
dependencia en personas mayores (Gázquez et al.,
2008), por lo que las personas mayores activas podrán obtener un mayor nivel de
independencia que las consideradas sedentarias.
También se confirma la existencia de diferencias
entre las personas mayores activas y sedentarias en las variables cinemáticas
manifestadas en el movimiento press banca
(Hipótesis 2). Los datos obtenidos reflejan que las personas mayores activas
reducen los tiempos de ejecución del ejercicio (time exercise
up, time speed max., time phase propulsive, time strenght max. y time power max.), aplican más fuerza
ante la misma carga externa (strenght max.), lo hacen más rápido (speed
average phase propulsive) y manifiestan el movimiento con más aceleración
(aceleration average phase propulsive y aceleration max.).
Al respecto habría que considerar dos aspectos
relevantes. Por un lado, las variables que explican el movimiento completo
pueden verse afectadas por una fase de desaceleración implícita en el propio
movimiento, más aún en el press banca de
cadena cinética corta (González-Badillo y Ribas, 2002). Por otro lado, para
todas las variables referidas a la fase propulsiva, en la que se obvia esa
desaceleración y que explica de mejor manera las características cinemáticas
que se han producido (Sánchez-Medina, Pérez y González-Badillo, 2010) las
diferencias fueron estadísticamente significativas. Es por ello por lo que
supone una adecuada afirmación general la aceptación de la existencia de dichas
diferencias, a favor del grupo activo, en la totalidad de las variables
cinemáticas medidas (Hipótesis 2).
Estas adaptaciones neuronales, que permiten mejorar
las variables cinemáticas del ejercicio, también fueron halladas en mayores en
tareas referidas a la mejora en la respuesta, en cuanto a tiempos de reacción,
menor en personas mayores sometidas a entrenamiento (Kimura
et al., 2010). Estos hallazgos desvelaron que, además de la mejora en los
tiempos, el % de respuestas correctas fueron también superiores en las personas
mayores entrenadas.
Las actividades habituales destinadas a mayores no
están caracterizadas tradicionalmente por la calidad de movimiento, en cuanto a
precisión, rapidez o control como base de las mismas (Duchateau,
Klass & Baudry, 2006).
Se les presentan tareas fáciles de ejecutar, con mínima exigencia física
(González y Vaquero, 2000), orientadas generalmente hacia su sistema
cardiorrespiratorio, con intensidad leve o moderada y en relación a su gasto
energético, que decrece con la edad (Aoyagi & Shephard, 2010). Sobre la base de los resultados obtenidos,
incluir también tareas con compromiso neuromuscular permitirá enlentecer la
pérdida de eficiencia para la realización de diversos trabajos que requieran
este patrón de activación (Morse et al., 2004).
Existieron correlaciones positivas entre el grupo
de variables que miden la CVRS., mediante SF-36, y las variables cinemáticas
analizadas (Hipótesis 3), confirmando que a mejor percepción de la calidad de
vida mejores resultados en el movimiento press banca. Es importante resaltar la correlación existente entre la
variable PF (Función Física) y todas las variables cinemáticas, especialmente
con la velocidad máxima (Rho: 0,601), debido a que esta dimensión agrupa las
percepciones que tiene el mayor con respecto a las directamente vinculadas a la
falta de salud que limita sus actividades físicas de la vida diaria. También
existe correlación entre los datos obtenidos en la variable fuerza máxima
alcanzada en el movimiento y la variable referida a la valoración personal del
estado de salud (GH, rho= 0,621). Algo similar ocurre con los valores de PCS,
determinada por la percepción de la salud a nivel general, y los valores de las
variables cinemáticas, aunque con menor fuerza que las anteriores.
Los resultados obtenidos hacen interpretar que las
tareas a proponer a nuestros mayores deben contener también patrones de
activación rápidos, precisos y con requerimiento de orientaciones hacia el
control del movimiento, sometiendo a las personas mayores a situaciones que,
progresivamente, les permitan adaptarse y estar preparados para situaciones
sobrevenidas; respuestas rápidas a entornos cambiantes, evitación de caídas,
etc. León-Prados et al. (2011) encontraron
correlaciones entre la cantidad de actividad física realizada, el grado
de autonomía física y las dimensiones en SF-36 en todos los grupos de edad. Las
mejoras en todas las capacidades, por efecto múltiple, obtenidas en personas
mayores por el hecho de realizar actividad física de manera habitual no debe
ser óbice para obviar la necesidad de producir adaptaciones a estos otros
estímulos. De igual manera, se hace necesaria la sincronización entre la autopercepción
de su calidad de vida (autoesterotipo) con sus
adaptaciones neuromusculares individuales, en un intento de estrechar vínculos
entre percibirse con mejor salud para la realización de trabajos habituales a
la vez que sentirse capaz motrizmente.
CONCLUSIÓN
Las consecuencias directas de la investigación son
relevantes para posteriores estudios que se centren en la pérdida de
propiedades neuromusculares acompañada a la falta de práctica o al efecto del
envejecimiento. Los resultados obtenidos muestran que las personas mayores
activas perciben mejor la calidad de vida (CVRS) que las sedentarias,
diferencias que se encontraron estadísticamente significativas para las
dimensiones que directamente están vinculadas con su vida diaria: para las
actividades físicas diarias (cuidado personal, caminar, subir escaleras,
transportar cargas y esfuerzos moderados e intensos), para la percepción del
dolor y su efecto en actividades habituales, para la percepción de la salud
general, salud mental y bienestar general e incluso se encontraron diferencias
en la relación de sus problemas emocionales con el
rendimiento.
Las personas mayores activas manifiestan mejores
procesos neurofisiológicos expresados en las características cinemáticas con
las que realizaron el press banca, esto se ha
demostrado abstrayendo los resultados hacia la fase propulsiva del movimiento.
Los datos obtenidos muestran también que los tiempos de ejecución, de obtención
de la velocidad máxima, de la fuerza máxima alcanzada y del pico de potencia
son menores en el grupo activo que en el sedentario. De la misma manera, las
personas activas aplican más fuerza, con más aceleración y muestran mayor
rapidez durante la ejecución del movimiento objeto de estudio. Estos beneficios
tienen como causa la realización de actividad física general pero determinan
una información clave en las posibles modificaciones de tareas, orientadas
hacia un compromiso neuromuscular mayor en cuanto a control, rapidez y
precisión del movimiento requerido, siempre en adecuación con las
características particulares de este núcleo de población.
El autoesterotipo
mostrado por los mayores activos y sedentarios en esta investigación debe
tenerse en cuenta en los diversos programas a los que se someten. Las
correlaciones demostradas entre la percepción de la calidad de vida y las
variables cinemáticas en mayores confirman la inevitable vinculación de dos
aspectos relevantes en sus vidas: percibirse con mejor estado de salud y poder
realizar los movimientos cada vez más rápidos y con mayor fuerza.
Por último, los objetivos alcanzados permiten
afirmar que, en las evaluaciones de los programas de actividad física en los
que participen personas mayores, tanto la percepción de la calidad de vida con
el uso del cuestionario SF-36, como la referida a parámetros cinemáticos
mediante monitorización, deben establecerse como indicadores en el control y
seguimiento de las adaptaciones que se producen.
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