Rev.int.med.cienc.act.fís.deporte – vol. 4 - número 14 - junio 2004 - ISSN:
1577-0354
Moya Morales, J.M. (2004). Comparación del IMC y
grasa corporal
COMPARACIÓN DEL
IMC Y GRASA CORPORAL EN ADOLESCENTES
Moya
Morales, J.M.
Licenciado en Ciencias de
Maestro especialista en Educación Física
Doctorando de
El objetivo del estudio es determinar si existe
diferencias significativas entre el índice de masa corporal (IMC) y el
porcentaje de grasa corporal entre futbolistas y no futbolistas de 14 y 16
años.
Las pruebas realizadas para la obtención de datos
fueron el peso, la talla y cuatro pliegues corporales (subescapular,
tricipital, bicipital y suprailíaco) y se estudió el porcentaje de masa grasa,
el IMC, si practicaban o no fútbol de forma competitiva y habitual y si
practicaban otra actividad física no competitiva.
Los 54 sujetos estudiados fueron los
pertenecientes a los equipos Cadete A (11) e Infantil A (15) de
Los resultados obtenidos nos indican
que no existen diferencias
significativas entre futbolistas y no futbolistas, con independencia de la
edad, mientras que sí hay algunas diferencias significativas entre las diferentes
edades,tanto en futbolistas como en no futbolistas, en los parámetros
estudiados.
PALABRAS
CLAVE: IMC, porcentaje de grasa
corporal, antropometría, fútbol, adolescentes.
The objective of the study is to determine if it
exists significant differences between the IMC and the percentage of body fat
in soccer players and non soccer players of 14 and 16 years.
The realized tests for the
obtaining of data, were the weight, the height and four skinfolds
(subescapular, triceps, biceps and supraspinale) and was study the percentage
of body fat, BMI, if they practice competitional soccer or not and if they
practice other kind of no competition physical activity.
The studied subjects were
belonging to the teams Cadete A(11) and
Infantil A (15) of the Agrupación Deportiva Colmenar Viejo, and to the boys of
the 2nd of secondary C and D, and 4th of secondary A and
D, who were been born in 1988 and 1990 of the IES Rosa Chacel.
The obtained results indicate
that significant differences don't exist between footballers and non
footballers, with independence of the age, while the differences among the
different ages,in footballers like in non footballers, they are significant in
the studied parameters.
KEY WORDS: BMI, percentage
of body fat, soccer, anthropometry, adolescents, percentage of body fat .
El cambio de hábitos de los jóvenes de
nuestros días es todo un hecho. La tecnología, los aparatos electrónicos,
ordenadores y consolas, entre otros, se han hecho un hueco en la vida actual.
Todo ello podría ser un síntoma de progreso y evolución si no llevara acarreado
otro tipo de perjuicios: sedentarismo, falta de actividad física, de disfrute
del tiempo libre de forma saludable, aumento del colesterol y de la grasa
corporal.
En este estudio lo que se pretende es
descubrir si la práctica deportiva habitual de un deporte predominantemente
aeróbico, como es el fútbol, en jóvenes de 14 y 16 años ayuda a mantener unos
niveles del índice de masa corporal (IMC) y de la grasa corporal dentro de los
límites de la salud y que diferencias existen con aquello jóvenes que no
realizan actividad física de forma regular.
Si bien la presencia de una
determinada cantidad de grasa es necesaria para mantener una correcta salud, es
evidente que los excesos de niveles de grasa interfieren en el correcto
funcionamiento de organismo: como hipertensión, hiperlipidemia, diabetes tipo
2. (1) Así mismo el resumen ejecutivo de las pautas
clínicas en la identificación, evaluación, y tratamiento de sobrepeso y
obesidad en los adultos, en ACSM(1) propone un baremo del IMC para catalogar el riesgo
de enfermedad asociada a la obesidad y con el perímetro de la cintura:
|
|
Riesgo
de enfermedad relacionado con el peso normal y la circunferencia de la
cintura |
|
|
IMC, kg/m2 |
Hombres:
102 ó + cm Mujeres:
88 ó + cm |
Hombres:
Mujeres:
- |
Insuficiente |
<
18,5 |
… |
… |
Normal |
18,5 –
24,9 |
… |
… |
Sobrepeso |
25,0 –
29,9 |
Aumento |
Alto |
Obesidad,
tipo |
|
|
|
I |
30,0 –
34,9 |
Alto |
Muy alto |
II |
35,0 –
39,9 |
Muy alto |
Muy alto |
III |
40 ó + |
Extremadamente
alto |
Extremadamente
alto |
Así mismo, la relación entre la actividad física y la adiposidad en niños
es muy compleja, especialmente en edades tempranas y los estudios que hay son
inconsistentes. Pero incrementando la actividad física mientras se restringe el
consumo de calorías ha sido documentado como una estrategia efectiva para
perder peso (2).
