Baiget, E.; Rodríguez, F.A. e
Iglesias, X. (2016) Relación entre parámetros técnicos y
fisiológicos en tenistas de competición / Relationship Between Technical and
Physiological Parameters in Competition Tennis Players. Revista
Internacional de Medicina y Ciencias de la Actividad Física y el Deporte vol.
16 (62) pp.243-255 Http://cdeporte.rediris.es/revista/revista62/artrelacion704.htm
DOI: http://dx.doi.org/10.15366/rimcafd2016.62.005
ORIGINAL
RELACIÓN ENTRE PARÁMETROS TÉCNICOS Y
FISIOLÓGICOS EN TENISTAS DE COMPETICIÓN
RELATIONSHIP BETWEEN TECHNICAL AND
PHYSIOLOGICAL PARAMETERS IN COMPETITION TENNIS PLAYERS
Baiget, E.1,2;
Rodríguez, F.A.3,5; e
Iglesias, X.4,5
1 Profesor Titular. Departamento de
Ciencias de la Actividad Física, Universidad de Vic, España. E-mail: ernest.baiget@uvic.cat
2 Sport Performance Analysis Research Group (SPARG), Universidad de Vic-Universidad Central de Cataluña, España.
3 Profesor Catedrático. Institut
Nacional d’Educació Física de Catalunya, Universitat de Barcelona, España.
E-mail: farodriguez@gencat.cat
4 Profesor Catedrático. Institut
Nacional d’Educació Física de Catalunya, Universitat de Barcelona, España.
E-mail: xiglesias@gencat.net
5 INEFC-Barcelona Sports Sciences Research Group, Institut Nacional d’Educació Física de Catalunya (INEFC), Universitat de Barcelona, España.
Código UNESCO / UNESCO Code: 2411.06 Fisiología
del ejercicio / Exercise physiology.
Clasificación del
Consejo de Europa / Council of Europe Classification: 6 Fisiología del
ejercicio / Exercise physiology.
Recibido 18 de abril de 2013 Received
April 18, 2013
Aceptado 9
de julio de 2013 Accepted July 9, 2013
RESUMEN
Durante los últimos años ha aumentado el interés para evaluar
parámetros fisiológicos y técnicos en jugadores de tenis, actualmente existen pruebas
que permiten registrar paralelamente estos parámetros en la misma pista de
tenis. El objetivo de este estudio es determinar las relaciones entre
parámetros técnicos y fisiológicos derivados de la aplicación de una prueba de
resistencia específica en tenis. 38 jugadores de competición realizaron una
prueba continua e incremental y se registraron parámetros técnicos (efectividad
técnica (ET), punto de disminución de efectividad técnica (PDET)) y parámetros
fisiológicos (consumo máximo de oxígeno (VO2max), primer y segundo
umbrales ventilatorios (UV1 y UV2)). Se encontró una
relación significativa entre PDET y UV2 (r=0,65; p<0,05) y entre
ET y VO2max (r=0,459; p<0,01). En conclusión, los jugadores con
mejor perfil aeróbico tendieron a obtener mejores resultados de ET y se observó
una tendencia a disminuir la ET a partir de la aparición del UV2.
PALABRAS CLAVE: tenis,
resistencia específica, efectividad
técnica, consumo máximo de oxígeno, umbrales ventilatorios.
ABSTRACT
In recent years there has been an increased interest
to assess physiological and technical parameters in tennis players; currently
there are tests that allow registering these parameters in parallel on the
tennis court. The aim of this study is to determine the relationships between technical
and physiological parameters resulting from the application of a specific
endurance test procedure for tennis players. 38 competitive male tennis players
performed a continuous and incremental field test and technical (technical
effectiveness [TE], point of decreasing TE [PDTE]) and physiological parameters
(maximal oxygen uptake (VO2max), first and second ventilatory
thresholds (VT1 and VT2)) were recorded. We found a
significant relationship between PDTE and VT2 (r = 0.365, P
<0.05) and between TE and VO2max (r = 0.459, P <0.01). In
conclusion, players with a better aerobic profile tended to get better results
in terms of TE and showed a tendency to decrease TE from the appearance of VT2.
