González-Gálvez,
N.; Sainz de Baranda, P.; García-Pastor, T. y Aznar, S. (2012). Método Pilates e investigación:
revisión de la literatura / Pilates method and research: literature review. Revista
Internacional de Medicina y Ciencias de la Actividad Física y el Deporte vol.
12 (48) pp. 771-786 Http://cdeporte.rediris.es/revista/revista48/artmetodo332.htm
REVISIÓN
MÉTODO PILATES E
INVESTIGACIÓN: REVISIÓN DE LA LITERATURA
PILATES METHOD AND RESEARCH: LITERATURE REVIEW
González-Gálvez,
N.1; Sainz de Baranda, P.2;
García-Pastor, T.3 y Aznar, S.4
1
elonay_86@hotmail.com. Master en Educación Física y Salud por
2
pilar.sainzdebaranda@uclm.es. Doctora en Ciencias de
3
tgarcia@ucjc.edu. Doctora
en Ciencias de
4
susana.aznar@uclm.es. Doctora
en Educación Física. Universidad de Castilla La Mancha. España.
Código UNESCO / UNESCO Code: 5899 Educación Física y Deporte / Physical
Education and Sport
Clasificación
del Consejo de Europa / European Council Classification: 11. Medicina del deporte
/ Sport medicine
Recibido:
9 de enero de 2011
Received January 9, 2011
Aceptado:
7 de noviembre de 2012 Accepted November
7, 2012
RESUMEN
El objetivo de este estudio fue realizar una revisión de los
estudios científicos sobre el método Pilates. Se analizaron un total de 70 publicaciones:
27 artículos teóricos, 2 revisiones bibliográficas, 3 casos clínicos, 1 trabajo
descriptivo y 37 de intervención. El mayor número de estudios que aplican el
Método Pilates como programa de intervención son los que lo utilizan para el
tratamiento del dolor, seguido de los estudios que utilizan el Método Pilates
para la mejora de la capacidad aeróbica y el IMC, la flexibilidad y la
estabilidad postural. Además, también destaca el número de estudios que
analizan el efecto del Método Pilates o de los ejercicios sobre la musculatura
abdominal. Con relación a la población utilizada, se observa un mayor número de
estudios con personas adultas, seguido de los adultos mayores, niños,
adolescentes y deportistas.
PALABRAS CLAVE: Pilates, revisión,
entrenamiento, rehabilitación y acondicionamiento
ABSTRACT
The aim of the study was to
provide a review of Pilates
Method scientific studies. A total of 70 articles were studied: 27 theoretical articles, 2 bibliography reviews, 3 clinical case studies, 1 descriptive study, and 37 intervention studies. The largest number
of studies that have applied Pilates Method as an intervention
program are those that used it
for treating pain, followed by the studies
that utilized the Pilates Method for the improvement
of aerobic capacity, Body Mass Index (BMI), flexibility, and posture stability. Further, Pilates Method stands out with a high number
of studies that analyze its effects,
or its exercises
effects, on the abdominal muscles. Regarding the populations,
the largest number of studies utilized adults, followed by older
adults, children, adolescents, and athletes.
KEY WORDS: Pilates, training, review, rehabilitation and conditioning
1. INTRODUCCIÓN
El Método
Pilates (MP) actualmente es una técnica muy popular en la sociedad por los
beneficios que se le atribuyen: mejora de la postura, mejora de la
flexibilidad, de la fuerza, de la coordinación y del equilibrio (Lange, Unnithan, Larkam y Latta, 2000; Latey, 2001, 2002; Muirhead, 2004;
Olson y Smith, 2005; Pilates, 1934; Pilates y Miller,
1945; Selby, 1999, 2002).
El MP se basa en la importancia de
mantener la fuerza y la resistencia del centro, así como una musculatura
flexible para mejorar el control del propio cuerpo, la correcta disposición
corporal, la estabilidad de la pelvis y la propiocepción
(Anderson y Spector, 2000; Clark, 2003; Friedman, 2005; Friedman, Eisen,
Miller y Jopseph, 1980; Pilates y Miller, 1945;
Richardson y Jull, 1995; Selby, 1999), para crear
cuidadosamente esa alineación corporal dentro y fuera de las clases de Pilates
(Clark, 2003; Winson, 2004).