Como ocurre con los adultos, el sobrepeso en niños
incrementa el riesgo de tener problemas de salud, desrregularización de la
hormona del crecimiento y problemas respiratorios y ortopédicos.(2) Pero debido a la gran cantidad de procesos
metabólicos que se producen en estas edades, con base en la maduración, es
complicado determinar unos modelos estandarizados sobre porcentaje de grasa
corporal e IMC. Todo esto teniendo en cuenta a una población sedentaria, ya que
si nos referimos a atletas, seguramente tendrán un IMC más elevado debido a la
masa ósea y a una mayor masa exenta de grasa. Tomando los parámetros de los
adultos como orientativos, analizaremos el análisis de los datos obtenidos.
Hasta ahora nos hemos centrado en una de las variables
estudiadas, el IMC, pero debido a la gran variabilidad de dicho índice, existen
gran variedad de estudios en los que tienen en cuenta la proporción de grasa
corporal para realizar diferentes comparativas.
En un estudio de Rienzi et al. 1996 en (3) indica una serie de características de los
futbolistas maduros de élite, en los que se aprecia un porcentaje de grasa
adiposa de 10.6 (+- 2.6) en los participantes de
Continuando con el estudio de jóvenes futbolistas, Reilly
et al.(5) en un estudio de futbolistas de entre 15 y 16 años
pertenecientes a diferentes equipos, uno de élite y otro no de élite, llega a
la conclusión de que los deportistas del equipo de elite pesan menos y tienen
menos grasa corporal que los que no son de élite, todo esto dentro de un
contexto multidisciplinario para identificar al futbolista talentoso. En otro
estudio también con jóvenes (10-12 años) jugadores de élite y no élite (6) indica que los del equipo de élite son más altos,
más delgados y más maduros (caracteres sexuales) que los que no son de élite.
Hasta ahora lo que se ha comparado han sido dentro de un
grupo de deportistas, lo pertenecientes a un grupo de élite y otros que no
pertenecían a tal grupo. Acercándonos a nuestro objeto de estudio, Seabra
realiza una comparación de futbolistas y no futbolistas entre los 12 y 16 años
de edad e indica: “Al afirmar que los
jóvenes atletas son diferentes de los no atletas de su edad y sexo, debemos
cuestionar si esa diferencia es debida al entrenamiento o a la variabilidad del
proceso e maduración, dado que una gran parte de las diferencias en las
dimensiones, formas, composición del cuerpo y performace es gobernada por el
estado de maduración.” (7) En las conclusiones de dicho estudio y en los
aspectos que en este estudio se refieren (peso, talla, IMC y grasa corporal)
afirma que los futbolistas son superiores en peso y talla, pero solo
estadísticamente significativas fueron en las categorías de iniciados y
juveniles. Sobre la grasa corporal indica que los no futbolistas presentaron
niveles superiores de grasa corporal que los futbolistas. Así mismo cita a dos
estudios realizados por Bailey & Martín y Malina en los que indica que los
chicos mas activos y los atletas infato-juveniles poseen una menor masa grasa e
mayor maya exenta de grasa (masa muscular) cuando se comparan con los
moderadamente o normalmente activos y los no atletas.
Sujetos: El estudio se llevó a cabo con los jugadores
nacidos en 1988 del Cadete A, 11 chicos, y los nacidos en 1990 del Infantil A,
16 chicos, de
Materiales: Para llevar a cabo las mediciones antropométricas
se utilizó:
-
Báscula Soehnle Body Balance Pacific. Precisión:
-
Lipometro Harpender.
