Rev.int.med.cienc.act.fís.deporte – vol. 4 - número 15 - septiembre 2004 - ISSN:
1577-0354
Zaragoza Casterad, J.;
Serrano Ostariz, E. y Generelo Lanaspa, E. (2004). Dimensiones de la condición
física saludable: evolución según edad y género. Revista Internacional de
Medicina y Ciencias de
DIMENSIONES DE
DIMENSIONS OF THE HEALTHY PHYSICAL FITNESS: EVOLUTION
FOR AGE AND GENDER
Zaragoza
Casterad, J. *; Serrano Ostariz, E.** y Generelo Lanaspa, E.***
*Universidad de Zaragoza. Facultad de Ciencias Humanas y de
**Universidad de Zaragoza. Escuela Universitaria de Ciencias
de
*** Universidad de Zaragoza. Facultad de Salud y Deporte.
Recibido
28 junio 2004
RESUMEN
Mientras que la orientación del concepto condición física (CF),
tradicionalmente ha sido deportiva, dirigida hacia la consecución de objetivos
externos al individuo, a partir de los
años 60, aparece un nuevo concepto de ésta, la condición física orientada hacia
la salud, que centra su objetivo en el bienestar del propio sujeto, y en la
consecución de un beneficio propio.
Mientras que los factores de
La
valoración de
El
objetivo de este trabajo es conocer el nivel de Condición Física saludable de
la población adulta (20-64 años), de la ciudad de Huesca, utilizando la batería
Eurofit para adultos, (Comité para el desarrollo del Deporte del Consejo de Europa
1995).
Atendiendo a los resultados
obtenidos, los hombres presentan mayor puntuación que las mujeres en todas las
pruebas, excepto en la prueba de flexibilidad, y en la prueba de abdominales,
donde las mujeres presentan mejores resultados en la primera prueba. No se
encuentran diferencias significativas entre sexos, respecto a la prueba de
abdominales. Las diferencias entre sexos se hacen más evidentes en las pruebas
que implican la dimensión músculo esquelética.
PALABRAS CLAVE: Condición física, medición.
ABSTRACT
While the direction of the concept physical
condition (PC), traditionally it has been sports, directed toward the external
objectives attainment to the individual,
as of the years 60, appears a new concept of this, the physical
condition guided toward the health, that centers their/its/your/his objective
in the welfare of the own subject, and in the attainment of an own benefit. While the factors of the PC
related to the yield, depend fundamentally on genetic factors, the components
on the PC related to the health, are seen more influenced by the practical
physical, being associated these, with a under risk of developing prematurely,
diseases derived from the sedentary.
The valuation of the PC, in the measure that is
related to the life habits, the levels of PC, of a population concretely, it
will permit us to obtain information on the health state, the quality from life
from that population. They are data, that if we estimate them important to
attend physical activity programs and health, at individual level, result
indispensable to guide general promotion programs of the health.
The objective of this work is to know the level of
healthy Physical Condition of the adult population (20-64 years), of the city
of
Attending to the obtained results, the men present
greater punctuation that the women in all the tests, except in the flexibility
test, and in the test of abdominal, where the women present better results in
the first test. They are not found meaningful differences between sexes, with
respect to the test of abdominal. The differences between sexes are made more
evident in the tests than imply the dimension skeletal muscle.
KEYWORDS: Physical condition, measurement.
1. INTRODUCCIÓN
El término condición física (CF), es la traducción española del
concepto inglés physical fitness, que hace referencia a la capacidad o
potencial físico de una persona, (Devís, Peiro, 1992), y constituye un estado
del organismo originado por el entrenamiento, es decir, por la repetición
sistemática de ejercicios programados.
Toda habilidad, para desarrollarse con éxito, necesita un soporte
físico constituido por las denominadas cualidades motrices. Ese soporte físico,
será la base para construir sobre ella, cualquier tipo de habilidad o destreza,
pero además constituirá, uno de los pilares para la mejora de la actividad
cotidiana y la salud. El trabajo y desarrollo intencionado, de esas cualidades
motrices, se define como acondicionamiento físico, que dará como resultado un
determinado nivel de CF, que dependerá a su vez, de la “entrenabilidad”
(influencia que puede ejercerse sobre las cualidades motrices mediante
estímulos exteriores) del sujeto.
La concepción tradicional
de
La trascendencia deportiva
y las necesidades de estar en forma del entrenamiento de alto nivel, hacen que
A partir de los años 60, nace una nueva concepción de
A partir de los años 90, se incorpora el concepto de fitness total,
asociado al estilo de vida y a los sistemas biológicos que influyen en el
ejercicio habitual, sin olvidar las características genéticas, la nutrición, el
tabaco etc.