Aunque, el MP existe desde la década
de los años veinte no ha sido hasta la actualidad cuando ha alcanzado su
estatus de celebridad siendo practicado por personas de todas las edades y
grupos sociales (Muirhead, 2004; Selby, 1999). A
pesar de la gran cantidad de beneficios que se le atribuyen y el número elevado
de población que lo práctica no existe aún una evidencia científica sobre sus
efectos. Este hecho
pone de manifiesto la necesidad de realizar un análisis sistemático de la
literatura científica, en un intento de conocer qué tipo de investigaciones se han realizado hasta la fecha con
el Método Pilates, cuáles son los ámbitos de aplicación más frecuentes y cuáles
son las características del método científico utilizado con relación a la
muestra, programas de intervención, etc.
Por ello, los objetivos de esta revisión de la
literatura fueron: a) analizar en la literatura
científica las propuestas existentes sobre el
MP en función del tipo de investigación; b) observar cuáles son los ámbitos de
aplicación más frecuentes; c) indicar cuáles son las características del
método científico utilizado con relación a la muestra y programas de
intervención.
2. MÉTODO
2.1.
Estrategia de búsqueda bibliográfica
La localización de artículos se realizó en las bases de datos
informatizadas on-line más importantes en el
ámbito de las áreas de la Salud y de la Educación Física, incluyendo: Medline, Cochrane Library, ENFISPO, SportsDiscus,
Lilacs Teseo, OVID, así como el metabuscador
Google.
La palabra “Pilates” fue siempre
utilizada como criterio de búsqueda, de tal forma que, en las diversas
exploraciones bibliográficas efectuadas, el término Pilates siempre estuvo
presente en uno de los campos de búsqueda, quedando el resto de campos
subordinados con la preposición “and” y completos por una de las siguientes
palabras clave: programs, intervention, children, adult, strength, flexibility, endurance, systematic review, meta-analysis, effects, physical performance y exercise therapy.
No fue aplicada limitación en el año
de publicación. La búsqueda finalizó en noviembre de 2010. Los artículos
encontrados fueron categorizados en artículos de revisión, estudios
descriptivos y estudios de intervención. La primera categoría se dividió en
artículos teóricos, revisiones bibliográficas y casos clínicos. Dentro la
última categoría se dividieron los estudios en base a los parámetros y/o
población analizada.
2.2.
Criterios de inclusión y de exclusión
La selección de los estudios
científicos estuvo basada en los siguientes criterios de inclusión: a) estudios
de revisión; b) estudios descriptivos; c) estudios de intervención) y d)
utilizar el Método Pilates como variable diferenciadora. No se estableció limitación alguna en cuanto
a la edad de los participantes, así como en lo referente a su
nivel de condición física (sedentarios, físicamente activos, deportistas
de alto nivel), etc.
Por otro lado, como criterios de
exclusión se establecieron: (a) estudios científicos publicados en forma de resumen
y/o comunicaciones cortas; (b) redactados en idioma distinto al inglés, español
o portugués.
3.
RESULTADOS
La estrategia de búsqueda y selección
de artículos empleada en esta revisión obtuvo un total de 70 publicaciones: 29 estudios
teóricos, 3 casos clínicos, 1 trabajo descriptivo y 37 de intervención, de los
cuales 55 artículos estaban publicados en revistas indexadas (ISI Web of Knowledge, Scopus, Lantindex) (78,57% del total de los estudios). Los
artículos analizados fueron publicados entre 1993 y 2010.
En la tabla 1 se muestran las
revisiones bibliográficas, artículos teóricos y casos clínicos encontrados, con un total de 32
artículos: 27 trabajos teóricos (84,4%), 2 revisiones bibliográficas (6,25%) y
3 casos clínicos (9,3%).
El primer artículo en revistas
indexadas con revisión por pares que se conoce sobre el MP es el de Anderson y Spector (2000). Posteriormente se publican otras
investigaciones analíticas similares (Chang, 2000; Gray, 2010; Hoppens, 2003; Lange et al.,
2000; Latey, 2001; Latey,
2002; Merrithew, 2009) tratando aspectos tales como
su origen, su creador, los principios, los beneficios, consejos para su
realización, etc.