Precisión: 2mm. Para la medición de los pliegues cutáneos
-
Cinta métrica. Work-it
3M Para medir la altura.
-
Así mismo se pasó un
cuestionario para evaluar la práctica deportiva (ver anexo) para la
determinación de si practicaban o no fútbol y otras actividades no
competitivas.
Métodos:
Las medidas antropométricas que se
realizaron fueron:
-
Peso, talla de pie, 4
pliegues cutáneos (subescapular, tricipital, bicipital, suprailicaco) Según las
normas del GREC (Grupo Español de cineantropometría) (8)
A través de estas medidas se dedujeron:
-
El Índice de Masa
Corporal ó Índice de Quetelet
o
IMC = Peso (kg)
/ Talla2 (m)
-
El porcentaje de masa
grasa corporal por medio de las fórmulas de:
o
Durnin (9) para deducir la densidad corporal
§
D = 1,1620 - 0,0630 x log10 SPC
·
SPC: Suma de los
pliegues cutáneos del bíceps, triceps, subescapular e suprailíaco
o
Siri (1957) en (10) para calcular el porcentaje de grasa a partir de la
densidad corporal
§
% Grasa = (495 /
D) - 450
Para el tratamiento estadístico de los datos se
utilizó el programa SPSS para Windows 11.5
Se aplicarán las normas Vancouver para las citas
bibliográficas.
Los resultados que a continuación se
presentan representan las diferentes comparaciones que se hicieron tanto entre
los diferentes grupos: futbolistas con futbolistas, no futbolistas con no
futbolistas, futbolistas con no futbolistas de la misma edad y futbolistas con
no futbolistas de edades diferentes.
Tras realiza las diferentes mediciones los resultados
que se obtuvieron fueron:
Grupo |
|
Peso |
Talla |
IMC |
% Grasa |
Cadete |
N |
11 |
11 |
11 |
11 |
Media |
64,4818 |
1,7395 |
21,2545 |
18,6109 |
|
Desv. típ. |
7,60090 |
,05811 |
1,62072 |
2,20149 |
|
% de la suma total |
21,8% |
21,3% |
20,0% |
19,7% |
|
Mínimo |
55,40 |
1,64 |
19,40 |
15,70 |
|
Máximo |
83,50 |
1,85 |
24,40 |
23,83 |
|
Asimetría |
1,646 |
,214 |
1,141 |
1,399 |
|
Curtosis |
3,572 |
,247 |
,499 |
2,527 |
|
Infantil |
N |
15 |
15 |
15 |
15 |
Media |
54,6400 |
1,6157 |
20,8067 |
16,4373 |
|
Desv. típ. |
10,20405 |
,09541 |
2,57307 |
4,05409 |
|
% de la suma total |
25,1% |
26,9% |
26,7% |
23,7% |
|
Mínimo |
38,10 |
1,43 |
16,30 |
10,47 |
|
Máximo |
68,90 |
1,79 |
24,50 |
24,62 |
|
Asimetría |
-,136 |
-,173 |
-,187 |
,368 |
|
Curtosis |
-1,227 |
,145 |
-1,230 |
-,376 |
|
2º ESO |
N |
16 |
16 |
16 |
16 |
Media |
58,6125 |
1,6288 |
22,0688 |
21,2425 |
|
Desv. típ. |
9,31371 |
,05252 |
3,12809 |
3,56930 |
|
% de la suma total |
28,8% |
29,0% |
30,2% |
32,7% |
|
Mínimo |
42,30 |
1,53 |
17,20 |
15,83 |
|
Máximo |
75,30 |
1,71 |
28,00 |
26,76 |
|
Asimetría |
,265 |
-,525 |
,299 |
,280 |
|
Curtosis |
-,839 |
-,648 |
-,694 |
-1,221 |
|
4º ESO |
N |
12 |
12 |
12 |
12 |
Media |
66,0167 |
1,7088 |
22,4583 |
20,6883 |
|
Desv. típ. |
12,40710 |
,06859 |
3,20410 |
1,68012 |
|
% de la suma total |
24,3% |
22,8% |
23,1% |
23,9% |
|
Mínimo |
42,00 |
1,59 |
16,60 |
18,49 |
|
Máximo |
87,50 |
1,88 |
29,40 |
23,65 |
|
Asimetría |
,070 |
1,077 |
,422 |
,530 |
|
Curtosis |
,505 |
3,579 |
1,421 |
-,508 |
|
Total |
N |
54 |
54 |
54 |
54 |
Media |
60,3500 |
1,6655 |
21,6389 |
19,2485 |
|
Desv. típ. |
10,76368 |
,08643 |
2,75300 |
3,66580 |
|
% de la suma total |
100,0% |
100,0% |
100,0% |
100,0% |
|
Mínimo |
38,10 |
1,43 |
16,30 |
10,47 |
|
Máximo |
87,50 |
1,88 |
29,40 |
26,76 |
|
Asimetría |
,196 |
-,178 |
,425 |
-,127 |
|
Curtosis |
,227 |
,651 |
,304 |
,152 |
Una vez obtenidos estos datos, lo que
se realizó fue comparar las medias de
las variables que se querían estudiar según los diferentes grupos.
