Marrero-Gordillo, N.; Alvero-Cruz, J.R.;
Álvarez-Plaza, P.Y.; Marrero-Díaz, M. y González-Brito, A.A. (2015). Respuesta
fisiológica en competición simulada de lucha canaria / Physiological Responses in
a Simulated Canarian Wrestling Contest. Revista Internacional de Medicina y
Ciencias de la Actividad Física y el Deporte vol. 15 (57) pp. 93-103. Http://cdeporte.rediris.es/revista/revista57/artaproximacion539.htm
DOI: http://dx.doi.org/10.15366/rimcafd2015.57.006
ORIGINAL
RESPUESTA FISIOLÓGICA EN COMPETICIÓN SIMULADA DE LUCHA CANARIA
PHYSIOLOGICAL RESPONSES IN A SIMULATED
CANARIAN WRESTLING CONTEST
Marrero-Gordillo1, N.;
Alvero-Cruz2, J.R.; Álvarez-Plaza3, P.Y.; Marrero-Díaz4,
M. y González-Brito1, A.A.
1. Profesor Titular de
Universidad, Centro de Estudios en Ciencias del Deporte (CECIDE) de la
Universidad de La Laguna, Tenerife. nmarrero@ull.es
y agbrito@ull.es.
2. Profesor Titular de
Universidad, Escuela de Medicina de la Educación Física y el Deporte,
Universidad de Málaga. alvero@uma.es.
3. Becaria, Departamento
de Didáctica e Investigación Educativa, Maestra Especialista en Educación
Física, Universidad de La Laguna. patriciaalpla@gmail.com.
4. Colaboradora,
Departamento de Anatomía Humana, Facultad de Medicina, Universidad de La
Laguna. marinamarrerodiaz@gmail.com.
Código UNESCO UNESCO code: 2411.06 Fisiología del Ejercicio /
Exercise physiology
Clasificación Consejo de Europa /
Council of Europe classification:
11 Medicina del Deporte / Sport medicine
Recibido 28 de febrero de 2012 Received
February 28, 2012
Aceptado 21 de noviembre de 2012 Accepted
November 21, 2012
RESUMEN
La Lucha Canaria (LC) ha sido recientemente reconocida como
deporte por el Consejo Superior de Deportes, aunque su origen se pierde en el
tiempo. Sin embargo, no hay ningún trabajo en la bibliografía científica que
describa qué ocurre fisiológicamente durante la competición en esta modalidad
de lucha, y éste es el objetivo del presente trabajo. Con una muestra de 12
luchadores de alto nivel (puntales)
simulamos el sistema de competición actual en Lucha Canaria. Se estudió la
frecuencia cardiaca, la tensión arterial y la concentración de lactato en
sangre en diferentes momentos de la simulación. Los patrones observados de
respuesta de FC, TA y lactato, caracterizan a la competición en LC como un
ejercicio intermitente, con picos de intensidad que superan el umbral láctico y
determinan incrementos importantes de FC y TA sistólica. Este estudio es el
primero en que se valora la respuesta fisiológica del luchador canario en
competición.
PALABRAS CLAVE: Lucha Canaria, somatotipo, porcentaje
de grasa, fisiología, competición, tensión arterial, lactato, frecuencia
cardiaca.
ABSTRACT
The aim of this article is to describe what happens
from a physiological point of view in a Canarian Wrestling (CW) contest. The
Spanish National Sports Council recognized Canarian Wrestling as a sport on
June 1st, 2009, although its origin is not very well documented. No scientific
article exists in the scientific literature to describe what happens
physiologically during a CW contest. Twelve high level wrestlers were recruited
to simulate a CW match. The study involved data about heart rate (HR), blood
pressure (BP) and blood lactate levels (L) at different moments of the combat.
The conclusions of the data observed concerning HR, BP and L classify Canarian
Wrestling as an intermittent exercise, with intensity peaks that exceed the
lactic threshold and high levels of HR and systolic BP. This is the first paper
in which the physiological responses in a Canarian Wrestling competition are
reported.