Mientras que la orientación del concepto CF, tradicionalmente ha sido
deportiva, dirigida hacia la consecución de objetivos externos al individuo, el
nuevo concepto de ésta, quiere centrar su objetivo en el bienestar del propio
sujeto, en la consecución de un beneficio
propio. Bajo este prisma, podemos
definir
Aunque la diferenciación entre los parámetros de la condición física
y la salud y los del rendimiento motor,
nos parezca producto de un debate moderno, lo cierto es que a lo largo de la
historia, el hombre se ha preguntado continuamente, acerca de la existencia de
unas cualidades físicas que explican o condicionan, el comportamiento motor
desde una perspectiva cuantitativa.
A la luz de las dos orientaciones fundamentales de
Fuente:(Pate,
1983).
Mientras que los factores de
La
valoración de
La
valoración de
La
necesidad de elaborar una batería de test Eurofit, dirigidos a adultos, surgió
y se aprobó en el 6º Seminario Eurofit (Izmir, Turquía, 1990). Tres son las
razones que estimularon la creación de esta batería:
1) La
aptitud física es un importante componente de
2) La
evaluación de la aptitud física es útil para educadores y niños. Esta batería
contiene test sencillos de aplicar en los niños y adultos, además son
instrumentos fiables que no requieren de un material sofisticado.
3) La
batería Eurofit puede ser un medio pedagógico, sobre todo para niños, ya que
puede permitir una interdisciplinariedad con otros contenidos o asignaturas
como la informática, o la biología.
Esta
batería supone un medio de exploración y experimentación que permite evaluar
mejor, la aptitud física de los adultos
europeos, cuyos objetivos y razón de ser son:
·
Determinar el nivel de aptitud
física de los sujetos, grupos, categorías específicas de población o
poblaciones enteras.
·
Evaluar el nivel de aptitud física
relativa a la salud en relación con valores medios para la población y, si es
posible, con valores críticos.
·
Disponer de una base de
conocimientos y facilitar actuaciones a favor de la aptitud física y del
ejercicio físico en relación con la salud.
La
interpretación de los resultados de la batería Eurofit, presenta un problema.
No existen todavía, indicadores precisos sobre el nivel de aptitud física
necesario para mejorar la salud, aunque gracias a los estudios sobre la
sinergia entre aptitud física y salud, podemos hoy en día hacer recomendaciones
de AF, apoyadas en sólidas bases científicas, sobre todo respecto al efecto
protector ésta en las enfermedades coronarias, y con menor precisión en otros
factores como la reducción de osteoporosis, depresiones etc.
La muestra utilizada en nuestro
estudio, es representativa del universo de sujetos adultos de la ciudad de
Huesca, de edades comprendidas entre 20 y 64 años. Considerados los objetivos
del estudio, se acepta un error de muestreo máximo de +/- 3%. Estas
consideraciones determinaron un tamaño muestral de 1087 sujetos, 678 hombres y
409 mujeres. La selección de la muestra se estableció combinando
un muestreo probabilístico y no probabilístico El tamaño muestral
seleccionado fue de de 650 sujetos, de los cuales, 369 fueron hombres y 281
mujeres.
Para valorar los niveles de condición física saludable utilizamos la
batería Eurofit para adultos (Comité para el desarrollo del Deporte del Consejo de Europa
1995).
3.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
A continuación presentaremos los resultados de las principales
dimensiones físicas.
3.1. APTITUD MÚSCULO ESQUELÉTICA. RESULTADOS DE
El
desarrollo y la valoración de la fuerza-resistencia de la musculatura de la
región abdominal, según Gusí, Fuentes (2000:55), “es relevante en el ámbito de la educación física y deportiva tanto por
su contribución al rendimiento deportivo como, sobe todo, a la promoción de la
salud (fundamentalmente por su intervención en el control de la curvatura de la
columna baja y su relación con determinados problemas de espalda)”.
El deterioro de los
resultados que se produce en los hombres, desde los
En el gráfico 1 podemos
observar la evolución de los resultados de la prueba abdominal en función de la
edad y el sexo.
Gráfico 1.
Evolución de la prueba de abdominales en función de la edad y el sexo.
En relación al total de la
muestra, encontramos diferencias significativas entre los grupos de edad más
joven, concretamente desde los
Es a los 55-59 años en
hombres (8,42 ± 3,74 repeticiones) y a los 60-64 años en mujeres (7,47 ± 3,60
repeticiones), donde se obtienen los resultados más bajos.