KEY WORDS: tennis,
specific endurance, technical effectiveness, maximum oxygen uptake,
ventilatory thresholds.
INTRODUCCIÓN
Durante
un partido de tenis se ejecutan una gran diversidad y volumen de acciones
técnicas. En torneos de Grand Slam se han registrado entre 806 y 1445 golpes
por partido (Weber, 2003) y en un partido de tres sets se realizan entre 300 y
500 esfuerzos de alta intensidad (Fernández, Méndez-Villanueva y Pluim,
2006). Las acciones técnicas, en muchos casos, se realizan mediante elevadas
velocidades de ejecución. En el servicio los jugadores son capaces de imprimir
velocidades a la raqueta de entre 100 a 116 km·h-1 lo que
corresponde a velocidades de pelota entre 134 y 201 km·h-1 (Kovacs,
2007). A modo de ejemplo, en el año 2012, el jugador Samuel Groth en Corea del
Sur, realizó el servicio más rápido registrado en competición oficial ATP
(Asociación de tenistas profesionales), a una velocidad de 263 km·h-1.
La mayoría de estas acciones técnicas se realizan en un entorno de juego
abierto y con un elevado componente de precisión. Aunque es muy difícil evaluar
objetivamente el rendimiento técnico en situaciones abiertas de juego, la
efectividad técnica (ET) de golpeo en situaciones cerradas se ha identificado
como un buen parámetro pronosticador del rendimiento competitivo en jugadores
de tenis (Birrer, Levine, Gallippi y Tischler, 1986;
Vergauwen, Spaepen, Lefevre, y Hespel, 1998; Smekal, Pokan, von
Duvillard, Baron, Tschan y Bachl, 2000; Vergauwen, Madou y Behets, 2004;
Baiget, Fernández, Iglesias, Vallejo y Rodríguez, 2014).
La
habilidad del jugador de tenis para golpear la pelota, correr y recuperarse
para el siguiente punto está en gran parte determinada por la capacidad
fisiológica de adquirir, convertir y utilizar energía (Renström, 2002). La
intensidad fisiológica media registrada en partidos de competición simulada se
sitúa alrededor del 50% del consumo máximo de oxígeno (VO2max) (Fernández, Fernández, Méndez y Terrados, 2005;
Ferrauti, Bergeron, Pluim y Weber, 2001; Murias,
Lanatta, Arcuri y
Laino, 2007; Smekal et al., 2003) y las concentraciones
medias de lactato en el juego son inferiores a 2.5 mmol·L-1 (Bergeron, Maresh, Kraemer, Abraham, Conroy y
Gabaree, 1991; Ferrauti et al.,
2001; Murias et al., 2007; Smekal et al., 2003), existiendo momentos en el
juego en que la intensidad del mismo eleva estos valores hasta
los 8 mmol·L-1 (Fernández et
al., 2006).
Durante
el juego se alternan puntos de un solo golpeo, como en el caso de un servicio
ganador, y puntos jugados desde el fondo de la pista mediante largos e intensos
intercambios. La imprevisibilidad en la duración de los puntos, la elección de
los golpes, la estrategia, el tiempo total de juego, el oponente o las
condiciones climáticas influyen en la solicitación fisiológica del tenis
(Kovacs, 2006).