KEY WORDS: Canarian Wrestling, somatotype,
body fat, physiology, competition, blood pressure, lactate levels, heart rate.
INTRODUCCIÓN
La Lucha Canaria (LC) constituye el deporte autóctono por
excelencia de la Comunidad Autónoma de Canarias, y fue sólo recientemente
reconocida como deporte por el Consejo Superior de Deportes, exactamente el uno
de junio de 2009(1). Sin embargo, su origen data de fechas
anteriores a la conquista de las Islas Canarias por los castellanos, hecho que
acontece entre 1402 y 1496(2), y durante mucho tiempo fue utilizada
como granero de luchadores para otras modalidades de lucha como libre olímpica,
grecorromana o judo.
Se trata de una modalidad de lucha en la que se compite por
equipos compuestos por doce luchadores, sin separación por pesos. El equipo que
mantenga alguno de sus miembros invicto ganará la contienda. La estrategia de
combate individual es importante, pero lo es más aún la estrategia de equipo,
que es asumida por la figura del mandador.
En competición un luchador puede enfrentarse a cualquiera de los doce
luchadores del otro equipo, y la diferencia entre sus pesos puede ser muy
sustanciosa(3). Si bien la participación individual puede acabar con
sólo un enfrentamiento de dos agarradas, también puede darse la situación en
que un solo luchador venza a los doce del otro bando. Sin lugar a dudas estas
circunstancias tienen repercusión fisiológica clara. Así, la LC podría ser
caracterizada como un deporte de naturaleza intermitente(4), con
picos de gran intensidad, y tiempos de recuperación máximos tras cada sesión (agarrada o brega) determinados por el reglamento de competición. Cuando dos
luchadores se enfrentan lo hacen en tres combates, o agarradas, de 1,5 minutos cada uno, y para vencer deben ganar dos
de tres, pero si empatan van a una cuarta agarrada
de 1 minuto. El vencedor continúa en competición y el vencido termina ahí su
actuación.
La intensidad de los picos y el número de agarradas en que
participa el luchador puede determinar los componentes aeróbicos y anaeróbicos
de su participación en competición. Un estudio de la respuesta fisiológica del
luchador en competición permitirá caracterizar la respuesta cardiovascular y
metabólica de esta modalidad deportiva, y puede contribuir a ultimar la
preparación del deportista ajustando el número e intensidad de sus sesiones de
entrenamiento. El objetivo principal fue verificar la respuesta fisiológica de
la frecuencia cardiaca, la presión arterial y los niveles de lactato sanguíneo,
tras una competición simulada de Lucha Canaria.
MATERIAL Y MÉTODOS
El reglamento de competición establece que en cada
enfrentamiento, una pareja de luchadores realiza tres agarradas de hasta 90
segundos de duración cada una. Entre
cada una de estas agarradas, otras dos parejas de luchadores compiten.
Dependiendo del resultado (no todas las agarradas agotan el tiempo máximo de 90
segundos), el tiempo de recuperación entre agarradas para cada pareja es
variable. Si en un enfrentamiento y tras la tercera agarrada, ningún luchador
ha vencido al otro dos veces, se produce
una cuarta de un minuto de duración, comenzando 30 segundos tras acabar la
tercera. El luchador que gana un enfrentamiento debe obligadamente competir con
un segundo luchador, si de nuevo vence, puede optar por retirarse temporalmente
de la competición (según convenga por estrategia de equipo), y reanudarla más
adelante. El encargado de decidir si un luchador sigue en brega o se retira es
el “mandador” o estratega, que dirige
la contienda por cada bando.