Estos datos sobre el
deterioro en los resultados en la prueba de abdominal, tienen su importancia,
sobre todo por la relevancia del desarrollo de la fuerza resistencia abdominal
de cara al correcto funcionamiento del raquis lumbar. Su capacidad preventiva
es evidente tal y como afirman autores como, Anderson, Nilsson et al. (1997) o
Shields, Givens, (1997). Además la incidencia del dolor en la zona lumbar
comienza normalmente, a partir de los 35 años (Fergurson, Marras, 1997),
aumentando su incidencia en hombres desde los 40 años de edad y en mujeres,
pasados los 55 años.
3.2. APTITUD MÚSCULO ESQUELÉTICA. RESULTADOS DE
En el sexo masculino se
produce un deterioro del 96,6% en los resultados de esta prueba si comparamos
la edad de 20-24 años con la de 60-64 años, superior al registrado por Navarro
(1998), en su estudio realizado en la población Gran Canaria, donde cifra este
deterioro en un 76,7%. En hombres, la involución se produce fundamentalmente a
partir de los 50 años (la involución de
los resultados de esta prueba desde los
Se puede apreciar que tanto
en hombres como en mujeres, los valores sufren un deterioro importante a partir
de los 50 años de edad, que coincide con la afirmación de Wilmore, Costill,
(1994), cuando dicen que es a partir de los 50 años cuando la fuerza empieza a
decrecer significativamente, motivado por la paulatina atrofia de la masa
muscular, con una pérdida de hasta un 60% en los varones. A partir de los 60
años, aunque se trabaje la fuerza, solamente se podrá alcanzar el 75-80% de la
máxima fuerza en relación a edades más tempranas.
En el gráfico 2, podemos
observar la evolución de la prueba de suspensión con flexión de brazos, en
función de la edad y el sexo.
Gráfico 2. Evolución
de la prueba de suspensión de brazos en función de la edad y el sexo.
Los resultados presentados,
tanto para la prueba de abdominal, como para la de suspensión de brazos,
concuerdan totalmente, con el hecho suficientemente comprobado de que la fuerza
en general, disminuye con la edad, (Häkkinen, Pakarinen, 1993; Warburton
2001:221), lo que parece más complicado, es determinar el ritmo de esta
involución, ya que existen diversos aspectos que lo determinan, como el grupo
muscular a que hagamos referencia (Navarro 1998). El diferente comportamiento
que se produce entre los distintos grupos musculares, es una dificultad añadida
en el estudio de la evolución de la fuerza con la edad.
3.3. APTITUD
MÚSCULO ESQUELÉTICA. RESULTADOS DE
La involución que sufre los
resultados de esta prueba si comparamos las personas con menor y mayor edad, es
en hombres del 69,9%, frente al 67,2% en las mujeres.
Encontramos diferencias
significativas entre los grupos de edad más jóvenes, concretamente desde los
En el gráfico 3, podemos
observar la evolución del salto vertical en función de la edad y el sexo.
Gráfico 3.Evolución de
la prueba de salto vertical en función de la edad y el sexo.
Se observa una involución
de los resultados obtenidos en esta prueba, con la edad, que se hace evidente
sobre todo, a partir de los 45 años, tanto en hombres como en mujeres. Es a los
60-64 años en hombres (14,58 ±
3.4. APTITUD
MÚSCULO ESQUELÉTICA. RESULTADOS DE
Los valores más elevados de
fuerza de prensión, los encontramos en ambos sexos, a la edad de 40-44 años
(54,44 ±
Comparando estos dos
estudios realizados en poblaciones adultas, encontramos que excepto en la
población de 60-64 años en hombres y en la población de 25-29 años y 60-64 años
en mujeres, nuestros resultados son mayores para el resto de franjas de edad y
en ambos sexos. Así se refleja en la media del total de hombres, en la
población Oscense es de 48,92 ±
Encontramos diferencias
significativas entre los grupos de edad comprendidos entre los 25 y 44 años,
con el grupo de edad más viejo (60-64 años. Las diferencias medias mayores se
producen entre la edad de 40-44 años y la de 60-64 años (
En el gráfico 4, podemos
observar la evolución de la fuerza de prensión en función de la edad y el sexo.
Gráfico 4. Evolución de la prueba de dinamometría (Kg.)
en función de la edad y el sexo.
En hombres, la involución
que se produce con la edad es del 36,5%, superior a la registrada en el estudio
de Navarro (1998), donde el deterioro alcanza el 28,7%. En nuestro caso, este
deterioro se produce fundamentalmente a partir de los 50 años, mientras que en
el estudio de Navarro, se produce a partir de los 55 años. En las mujeres se
denota esta involución a partir de la edad de 55 años. La involución que se
produce en nuestro estudio respecto a la mujer y teniendo en cuenta la edad más
joven y la más mayor, es superior 20,1%, a la presentada en el estudio de Navarro,
10,3%.