Durante
los últimos años ha aumentado considerablemente el interés para evaluar
parámetros fisiológicos y técnicos mediante protocolos específicos llevados a
cabo en la misma pista de tenis (Vergauwen, Spaepen, Lefevre y Hespel,
1998; Smekal et al., 2000; Vergauwen et al., 2004; Landlinger, Stöggl, Lindinger,
Wagner y Müller, 2012; Baiget et al., 2014). Se han propuesto
pruebas de rendimiento de golpeo en las cuales se evalúa la capacidad de los
jugadores de dirigir la pelota hacia una zona determinada de la pista (Vergauwen
et al., 1998; Vergauwen et al., 2004; Moya, Bonete, y Santos-Rosa,
2010) o la velocidad y precisión de golpeo (Landlinger et al., 2012). Para la
evaluación de la resistencia específica la mayoría de pruebas utilizan tests
incrementales (Smekal et al., 2000; Baiget, Iglesias y Rodríguez,
2008; Girard, Chevalier, Leveque, Micallef y Millet,
2006; Ferrauti, Kinner y Fernandez, 2011; Baiget
et al., 2014). Existen protocolos que evalúan parámetros de carga y
fisiológicos mediante simulación de golpeo (Girard et al., 2006) o golpeando
una pelota fija en un péndulo (Ferrauti et al., 2011). También se han propuesto
pruebas de resistencia específicas que permiten evaluar paralelamente
parámetros fisiológicos y técnicos mediante el registro de la precisión de golpeo
(Smekal et al., 2000; Baiget et al., 2008; Baiget et al., 2014). Aunque se han
descrito diferentes variables derivadas de estas pruebas como son los
parámetros fisiológicos de consumo de oxígeno (VO2) (Smekal
et al., 2000; Baiget et al., 2014), concentración de lactato en sangre (Smekal
et al., 2000) o umbrales ventilatorios (UV) (Baiget et al., 2014), y parámetros
técnicos como el porcentaje de aciertos (ET) (Smekal et al., 2000; Baiget et
al., 2008; Baiget, Iglesias, Vallejo y Rodríguez, 2011; Baiget
et al., 2014) o el punto de disminución de efectividad técnica (PDET) (Baiget
et al., 2008; Baiget et al., 2011), no se conocen las relaciones entre estas
variables derivadas de su evaluación conjunta.
OBJETIVOS
Dada
la importancia relativa que tienen los parámetros técnicos y fisiológicos en el
tenis de competición, y considerando la posibilidad que nos ofrecen los nuevos
protocolos para evaluar dichos parámetros a la vez, parece conveniente observar
las relaciones que se establecen entre las diferentes variables susceptibles de
ser evaluadas mediante una prueba específica. Así pues, el objetivo de este
estudio es determinar las relaciones existentes entre parámetros técnicos y
parámetros fisiológicos máximos y submáximos derivados de la aplicación de una
prueba de resistencia específica en tenis en jugadores de competición.
MATERIAL Y MÉTODOS
El presente estudio tiene un diseño descriptivo correlacional y expone
los resultados que se registraron en la misma muestra y circunstancias que en el estudio publicado
por Baiget et al. (2014).
Muestra
Un total de 38 tenistas masculinos
de competición (18.2 ± 1.3 años; 180
± 0.08 cm de
altura; 72.7 ± 8.6 kg de
peso; media ± SD), participaron
voluntariamente en el estudio. Los sujetos fueron seleccionados en función de
su nivel de competición. Su nivel competitivo, valorado mediante el
International Tennis Number (ITN), se encontraba entre 1 (élite) y 4 (avanzado)
(ITN 1= 8 jugadores; ITN 2 = 10 jugadores; ITN 3 = 9 jugadores; ITN 4
= 11 jugadores). Un 89.5% de los jugadores
tenían una dominancia lateral derecha. Los sujetos tenían una experiencia media
de entrenamiento competitivo de 6.6 ± 2.0 años y mantenían un promedio de 3.7 ±
0.5 y 1.5 ± 0.4 horas diarias de entrenamiento técnico – táctico y físico respectivamente.
Todos los sujetos pertenecían a centros de entrenamiento en alto rendimiento en
tenis.