Tabla 1. Relación de los artículos
teóricos, revisiones bibliográficas y casos clínicos encontrados con el MP. |
|
Tipo de estudio |
Trabajos |
Revisiones
bibliográficas |
Bernardo
(2007); La Touche (2008) |
Artículos
teóricos |
Anderson
y Spector (2000); Duschatko
(2000); Lange et al., (2000); Chang (2000); Latey (2001); Geweniger (2002);
Latey (2002); Hoppens
(2003); Springen (2003); Geweniger
(2004); Maher (2004); Muscolino y Cipriani
(2004); Balogh (2005); Hornery
(2005); Smith y Smith (2005); Ferre (2006); Hanson (2007); Kopitzke
(2007); Levine, Kaplanek, Scafura, y Jaffe (2007); Robinson (2007); Bucar Pajek y Pajek
(2009); Ickes (2009); Merrithew
(2009); Anderson (2010); Sharma (2010); Wilson (2010); Gray (2010) |
Casos
clínicos |
Blum (2002); Bryan y Hawson
(2003); Lugo-Larcheveque, Pescatelo, Dugdale, Veltri y Roberts
(2006) |
También se encuentran publicaciones
que relacionan el MP con beneficios sobre el dolor y patologías (Bucar, Pajek y Pajek, 2009; Ferre, 2006; Geweniger, 2002; Maher, 2004; Sharma, 2010), que lo
comparan con el yoga (Geweniger, 2004), que lo encuentran beneficioso para el
entrenamiento y el rendimiento en tenistas (Hornery,
2005) y para la estabilidad postural en jinetes (Wilson, 2010).
Por otro lado, algunas publicaciones
hacen referencia a los beneficios del MP sobre un grupo concreto de población:
embarazadas (Balogh, 2005; Hanson, 2007; Robinson,
2007), personas mayores (Kopitzke, 2007) y personas
con patología en proceso de rehabilitación (Anderson, 2010; Ickes,
2009; Levine et al., 2007).
Con relación a los casos clínicos, se
han encontrado tres en los que se observan beneficios tras la aplicación del
MP. Blum (2002) en el dolor de espalda tras una
intervención quirúrgica por escoliosis, Bryan y Hawson (2003) en el
dolor lumbar crónico y en la discapacidad funcional y Lugo-Larcheveque, et al. (2006) en la alineación y lesiones del
tren inferior.
A nivel de trabajos descriptivos solo
se ha encontrado el trabajo de Von Sperling de Souza
y Brum (2006) en el que analizan las características
de las personas que comienzan a practicar un programa de MP. Para ello,
utilizan un cuestionario y los resultados más significativos son: a) la mayoría
de las personas que practican Pilates son mujeres (81,3%) que no habían
practicado ejercicio físico antes; b) la edad media es de 42 años; c) los
principales motivos de la práctica del MP son la mejorara de la postura
(38,8%), la mejora de la flexibilidad (32,1%) y por motivos de rehabilitación
(24,2%); c) el 48,9% realizaba periódicamente visitas al médico y el 54,7% no
practicaba ninguna otra actividad física. Por último, d) el 73,4% de las
personas encuestadas tenían dolores musculo-esqueléticos, siendo el dolor
lumbar el de mayor prevalencia con un 30%, seguido del dolor cervical con un
18,3% y del dolor en la articulación de la rodilla con un 14,6%.
Con relación a los estudios
científicos experimentales de intervención, se han encontrado un total de 37 de
los que 33 (89,1%) han sido publicados en revistas indexadas. En la tabla 2 se
muestra el número de estudios y el ámbito de aplicación de los mismos.