La involución de los resultados de esta prueba
no se produce de forma escalonada y regular con la edad, a diferencia de la
tendencia mostrada en las dos pruebas de condición física anteriores.
3.5. APTITUD MÚSCULO ESQUELÉTICA.
RESULTADOS DE
Considerando el total de la
muestra, encontramos diferencias significativas (p<0,05), en los resultados
obtenidos entre el grupo de edad de 20-24 años, con todos las demás franjas de
edad. Las mayores diferencias medias las encontramos entre el grupo de menor
edad y el grupo de 55-59 años (diferencia media de
En el gráfico 5 se puede observar la evolución de la
prueba según la edad y en ambos sexos.
Gráfico 5. Evolución
de la prueba de flexibilidad en función de la edad y el sexo.
Se observa un mayor
deterioro en hombres si consideramos el período comprendido entre los 20 y 64
años. Mientras que los hombres sufren una involución en los resultados de la
prueba del 55,8%, las mujeres sufren un deterioro del 39,9%. Estas cifras, en
ambos casos, son superiores a las presentadas por Navarro (1998), ya que en
hombres encuentra un deterioro, para el mismo período, del 36,9%, frente al
31,6% en mujeres.
El mayor deterioro
encontrado en hombres, coincide con lo expresado en la literatura científica,
por diversos autores, como Weineck, (1988), Porta, Martín Acero, (1993), García
Manso, Navarro, et al., (1996). Las razones son imputables, fundamentalmente, a
las diferencias hormonales entre los dos sexos. Los estrógenos en mayor
cantidad en la mujer, producen retenciones de agua, pero también el porcentaje
más elevado de tejido adiposo en la mujer (prácticamente el doble) y una menor
masa muscular, contribuye a estas diferencias. Otros autores como Ortega,
Mentol., et al., (1990), apuntan además la mayor producción de relaxina en la
mujer respecto al hombre, sobre todo durante el embarazo. En definitiva estos
resultados corroboran que la mujer anatómicamente está mejor dotada para lograr
un mayor rango de movimiento de sus articulaciones.
3.6. APTITUD
AERÓBICA. RESULTADOS DE
En función de la totalidad de la muestra, encontramos diferencias
significativas (p<0,05), entre diferentes edades. Así las mayores
diferencias medias, se establecen entre la edad más joven y la más vieja (16,93
ml/Kg./min.). Encontramos diferencias significativas (p<0,05), entre las
edades comprendidas entre los 25 y 39 años, con las edades que van desde los
Considerando la muestra en su totalidad, encontramos un deterioro
entre las edades analizadas del 40,5%, que corresponde a una disminución media
anual de 0,92 ml/Kg./min., superior al presentado en el estudio de Navarro
(1998:376), donde se constata que el consumo de oxígeno máximo, sufre una
involución de un 35,84% para el mismo período de edad, que corresponde a un
deterioro anual de 0,34 ml/Kg./min. Tanto los valores referidos a la población
de Gran Canaria como Oscense, son superiores a los que proponen Jackson, Beard,
et al., (1995:115) para sujetos sedentarios, ya que sitúan la pérdida anual
alrededor de 0,26 ml/Kg./min., y en el caso de la población oscense, todavía
son superiores a los referenciados por autores como Karsch, Boyer, et al.,
(1990:78), Rogers, Hagberg et al., (1990:2197), que sitúan entre 0,44 y 0,77
ml/Kg./min.
En el gráfico 6, podemos apreciar la evolución del consumo máximo de
oxigeno en ml/Kg. /min., en función de la edad y el sexo.
Gráfico 6.Evolución de
la prueba del test de marcha en función de la edad y el sexo.
Se
aprecia un deterioro superior en los hombres (52,2%) que en las mujeres
(27,8%), en las franjas de edad comprendidas entre los 20 y 64 años.
Las mujeres presentan
valores de partida (edad 20-24 años), que están en consonancia con lo que otros
estudios (Peronnet, Thibault, 1991:29) nos señalan, cuando dicen que lo normal
en mujeres no entrenadas, en edades comprendidas entre los 20-24 años, es que presenten
un consumo máximo de oxígeno, entre 35-40 ml/Kg./min., en comparación con las
mujeres entrenadas que deberían presentar un V02 máx. Alrededor de los 65
ml/Kg./min.