Este proceso se realizó mediante la prueba
T de Student para muestras independientes tratadas de
|
Prueba de
Levene para la igualdad de varianzas |
Prueba T para
la igualdad de medias |
|||||||
|
F |
Sig. |
t |
gl |
Sig. (bilateral) |
Diferencia de
medias |
Error típ. de
la diferencia |
95% Intervalo
de confianza para la diferencia |
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Inferior |
Superior |
Peso |
,093 |
,762 |
3,133 |
52 |
,003 |
8,5923 |
2,74291 |
3,08823 |
14,09634 |
Talla |
,707 |
,404 |
5,182 |
52 |
,000 |
,1011 |
,01950 |
,06193 |
,14019 |
IMC |
,905 |
,346 |
,557 |
52 |
,580 |
,4245 |
,76261 |
-1,10575 |
1,95484 |
% Grasa |
9,375 |
,003 |
,768 |
52 |
,446 |
,7774 |
1,01277 |
-1,25491 |
2,80964 |
Tabla 2. Nacidos en 1988 y
1990
|
Prueba de
Levene para la igualdad de varianzas |
Prueba T para
la igualdad de medias |
|||||||
|
F |
Sig. |
t |
gl |
Sig.
(bilateral) |
Diferencia de
medias |
Error típ. de
la diferencia |
95% Intervalo
de confianza para la diferencia |
|
Inferior |
Superior |
||||||||
Peso |
,093 |
,762 |
3,133 |
52 |
,003 |
8,5923 |
2,74291 |
3,08823 |
14,09634 |
Talla |
,707 |
,404 |
5,182 |
52 |
,000 |
,1011 |
,01950 |
,06193 |
,14019 |
IMC |
,905 |
,346 |
,557 |
52 |
,580 |
,4245 |
,76261 |
-1,10575 |
1,95484 |
% Grasa |
9,375 |
,003 |
,768 |
52 |
,446 |
,7774 |
1,01277 |
-1,25491 |
2,80964 |
Tabla 3. Practicantes de Fútbol y no practicantes
|
Prueba de
Levene para la igualdad de varianzas |
Prueba T para
la igualdad de medias |
|||||||
|
F |
Sig. |
T |
gl |
Sig.
(bilateral) |
Diferencia de
medias |
Error típ. de
la diferencia |
95% Intervalo
de confianza para la diferencia |
|
Inferior |
Superior |
||||||||
Peso |
2,886 |
,102 |
2,692 |
24 |
,013 |
9,8418 |
3,65569 |
2,29684 |
17,38679 |
Talla |
1,653 |
,211 |
3,808 |
24 |
,001 |
,1239 |
,03253 |
,05673 |
,19103 |
IMC |
4,550 |
,043 |
,507 |
24 |
,617 |
,4479 |
,88376 |
-1,37611 |
2,27187 |
% Grasa |
3,609 |
,070 |
1,607 |
24 |
,121 |
2,1736 |
1,35239 |
-,61762 |
4,96477 |
Tabla 4. Practicantes de Fútbol: Cadete- Infantil
|
Prueba de
Levene para la igualdad de varianzas |
Prueba T para
la igualdad de medias |
|||||||
|
F |
Sig. |
T |
gl |
Sig.