Tabla 2. Relación de los
estudios científicos de intervención. |
|||
Ámbito de
aplicación |
Número total |
Localizados en
revistas indexadas |
% |
Estudios
con deportistas |
2 |
1 |
5,4 |
Estudios
de tratamiento del dolor |
8 |
8 |
21,7 |
Estudios
de rehabilitación |
2 |
2 |
5,4 |
Estudios
para la mejora de la capacidad aeróbica e IMC |
4 |
3 |
10,8 |
Estudios
en niños y adolescentes |
3 |
2 |
8,1 |
Estudios
en adultos mayores |
4 |
4 |
10,8 |
Estudios
de estabilidad postural |
3 |
3 |
8,1 |
Estudios
de flexibilidad |
4 |
4 |
10,8 |
Estudios
sobre la actividad de la musculatura abdominal durante la práctica del MP |
4 |
3 |
10,8 |
Estudios
sobre el efecto de un programa de MP sobre la musculatura abdominal |
3 |
3 |
8,1 |
Número
total de estudios de intervención |
37 |
33 |
100 |
Se puede observar como el mayor número
de estudios que aplican el Método Pilates como programa de intervención son los
que lo utilizan para el tratamiento del dolor (n=8; 21,7%) (Altan,
Korkmaz, Bingol y Gunay, 2009; Anderson, 2005; Curnow,
Cobbin, Wyndham y COI,
2009; Donzelli, Di Domenica, Cova, Galley y Giunta, 2006; Gagnon
(2005); Gladwell, Head, Haggar
y Beneke, 2006; Handa, Yamamoto y Tani, 2000; Rydeard, Leger, y Smith,
2006), seguido de los estudios que utilizan el Método Pilates para la mejora de
la capacidad aeróbica y el IMC (n=4; 10,8%) (Carneiro, Silva y Vieira, 2009; Jago, Jonker, Missaghian
y Baranowski, 2006; Rogers y Gibson, 2009; Spilde y Porcari, 2005), la flexibilidad (n=4; 10,8%) (Keays, Harris, Lucyshyn y MacIntyre, 2008; Kloubec, 2010; Segal, Hein y Basford,
2004; Sekendiz, Altun, Korkusuz y Akın, 2007) y la
estabilidad postural (n=3; 8,1%) (Caldwell, Harrison,
Adams y Triplett, 2009; Johnson, Larsen,
Ozawa, Vilson y Kennedy,
2007; Emery, De Serres, McMillan y Côté, 2010). Además,
también destaca el número de estudios que analizan el efecto del Método Pilates
o de los ejercicios sobre la musculatura abdominal (n=7; 18,9%) (Donahoe et al., 2007; Esco, et
al., 2004; García, De Barros y Saldaña, 2004; Herrington
y Davies, 2005; Irit y Ducan,
2008; Olson y Smith, 2005; Queiroz,
Cagliari, Amorim y Sacco, 2010).
Con relación a la población utilizada,
se observa que el mayor número de estudios se aplica en personas adultas (n=28;
75,7%), seguido de los adultos mayores (n=4; 10,8%) (Kaesler,
Mellifont, Swete y Taaffe, 2007; Kuo, Tully, y Galea, 2009; Mallery et al., 2003; Siqueira Rodrigues, Ali Cader, Bento Torres, Oliveira y Martin Dantas, 2010), niños y adolescentes (n=3;
8,1%) (Kane y Bell, 2009; Min-Kyoung
et al., 2010; PMA, 2006) y deportistas (n=2; 5,4%) (Hutchinson, Tremain, Christiansen y Beitzel, 1998; Sewright, Martens,
Axtell y Rinehardt, 2004).
En la tabla 3, se pueden observar las
características metodológicas de los
programas de intervención analizados y el número de estudios que cumplen
cada una de ellas.
Tabla 3. Categorías de los
programas de intervención y los diferentes estudios que cumplen cada uno de
ellas. |
||
Parámetro |
Categoría |
Nº de estudios |
Muestra |
n=0-10 |
5 |
n=11-20 |
9 |
|
n=21-30 |
5 |
|
n=31-40 |
6 |
|
n=41-50 |
4 |
|
n=51-60 |
2 |
|
n=61-111 |
0 |
|
n=112-127 |
2 |
|
Duración
de la sesión |
45
min |
1 |
60
min |
10 |
|
65
min |
1 |
|
75
min |
2 |
|
No
consta |
19 |
|
Frecuencia
semanal |
1
día por semana |
1 |
2
días por semana |
11 |
|
3
días por semana |
10 |
|
5
días por semana |
1 |
|
7
días por semana |
1 |
|
No
consta |
9 |
|
Duración
total del programa |
10
días |
1 |
4
semanas |
6 |
|
5
semanas |
2 |
|
6
semanas |
4 |
|
8
semanas |
4 |
|
10
semanas |
3 |
|
12
semanas |
6 |
|
15
semanas |
1 |
|
6
meses |
3 |
|
No
consta |
3 |
En el caso de no constar de manera
específica en el artículo se ha catalogado como “no consta”. Como es el caso
del estudio de Handa et al. (2000), el cual indica
que el protocolo de los 4 ejercicios se realizaba de manera diaria durante 6
meses, pero no ofrece suficiente información sobre el programa con relación a
la duración de la sesión, frecuencia semanal, etc,
por lo que se catalogó como “no consta”. Se observa como la mayoría de los
estudios presentan un número de participantes entre 11 y 50, la duración de las
sesiones suele ser de 60 minutos, la frecuencia oscila entre 2 o 3 días por
semana y las duraciones totales del programa
más frecuentes son 4, 6, 8 o 12 semanas.