Arbitrariamente, optamos por el diseño de una prueba de
campo que llevara al límite el esfuerzo de una pareja de luchadores (esfuerzo igual
o superior a 17 en la Escala de Borg de percepción del esfuerzo(5))
en un doble enfrentamiento, estimulando a los contendientes a que mantuvieran
la intensidad de la lucha hasta agotar los tiempos máximos de brega. En cada
enfrentamiento de la prueba, la pareja de luchadores realiza tres agarradas de
90 segundos de duración, con 3 minutos de descanso entre agarradas, y tras 30
segundos, una cuarta de 60s. Tras 4 minutos y medio de recuperación, se repite
el enfrentamiento; finalmente y tras 15-20min. de recuperación, terminamos la
prueba (ver cronograma Figura 1). En el estudio se utilizaron doce luchadores
federados de alto nivel (“puntales”),
que se encontraban a finales de la temporada de competición. Fueron
seleccionados precisamente por su categoría, que habla de una practica de mas
de diez años en competición. En la distribución por parejas se procuró
enfrentar a luchadores de características físicas y rendimiento deportivo
similares.
En los luchadores se valoró, además de la Escala de Borg,
la presión arterial, niveles de lactato
en sangre y frecuencia cardiaca (registro continuo). La presión arterial se
determinó con un esfigmomanómetro compacto totalmente automatizado y homologado(6)
modelo OMRON 705IT. Se registraron presiones sistólica y diastólica en reposo
(sentado); tras 10 minutos de calentamiento; en cada enfrentamiento tras
terminar las agarradas 1ª, 2ª y la del minuto, y tras 15 minutos de
recuperación. Los niveles de lactato en sangre se midieron con un analizador
portátil de lactato (Lactate PRO, LT-1710 de ARKRAY Inc.). La muestra de sangre
medida se obtuvo por punción de la yema del dedo con una lanceta estéril. Se
valoraron niveles de lactato tras el calentamiento, tras la agarrada del minuto
de cada enfrentamiento y tras 15 minutos de recuperación. A lo largo de la
prueba y posterior recuperación se realizó un registro continuo de la
frecuencia cardiaca (velocidad de registro con promedios de 5 segundos) utilizando
un monitor de ritmo cardiaco POLAR (modelo S810), analizando los datos
registrados mediante el software Polar Precision Performance versión 3.0.
Para los datos antropométricos se empleó una pesa marca
SECA, modelo 770, y un tallímetro de la misma casa (modelo 220). Con la ayuda
de un plicómetro marca Holtain (Holtain LTD, Crosswell, Crymych, Dyfeld SA41
34F, UK) medimos 8 pliegues (subescapular, tricipital, axilar medio, pectoral,
supraepinal - formalmente el suprailiaco de Heah-Carter -, abdominal, muslo
anterior y medial de la pierna) y calculamos la masa grasa empleando la fórmula
de Ball et al. (2004)(7). La masa magra la calculamos restando al
peso del sujeto su masa grasa. También calculamos el índice de masa corporal
(IMC), el somatotipo según el Método Antropométrico de Heath-Carter (1975)(8),
para lo cual necesitamos además medir dos perímetros (brazo contraído y medial
de la pierna con cinta métrica Holtein 110 P), y dos diámetros (biepicondíleo
de húmero y bicondíleo de fémur con antropómetro Harpenden); y lo expresamos en
la somatocarta.
Los datos obtenidos fueron incorporados a una hoja de
cálculo de Excel 2010 de Microsoft, donde realizamos comparaciones de variables
predictoras con variables resultados por curvas de regresión, obteniendo la
significación por el coeficiente de correlación de Pearson. Para el tratamiento
estadístico se utilizó el paquete estadístico SPSS versión 17 (Statistical
Package for Social Sciences). Los resultados se expresaron como media y
desviación estándar. Para las comparaciones de los valores medios de cada
variable en cada momento de la lucha simulada fue analizado mediante un ANOVA de medidas repetidas. En
todos los casos el nivel de significación fue
de p<0,05.
RESULTADOS
Los resultados son expuestos en las siguientes tablas y
figura a continuación.