(bilateral) |
Diferencia de
medias |
Error típ. de
la diferencia |
95% Intervalo
de confianza para la diferencia |
|
Inferior |
Superior |
||||||||
Peso |
,439 |
,513 |
-1,807 |
26 |
,082 |
-7,4042 |
4,09828 |
-15,82831 |
1,01998 |
Talla |
,060 |
,808 |
-3,500 |
26 |
,002 |
-,0800 |
,02286 |
-,12698 |
-,03302 |
IMC |
,051 |
,822 |
-,323 |
26 |
,749 |
-,3896 |
1,20693 |
-2,87046 |
2,09129 |
% Grasa |
10,223 |
,004 |
,496 |
26 |
,624 |
,5542 |
1,11626 |
-1,74034 |
2,84867 |
Tabla 5. No practicantes de Fútbol: 4º ESO – 2º ESO
|
Prueba de
Levene para la igualdad de varianzas |
Prueba T para
la igualdad de medias |
|||||||
|
F |
Sig. |
T |
gl |
Sig.
(bilateral) |
Diferencia de
medias |
Error típ. de
la diferencia |
95% Intervalo
de confianza para la diferencia |
|
Inferior |
Superior |
||||||||
Peso |
2,150 |
,157 |
-,354 |
21 |
,727 |
-1,5348 |
4,34089 |
-10,56223 |
7,49253 |
Talla |
,015 |
,903 |
1,156 |
21 |
,261 |
,0308 |
,02664 |
-,02460 |
,08620 |
IMC |
3,248 |
,086 |
-1,120 |
21 |
,275 |
-1,2038 |
1,07469 |
-3,43872 |
1,03114 |
% Grasa |
,148 |
,704 |
-2,558 |
21 |
,018 |
-2,0774 |
,81226 |
-3,76662 |
-,38823 |
Tabla 6.
Futbolistas- No futbolistas (misma edad) Cadetes – 4º ESO
|
Prueba de Levene para la igualdad de
varianzas |
Prueba T para la igualdad de medias |
|||||||
|
F |
Sig. |
t |
gl |
Sig. (bilateral) |
Diferencia de medias |
Error típ. de la diferencia |
95% Intervalo de confianza para la
diferencia |
|
Inferior |
Superior |
||||||||
Peso |
,265 |
,611 |
-1,133 |
29 |
,266 |
-3,9725 |
3,50545 |
-11,14195 |
3,19695 |
Talla |
2,706 |
,111 |
-,477 |
29 |
,637 |
-,0131 |
,02742 |
-,06917 |
,04300 |
IMC |
,529 |
,473 |
-1,222 |
29 |
,232 |
-1,2621 |
1,03275 |
-3,37430 |
,85013 |
% Grasa |
,008 |
,929 |
-3,508 |
29 |
,001 |
-4,8052 |
1,36968 |
-7,60648 |
-2,00386 |
Tabla 7.
Futbolistas- No futbolistas (misma edad) Infantiles – 2º ESO
|
Prueba de Levene para la igualdad de
varianzas |
Prueba T para la igualdad de medias |
|||||||
|
F |
Sig. |
t |
gl |
Sig. (bilateral) |
Diferencia de medias |
Error típ. de la diferencia |
95% Intervalo de confianza para la
diferencia |
|
Inferior |
Superior |
||||||||
Peso |
1,677 |
,207 |
1,729 |
25 |
,096 |
5,8693 |
3,39554 |
-1,12393 |
12,86257 |
Talla |
,013 |
,911 |
5,160 |
25 |
,000 |
,1108 |
,02147 |
,06657 |
,15502 |
IMC |
5,807 |
,024 |
-,790 |
25 |
,437 |
-,8142 |
1,03046 |
-2,93648 |
1,30807 |
% Grasa |
5,848 |
,023 |
-2,170 |
25 |
,040 |
-2,6316 |
1,21246 |
-5,12870 |
-,13449 |
Tabla 8.