4. DISCUSIÓN
La presente revisión bibliográfica se ha
realizado en un
intento de conocer qué tipo de investigaciones se han desarrollado hasta la fecha con el Método
Pilates, cuáles son los ámbitos de aplicación más frecuentes y cuáles son las características
del método utilizado con relación a la muestra, programas de intervención, etc.
La estrategia de búsqueda y selección
de artículos empleada en el presente estudio dio un total de 70
publicaciones:
29 estudios teóricos, 3 casos clínicos, 1 trabajo descriptivo y 37 de
intervención. De los 70 artículos, 12 fueron publicados en revistas no
indexadas, por lo que 58 artículos (78,57%) se han tenido en cuenta para el
siguiente análisis.
4.1.
Investigaciones analíticas, revisiones bibliográficas y casos clínicos
En referencia al MP, las distintas investigaciones
analíticas describen su historia, los aspectos fundamentales, las fases de enseñanza, los aspectos fisiológicos y biomecánicos que contempla el MP,
así como sus efectos en diferentes ámbitos como puede ser la rehabilitación, el
deporte, el dolor, el embarazo y la mejora de la fuerza-resistencia o la
postura.
Con respecto a los casos clínicos se han observado
tres estudios que presentan mejoras tras
aplicar el MP, uno de ellos en el tratamiento de la escoliosis (Blum, 2002), otro en la desalineación de la extremidad
inferior (Lugo-Larcheveque, et al., 2006) y otro
tanto en el dolor lumbar crónico como en la discapacidad funcional (Bryan y Hawson 2003).
También, se han encontrado dos revisiones
bibliográficas, la de Bernardo (2007) y la de La Touche
(2008). La primera de ellas “The Pilates Method: History and Philosophy” publicada en el año 2007 encuentra en un primer
momento 277 trabajos relacionados con el
MP, a diferencia de la presente revisión que tan solo selecciona 67. Sin
embargo, hay que tener en cuenta que Bernardo (2007) incluye tanto artículos
completos como abstracts y que después de aplicar los criterios de inclusión y
exclusión tan solo se queda con 10 artículos que habían sido publicados en
revistas científicas profesionales.
La otra revisión “Treating
non-specific chronic low back pain through
the Pilates Metrhod” (La Touche et al., 2008) se centra en aquellos artículos que
aplican el MP en personas con dolor
lumbar valorando un total de 3 artículos (Donzelli et
al., 2006; Gladwell et al., 2006; Rydeard
et al., 2006). Los resultados de los estudios analizados en esta revisión
demuestran los efectos positivos, la mejora general de las funciones y la
reducción del dolor al aplicar el Método Pilates en el tratamiento de lumbalgia
crónica no específica en adultos.
4.2.
Estudios de intervención
En la literatura científica se han
encontrado un total de 33 estudios que tratan de aplicar un programa con el MP
en ámbitos variados, con diferente población y con objetivos distintos,
mostrando por norma general resultados positivos o prometedores para el MP.
Según el ámbito de aplicación de los
mismos, el mayor número de estudios que han aplicado el Método Pilates como
programa de intervención son los que lo han utilizado para el tratamiento del
dolor, seguido de los estudios que utilizan el Método Pilates para la mejora de
la capacidad aeróbica y el IMC, la mejora de la flexibilidad y la mejora de la
estabilidad postural. Además, también destaca el número de estudios que
analizan el efecto del Método Pilates o de los ejercicios del MP sobre la
musculatura abdominal.
Los estudios que analizan la
influencia del MP sobre el dolor se centran principalmente en el dolor de
espalda. Tan solo uno de los estudios no lo hace (Altan
et al., 2009), analizando el dolor producido por fibromialgia. Sin embargo,
todos ellos obtienen una reducción significativa de la duración, intensidad y
frecuencia del dolor, al igual que una mejor de la capacidad funcional, de la
discapacidad y de la calidad de vida.