FIGURA
2. Somatocarta de la muestra. |
|
Somatocarta con los somatopuntos de referencia para la
Lucha Canaria (3) repartidos por clasificación (Puntales A, B y C) y por categoría de
pesos. Los círculos claros son los somatopuntos de la muestra. El hexágono representa
el somatotipo medio de la muestra. |
Respecto a las comparaciones entre variables predictoras y
variables resultado, con la frecuencia cardiaca y la tensión arterial
observamos una correlación positiva para el porcentaje de grasa, la masa libre
de grasa, el índice de masa corporal, la endomorfia y la mesomorfia, con p<
0,001, y, en cambio, el nivel de lactato en sangre y la escala de percepción
del esfuerzo de Borg mostraron una correlación negativa, con p<0,01 para el
primero y p<0,05 para el segundo.
DISCUSIÓN
Tras cada agarrada, se observó un aumento en la presión
sistólica sin cambios en la diastólica (TABLA 2); este es un perfil de
respuesta hipertensora al ejercicio más propio de un ejercicio de resistencia
dinámico que de un ejercicio estático contrarresistencia(10), aunque la lucha como deporte combina ambos
tipos de ejercicios. Es importante reseñar que las medidas de presión se
realizaron con el luchador sentado y no antes de 20 segundos tras el final de
cada agarrada; ignoramos pues si en el transcurso de la agarrada se producen
niveles de presión sistólica más elevados. Sin embargo, tras 15 minutos de
recuperación, la presión sistólica medida fue similar a la de reposo. Con estos
datos se puede desterrar la acepción popular que habla de que los luchadores
son todos hipertensos, teniendo que buscar otras causas a las cifras de tensión
encontrabas en muchos luchadores, probablemente más relacionadas con los
hábitos nutricionales que con el propio ejercicio de esta modalidad de lucha.
Por tanto, la respuesta de la tensión arterial de nuestros sujetos al esfuerzo
competitivo fue normal, aunque más parecida a la que muestran los sujetos de
deportes de resistencia dinámica.
El lactato en sangre (TABLA 3) aumentó desde 2,5 (D.E.:
1,0) mmol/l, medidos tras el calentamiento previo, hasta 13,7 (D.E.:4,0) mmol/l
y 11,8 (D.E.: 1,8) mmol/l, medidos respectivamente tras el primer y segundo
enfrentamiento. Los niveles máximos alcanzados de media coinciden con los
observados por Pancorbo Sandoval (2010)(11) en judokas y en
luchadores de estilo libre (13 mmol/l), y con Callas et al. (1998)(12)
en luchadores de lucha libre, donde el nivel de lactato medio alcanzado fue de
13,5 mmol/l. En un trabajo realizado por
Callister et al (1990)(13) en judokas, con el fin de
sobreentrenarlos, comprobaron cómo los niveles de lactato en sangre era mayor
durante la simulación de la competición (randori)
que tras el trabajo sobre tapiz rodante, lo que habla de la magnitud de
esfuerzo hecho durante el combate, simulado o no, y que en nuestro caso es
también reflejado con cifras muy altas (picos de hasta 18 mmol/l tras la
tercera agarrada del primer enfrentamiento). Tras 15 minutos de recuperación el
lactato descendió hasta 6,1 (D.E.: 1,8) mmol/l. Franchini et al (2005)
(14) no encontraron niveles tan
altos en su trabajo sobre judokas de
elite, pero ellos trabajaron sobre periodos de enfrentamientos mas largos (5
minutos). Los valores medidos demuestran que durante la competición, la
intensidad del esfuerzo supera el umbral láctico(15), y que la
recuperación de los niveles basales requiere más de 15 minutos de inactividad,
como se comprueba al testarles tras ese periodo de tiempo, hecho este que se
constata también en el trabajo mencionado anteriormente de Franchini et al
(2005) (14). Esta simulación de la competición nos aporta los
niveles máximos alcanzados de lactato en sangre, así como la recuperación para
un siguiente enfrentamiento, lo cual es de mucha utilidad para la planificación
del entrenamiento de los luchadores de Lucha Canaria. Gracias a esto podremos
ajustar el número e intensidad del entrenamiento de series y el tiempo de
recuperación entre series, así como la necesidad de realizar mayor trabajo
aeróbico que ayude a mejorar la metabolización del lactato.