Futbolistas – No futbolistas (diferente edad) Cadetes- 2º ESO
|
Prueba de Levene para la igualdad de
varianzas |
Prueba T para la igualdad de medias |
|||||||
|
F |
Sig. |
t |
gl |
Sig. (bilateral) |
Diferencia de medias |
Error típ. de la diferencia |
95% Intervalo de confianza para la
diferencia |
|
Inferior |
Superior |
||||||||
Peso |
,076 |
,785 |
-2,616 |
25 |
,015 |
-11,3767 |
4,34811 |
-20,33177 |
-2,42156 |
Talla |
1,258 |
,273 |
-2,839 |
25 |
,009 |
-,0931 |
,03279 |
-,16062 |
-,02555 |
Imc |
,135 |
,717 |
-1,487 |
25 |
,150 |
-1,6517 |
1,11073 |
-3,93925 |
,63592 |
% Grasa |
5,692 |
,025 |
-3,396 |
25 |
,002 |
-4,2510 |
1,25176 |
-6,82904 |
-1,67296 |
Tabla 9.
Futbolistas – No futbolistas (diferente edad) Infantiles - 4º ESO
Así mismo se realizó un tabla de contingencia con una de
las preguntas del cuestionario que se creían más relevantes:
|
¿Haces
otro tipo de actividad deportiva que no sea competitiva? |
Total |
||||
|
Sí |
No |
|
|||
Grupo |
Cadete |
5 |
45,45% |
6 |
54,55 % |
11 |
Infantil |
14 |
93,3 % |
1 |
6,7 % |
15 |
|
2º ESO |
9 |
64,29 % |
5 |
35,71 % |
14 |
|
4º ESO |
8 |
88,88 % |
1 |
11,2 % |
9 |
|
Total |
36 |
|
13 |
|
49 |
Tabla 10.
¿Practicas otra actividad no competitiva?
Para representar gráficamente parte de los datos de ofrecemos las
siguientes figuras que se han seleccionado por su representatividad.
Figura 1.
Comparación del IMC y % Graso según edad de nacimiento.
Fig 2.
Peso
Fig. 3.
Talla
Fig. 4.
IMC
Fig. 5 %
Grasa
Fig. 6. ¿Practicas otras
actividades físicas?
DISCUSIÓN
A continuación realizaremos el análisis de los resultados anteriormente
expuestos.
En la tabla 2. se aprecia que existen diferencias
significativas para todos los valores analizados respecto a la edad de
nacimiento: Peso (t = 3,133 para P 0,0025 con gl 52) talla (t = 5,182 para P 0,0005 con gl 52) IMC (t = 0,557
para P 0,254 com gl 52) y % Graso (t = 0,768 para P 0,25 con gl 52). Estos
valores podrían considerarse como normales ya que en los dos años de diferencia
entre grupos están actuando multitud de factores, siendo uno de los más
importantes el proceso madurativo.
En cambio comparando los no practicantes con los
practicantes, no se encuentran valores representativos. (Tabla 3) por lo que
consideramos que la practica del fútbol en estas edades y con este volumen
(aproximadamente tres horas semanales, no conlleva por sí solo diferencias en
los aspectos estudiados.
Ya en la comparación de los dos grupos de jugadores
de fútbol (tabla 4), cadetes con infantiles, se puede apreciar que en todas las
variables existen diferencias significativas, siendo éstas: Peso (t = 2,629
para P 0,01 con gl 24) Talla (t = 3,808 para P 0,0005 con gl 24) IMC (t = 0,507
para P 0,4 con gl 24) y % Graso (t = 1,607 para P 0,1 con gl 24). En este caso
aunque en todas las variables existe una diferencia significativa se aprecia
que el IMC no sufre tanta diferenciación, aun siendo significativa, con
respecto al peso y la talla, de los cuales depende. Esto nos puede indicar que
tiende a mantenerse la proporcionalidad en los dos grupos. Aunque en
cuanto a la menor proporción de grasa de los infantiles podría deberse a que
casi la totalidad de estos hacen otro tipo de actividad deportiva mientras que
lo mayores la proporción de los que practican otra actividad deportiva no
competitiva se reduce a la mitad. (tabla 10)
En los grupos de 4º de ESO y 2º de ESO (tabla 5)tan
solo encontramos diferencias significativas en lo que respecta la proporción de
grasa corporal: t = 0,496 para P 0,4 con gl 26.