Los estudios que utilizan el MP para
la rehabilitación de pacientes son dos: por osteoartritis de rodilla y por
artroplastia de cadera o rodilla. El primero de ellos (Yakut,
Vardar, Akdogan, Bayrakci y Baltaci, 2004),
subraya mejoras en la fuerza y en la velocidad al caminar tras la aplicación
del programa, y el segundo (Levine, Kaplanek y Jaffe, 2009) muestra
una gran satisfacción en los pacientes y una continuidad en la práctica del MP.
Los estudios enmarcados como MP y
capacidad aeróbica e IMC, miden y obtienen mejoras en el IMC de los sujetos
analizados tras un programa con el MP, con una frecuencia media de 3/5 sesiones
por semana y una duración de 1 hora por sesión (Carneiro et al., 2009; Jago et al., 2006; Rogers y Gibson, 2009). Uno de los
estudios observa una reducción de las circunferencias de la cintura, del pecho
y del brazo (Rogers y Gibson, 2009). Con respecto a la capacidad aeróbica tan
solo uno de los estudios mide la FC (Jago et al.,
2006) durante las sesiones. Este observa una media de 104 pulsaciones por
minuto, suponiendo un porcentaje del 50% de la Frecuencia cardiaca máxima, por
debajo del mínimo indicado por la American College of
Sport Medicine para ser concebido como actividad aeróbica. Sin embargo, la
media de esfuerzo percibido fue de 5,9 (escala 1-10) y de disfrute 4,4 (escala
1-5).
Los tres estudios encontrados sobre el
MP y la estabilidad postural aplican programas de una frecuencia semanal de 2
sesiones (Caldwell et al., 2009; Emery et al., 2010;
Jonson et al., 2007). Algunos evalúan la disposición sagital del raquis, otros
la fuerza y el equilibrio, y otros la capacidad funcional por sus implicaciones
sobre la estabilidad de la postura. Todos los autores indican que el grupo que
practicó con el MP obtiene mejoras significativas en todos los parámetros
evaluados, mientras que los grupos controles no lo hicieron, o mejoraron en
mayor medida que otros grupos en los que se había aplicado otro programa de
intervención.
La influencia del MP sobre la
flexibilidad es analizada en todos los casos valorando la extensibilidad de la
musculatura isquiosural (Keays
et al., 2008; Kloubec, 2010; Segal
et al., 2004; Sekendiz et al., 2007), bien con el
test lineal distancia dedos suelo o bien con el distancia dedos planta. Todos
los trabajos encontraron mejoras significativas tras el programa aplicado. Ademas, Keays et al. (2008),
evaluaron el ROM del hombro obteniendo mejoras, aunque tan solo en uno de los
sujetos fueron significativas.
Con relación a los estudios que
analizan el efecto del Método Pilates o de los ejercicios del MP sobre la
musculatura abdominal. Dos estudios analizan la actividad eléctrica muscular
durante la realización de ejercicios del MP. Esco, et
al. (2004) observaron valores altos de activación para el recto femoral, recto
abdominal y para el oblicuo externo. Irit y Ducan (2008) indican que el grosor de las fibras del
transverso del abdomen y del oblicuo interno aumentó durante los ejercicios y
presentó una correlación moderada. Por su lado, Queiroz
et al. (2010) analizaron diferentes variantes del ejercicio de “Superman” y
observaron que la posición con pelvis neutra conllevó una actividad
significativamente inferior en todos los músculos.
Herrington y Davies, (2005)
evaluaron la capacidad de aislamiento del transverso del abdomen y la
estabilidad abdominopélvica tras la aplicación de un
programa de ejercicio físico, observando una mayor puntuación en el grupo que
había practicado el MP. García et al. (2004) observaron un resultado positivo
tras un programa de MP en la relación de la flexión y la extensión del tronco,
obteniendo un menor desequilibrio muscular, y una mejora en el trabajo total y
la potencia muscular. Por último, Donahoe et al.
(2007) observan una mejora en la fuerza resistencia de la extensión y la
flexión del tronco.
Con relación a la población utilizada,
se ha observado que el mayor número de estudios ha sido aplicado en personas
adultas, aunque con gran heterogeneidad en la edad de los participantes y en
los objetivos de los estudios (tratamiento del dolor, rehabilitación, mejora de
la condición física y entrenamiento de la musculatura abdominal) como ya se ha
visto en los trabajos comentados anteriormente.