La respuesta de frecuencia cardiaca observada demuestra que
durante la competición se alcanzan valores bastante elevados (182,8 ± 10,1
l/min), cercanos a la frecuencia cardiaca máxima teórica para deportistas de
esa edad (TABLA 4). En cada agarrada, y tras 1 minuto de recuperación, la
frecuencia disminuyó hasta un 29,21% (D.E.: 8,22%) del incremento observado.
Tras dos minutos, disminuyó hasta un 58,68% (D.E.: 7,91%). Es de destacar que
la recuperación fue mayor tras la primera agarrada; en agarradas sucesivas
empeoró ligeramente. En el periodo de descanso previo a la agarrada del minuto
y tras 30 segundos de recuperación la frecuencia cardiaca sólo descendió hasta
un 6,86% (D.E.: 4,53%). Durante el periodo de 15 minutos de recuperación la
frecuencia cardiaca descendió hasta 79,02 % (D.E.: 4,9%) del máximo incremento
observado. Aunque el nivel de recuperación entre agarradas parece aceptable, a los 15 minutos la
recuperación no era completa. Demostrando esto la necesidad de una buena
condición aeróbica para soportar la dureza de la competición, máxime cuando el
luchador puede tener que enfrentarse a más de dos contrarios, lo que podría
acontecer perfectamente en el transcurso de una luchada.
La gran demanda física de la competición en este deporte es
la principal característica fisiológica, más aún cuando se trata de individuos
con altos porcentajes grasos e IMC elevados. Y aunque algunos autores (Olds and
Kang, 2000(16)); Pieter et al., 2002(17)) hablan de que
la experiencia es un factor más importante que los datos antropométricos para
conseguir el éxito en la competición, éstos en un deporte donde el equilibrio
juega un papel muy importante (pierde el luchador que toca primero el suelo con
cualquier parte de su cuerpo que no sean los pies) son de trascendencia
capital. Un sujeto más pesado, con más masa libre de grasa tendrá mayores
probabilidades de éxito que otro de menores características, pero eso sí, a un
conste fisiológico más alto, pues tendrá mayores tensiones arteriales sistólica
y se moverá en mayores rango de frecuencia cardiaca. Katralli y Goudar (2012(18))
afirman que mayores porcentajes de grasa se correlacionan con menor
rendimiento. Ahora bien, con los resultados obtenidos, a mayor porcentaje graso
menores niveles de lactato y menor sensación de dureza de la prueba.
CONCLUSIONES
- El presente estudio es el primero en que se valora la
respuesta fisiológica del luchador canario en competición.
- Este trabajo caracteriza a la competición en lucha
canaria como un ejercicio intermitente, con picos de intensidad que superan el
umbral láctico y determinan incrementos importantes de frecuencia cardiaca y
presión arterial sistólica, a la vista de los patrones observados de respuesta
de frecuencia cardiaca, presión arterial y ácido láctico.
- Y a raíz de los resultados expuestos aquí se puede pautar
la duración de las series de entrenamiento, así como la intensidad de las
mismas y el tiempo de recuperación entre series. Así, las sesiones de
entrenamiento deben ser dirigidas a mejorar el sistema anaeróbico, que es el
responsable de las acciones de alta intensidad, y del sistema aeróbico,
responsable por su parte del proceso de recuperación entre esas acciones de
alta intensidad.
La extensión de esta prueba de campo a un mayor número de
luchadores nos permitirá definir con mayor precisión los patrones de respuesta
fisiológica en competición del luchador canario; caracterizar las respuestas
individuales anormales y mediante evaluaciones sucesivas, valorar los progresos
en la condición física de cada luchador a lo largo de la temporada de
competición.
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totales / Total references: 18
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Rev.int.med.cienc.act.fís.deporte
- vol. 15 - número 57 - ISSN: 1577-0354