A continuación vamos a analizar los
datos de futbolistas con no futbolistas. En la tabla 6 vemos que la única
diferencia estadísticamente significativas entre estos dos grupos (cadetes con
4º ESO) la encontramos en la talla: t = 1,156 para P 0,686 con gl 21. Lo que
nos puede incitar a pensar que uno de los criterios de selección, entre otros
de carácter técnico-táctico, de los jugadores de dicho equipo puede ser la
talla. En los datos de la tabla 7, es decir, futbolistas con no futbolistas de
la misma edad (infantiles con 2 ESO) así como con edades diferentes, tabla 9 (infantiles
con 4º ESO) no existen diferencias significativas. En este tipo de
comparaciones, futbolistas con no futbolistas y de edad diferente solo se
encuentran diferencias significativas en la tabla 8 (cadetes con 2º ESO) en los
parámetros de peso (t = 1,729 para P 0,05 con gl 25) y en la talla (t = 5,160
para P 0,0005 con gl 25).
CONCLUSIONES
Una vez obtenidos y analizados los datos, podemos concluir
respecto a los sujetos del estudio:
BIBLIOGRAFÍA
1. Balady
GJ, Berra, K.A., Golding, L.A., Gordon, N.F., Mahler, D.A., Myers, J.N.,
Sheldahl, L.M. ACSM's Guidelines for exercise testing and prescription. Sixth
Edition ed. Baltimore: Lippincott Williams & Wilkins; 2000.
2. Ganley T, MD, Sherman, C.
Exercise and Children's Health. The Pshysician and Sportsmedicine 2000;28(2).
3. Reilly T, Bangsbo, J. and
Franks, A. Anthopometric and physiological predispositions for elite soccer.
Journal of Sports Sciences 2000;18:669-683.
4. Williams AM, Reilly, T.
Talent identification and development in soccer. Journal of Sports Sciences
2000;18:657-667.
5. Reilly T, Williams, A.M.,
Nevill A. and Franks, A. A multidisciplinary approach to talent identification
in soccer. Journal of Sports Sciences 2000;18:695-702.
6. Hansen L, Klausen, K.,
Bansbo, J. and Müller, J. Short Longitudinal Study of Boys Playing Soccer:
Parental Height, Birth Weight and Length, Anthropometry, and Pubertal
Maturation Elite and Non-Elite Players. Pediatric
Exercise Science 1999;11:199-207.
7. Seabra A, Maia, J.A., Garganta, R. Crescimento, maturação,
aptidão física, força explosiva e habilidades motoras específicas. Estudo em
joens futebolistas e não futebolistas do sexo masculino dos 12 aos 16 anos de
idade. Revista Portuguesa de Ciências do Desporto 2001;1(2):22-35.
8. Legido JC, Segovia, J.C. y L-Silvarrey F.J. Manual de
valoración funcional. Madrid: Eurobook; 1996.
9. García Manso JMNV, M.; Ruiz Caballero, J.A. Pruebas para la
valoración de la capacidad motriz en el deporte. Madrid: Gymnos; 1996.
10. Docherty D. Measurement in
pediatric exercise science. Champaing: Canadian Society for Exercise
Physiology; 1996.
ANEXO
Cuestionario de evaluación de
la práctica deportiva
Nombre:.................................................................................
Grupo
.................................
1. Sí
2. No
1. Menos de 1 año
2. Entre 1 y 3 años
3. Más de tres años
1. Sí
2. No
1. Sí
2. No
1. Menos de 2 horas por semana
2. Entre dos y cinco horas semanales
3. Más de 5 horas a la semana
1. Sí
2. No
1. Menos de 1 año
2. Entre 1 y 3 años
3. Más de 3 años
1. Menos de 2 horas por semana
2. Entre dos y cinco horas semanales
3. Más de 5 horas a la semana
Rev.int.med.cienc.act.fís.deporte – vol. 4 - número 14 - junio 2004 - ISSN:
1577-0354