Con relación a los estudios aplicados
en adultos mayores, son cuatro los que aplican un programa con el MP. Uno de
ellos analiza la adhesión y la participación en el programa (Mallery et al., 2003), dos evalúan la postura (Kaesler et al., 2007; Kuo et al.,
2009), uno evalúa la flexibilidad (Kuo et al., 2009)
y dos el equilibrio (Kuo et al., 2009; Siqueira Rodrigues et al., 2010).
Los resultados muestran mejoras en la postura en bipedestación y sedentación,
así como mejoras en la autonomía funcional, la calidad de vida y el equilibrio.
En niños y adolescentes se ha
utilizado el MP para mejorar las habilidades motoras, la autoeficacia y la estabilidad
en tres niños con trastornos del desarrollo de la coordinación (Kane y Bell, 2009). Además, Min-Kyoung
et al. (2010) observaron un aumento de la densidad ósea de manera significativa
de la columna vertebral, del cuello del fémur y del trocánter femoral
izquierdo. Por otro lado, Jago et al. (2006) observan
una reducción del IMC en niñas tras un programa con el MP.
Por último, tan solo se ha encontrado
un estudio científico que aplique un programa de intervención con el MP en
deportistas (Hutchinson et al., 1998). Este lo aplica en 6 deportistas de élite
consiguiendo una mejora en el salto, en el tiempo de reacción y en la potencia
explosiva.
4.3.
Características metodológicas de los programas de intervención
Cuando se analizan las variables metodológicas
de los estudios de intervención, se observa como la mayoría utilizan una
muestra entre 11 y 20 sujetos, seguido de entre 41 y 50 sujetos. En este
sentido, las conclusiones aportadas por algunos de los autores indican que la
muestra puede ser insuficiente para aportar conclusiones con validez externa y
poder generalizar los resultados, por lo que se recomienda aumentar la muestra
en los futuros estudios.
Con respecto a la duración de las
sesiones, 19 artículos (57,57%) no muestran la misma y 10 (30,30%) indican una
duración de 60 minutos. Parece generalizada la necesidad de aplicación de
sesiones de 60 minutos de duración para conseguir resultados con el MP. La
mayor duración encontrada es de 75 minutos. Con respecto a la frecuencia
semanal se generaliza 2 o 3 veces por semana. A pesar de ello, se observa un
estudio que aplica una sesión semanal y encuentra resultados positivos. Las
duraciones totales de los programas oscilan desde 10 días hasta 6 meses, siendo
los más frecuentes los programas aplicados 4 o 12 semanas. Tal vez pudiera
abrirse aquí una línea de investigación para evaluar la influencia de la
duración y frecuencia de las sesiones, la duración total del programa, o la
intensidad del programa (nivel inicial, intermedio o avanzado) en la mejora de
las diferentes capacidades de la condición física y en la mejora o prevención
de ciertas patologías.
5.
CONCLUSIONES
Se analizaron un total de 70
publicaciones: 27 artículos teóricos, 2 revisiones bibliográficas, 3 casos
clínicos, 1 trabajo descriptivo y 37 de intervención. El ámbito de aplicación
mas frecuente es el de rehabilitación, con 8 estudios que utilizan el Método
Pilates para el tratamiento del dolor, seguido de los estudios que utilizan el
Método Pilates para la mejora de la capacidad aeróbica y el IMC (n=4), la
flexibilidad (n=4) y la estabilidad postural (n=3). Además, también destaca el
número de estudios que analizan el efecto del Método Pilates o de los
ejercicios del Método Pilates sobre la musculatura abdominal (n=7). Con relación
a la población utilizada, se observa que el mayor número de estudios se aplica
en personas adultas (n=28), seguido de los adultos mayores (n=4), niños y
adolescentes (n=3) y deportistas (n=2).
Cuando se analizan las variables
metodológicas de los estudios de intervención, se observa como la mayoría
utilizan una muestra entre 11 y 20 sujetos. Con respecto a la duración de las
sesiones, parece generalizada la utilización de sesiones de 60 minutos. La
frecuencia semanal mas utilizada es la de 2 o 3 días a la semana. Mientras que
la duración total de los programas aplicados oscila entre los 10 días hasta 6
meses, siendo la duración más habitual el rango entre 4 y 12 semanas.
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Rev.int.med.cienc.act.fís.deporte- vol.12 - número 48 - ISSN: 1577-0354