A
partir de los 55 años en hombres, se aprecia un deterioro casi del 50% en los valores
relativos al consumo máximo de oxígeno, mientras que en las mujeres este
deterioro es menos pronunciado a lo largo de todas las categorías de edad. En
el caso de los hombres, el V02 máx., desciende en mayor o menor grado conforme
aumenta la edad, mientras que en las mujeres, encontramos que a la edad de
30-34 años, el valor del V02 máx., (35,39 ± 4,77 ml/Kg./min.), es superior al
encontrado en la franja anterior que corresponde a los 25-29 años (33,96 ± 2,92
ml/Kg./min.). Las mujeres no presentan tan evidentemente, un descenso del
consumo máximo de oxígeno a partir de los 55 años de edad, justificado porque
las mujeres de 50 ó más años son mucho más activas que los hombres en esta
misma edad.
3.7. APTITUD
MOTRIZ. RESULTADOS DE
En hombres el deterioro entre la
franja de edad más joven y la de 60-64 años, suponen aumentar en 2 intentos el
número de veces necesario para cumplimentar la prueba, mientras que en mujeres,
supone un aumento de 1,2 intentos.
En hombres observamos que conforme
aumenta la edad, aumenta el número de intentos necesarios para realizar la
prueba, a excepción de las edades de 35-39, 40-45, y 55-59 años, donde se
aprecian mejores resultados que en las franjas de edad que les preceden.
En mujeres, podemos ver que a partir
de los 25 años, aumenta progresivamente el número de intentos realizados, hasta
llegar a los 60-64 años, donde encontramos que este sector poblacional,
presenta mejores resultados (4,11 intentos), que la edad que le precede (4,66
intentos).
Encontramos diferencias significativas
(p<0,05), entre los diferentes grupos de edad, concretamente entre la franja
de 25-34 años y los grupos que se sitúan por encima de los 50 años. También
encontramos diferencias significativas entre la edad de 35-39 años y la de
55-59 y 60-64 años.
Gráfico 7.Evolución de la prueba de
equilibrio en función de la edad y el sexo.
Esta involución observada
en los resultados de la prueba de equilibrio, sólo hace que corroborar que la
capacidad de equilibrio sufre un deterioro con la edad, sobre todo sino se
trabaja específicamente (Palmisciano, 1994:72). La mejor edad (fase sensible),
para la educación del equilibrio, es entre los 5 y 13 años de edad, ya que es
en esta edad, donde se produce la
maduración de las áreas cerebrales relacionadas con la motricidad. Después de
los 14 años, se registran deterioros importantes en sujetos no entrenados,
estabilizándose en sujetos entrenados. Después de los 30 años, los resultados
que valoran el equilibrio, decaen motivado por la incipiente regresión de la
funcionalidad del sistema nervioso. El trabajo específico sobre esta cualidad,
permitirá controlar su involución, ya que hará mantener activos los circuitos
nerviosos de control. Existen discrepancias que ponen de manifiesto autores
como Castañer, Camerino, (1993), en cuanto a la posibilidad de mejora del
equilibrio, ya que se cree que es una capacidad escasamente entrenable debido a
su estrecha dependencia con el funcionamiento nervioso. Estos autores
consideran que sí se puede mejorar en edades evolutivas en las que el sistema
nervioso central, presenta plasticidad para la mejora, aunque Cambeiro (1987),
afirma que pueden mejorarse incluso en etapas posteriores.
4. CONCLUSIONES
En las pruebas de
suspensión con flexión de brazos, flexibilidad y salto vertical, es donde
mayores diferencias encontramos entre los resultados que presentan las franjas
de edad más jóvenes (20-29 años) y el resto de edades. Se aprecia un deterioro
más acusado a partir de los 45 años en todas las pruebas que incluye la
batería.
Los resultados obtenidos indican la existencia de diferencias
significativas entre sexos. Los hombres presentan mejores resultados en las
pruebas de suspensión con flexión de brazos, salto vertical, dinamometría, test de
marcha, mientras que las mujeres presentan mejores valores en la prueba de
flexibilidad. No existen diferencias significativas entre sexos en las pruebas
de abdominal y equilibrio.
Las diferencias
se hacen más evidentes en las pruebas que implican la dimensión músculo
esquelética. Estas diferencias, que han
sido encontradas también en otros estudios, tanto realizados en población
adulta (Navarro, 1998), como en población joven (Bale, Mayehew et al., 1992;
Grenn, Ignico, (1995), se justifican según Tercedor, Delgado, (2001), además de
por las diferencias genéticas y biológicas, porque los hombres tienen una mayor
implicación en actividades físicas de mayor intensidad, además de que los
hombres presentan mayor rendimiento y motivación en las pruebas de condición
física que las mujeres.
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