Procedimiento
Se
registraron los parámetros técnicos y fisiológicos máximos y submáximos mediante
una prueba específica de resistencia realizada en la pista de tenis (Baiget et
al., 2014) modificada de Smekal et al. (2000). Se trata de un protocolo maximal,
continuo, escalonado conducido por un máquina lanzapelotas (Pop-Lob Airmatic 104, Francia). Los jugadores debían realizar golpes de derecha y revés alternativamente al
ritmo impuesto por la máquina lanzapelotas. La figura 1 es un esquema
ilustrativo de la disposición de la pista y de la dinámica espacial del
protocolo utilizado. Se dieron instrucciones a los jugadores para que ajustaran
su velocidad de desplazamiento, de manera que llegasen a la zona de golpeo
coincidiendo con el bote de la pelota. Para asegurar un coste energético
homogéneo de los golpes en relación a la técnica utilizada, únicamente se
permitió realizar los golpes de derecha y revés liftados. La prueba empezó con
una frecuencia de lanzamiento de pelotas (FLP) de 9 tiros·min-1
y se incrementó la carga por periodos de 2 minutos a razón de 2 tiros·min-1
hasta que los jugadores eran incapaces de seguir el ritmo impuesto por la
máquina, no consiguiendo golpear dos pelotas seguidas. La velocidad de
lanzamiento de pelotas por parte de la máquina (68,6 ± 1,9 km·h-1,
CV de 2.7%) y la velocidad del viento (Vviento< 2 m·s-1)
se mantuvieron constantes y fueron evaluadas mediante un radar (Stalker ATS
4.02, EUA) y un anemómetro digital (Plastimo, Francia). El ángulo y altura de
salida de la pelota por el tubo de lanzamiento de la máquina respecto la
horizontal del suelo fue de 13° y de 41 cm, respectivamente. Los test se
administraron entre los meses de Febrero a Abril, en periodos no competitivos y
en una pista de tenis reglamentaria al aire libre, de superficie dura y
velocidad mediana (Green set®), previamente marcada con cinta adhesiva blanca.
Se utilizaron 40 pelotas de tenis nuevas (BabolatTeam®, Japón) homologadas y
aprobadas por la International Tennis Federation (ITF). Los jugadores no
participaron en ninguna competición, prueba o entrenamiento de alta exigencia
en las 24 horas previas a la prueba. Las mediciones se iniciaron después de un
calentamiento estandarizado de 18 min consistente en un calentamiento genérico
de 10 min de carrera continua, flexibilidad dinámica, diferentes tipos de
desplazamientos y carreras de aceleración, 5 min de calentamiento específico
mediante un peloteo de intensidad baja o moderada en el centro de la pista y 3
min de familiarización con la prueba, consistente en realizar el protocolo con
una FLP de 9 tiros·min-1.
Figura 1. Esquema ilustrativo de
la prueba (Baiget et al., 2014).
Parámetros fisiológicos
El intercambio de
gases y la ventilación pulmonar fueron registrados continuamente mediante un
analizador de gases portátil (K4 b2, Cosmed, Italia). Los datos fueron
registrados respiración a respiración y posteriormente tratados a valores
medios cada 15 segundos. El registro empezaba dos minutos antes de la fase de
familiarización y acababa cinco minutos después del final de la prueba. La
calibración general del sistema de medición se realizó al inicio de cada sesión
(mañana o tarde), existiendo una calibración de aire ambiente antes de cada
prueba.
Se determinó como
parámetro fisiológico máximo el consumo máximo de oxígeno (VO2max) y
los valores submáximos se detectaron mediante los umbrales ventilatorios (UV)
calculados por los cambios en los parámetros ventilatorios identificando los
puntos de cambio de pendiente o de ruptura de la linealidad (Beaver, Wasserman y
Whipp, 1986).
Se determinaron los dos UV de acuerdo con el modelo propuesto por Skinner y
MacLellan (1980).
Primer umbral ventilatorio (UV1): Se determinó usando
los criterios de un aumento en el equivalente ventilatorio para el oxígeno (VE/VO2)
sin aumento en el equivalente ventilatorio de dióxido de carbono (VE/VCO2)
y el incremento no lineal de la ventilación pulmonar (VE).
Segundo umbral ventilatorio (UV2): Se determinó mediante
el incremento en el equivalente ventilatorio para el oxígeno (VE/VO2)
y en el equivalente ventilatorio de dióxido de carbono (VE/VCO2).
Consumo máximo de oxígeno (VO2max):
Se determinó mediante la observación de una meseta o estabilización en el VO2
o cuando el aumento en dos periodos sucesivos fue inferior a 150 ml·min-1.
Parámetros técnicos
De forma simultánea
al registro fisiológico se realizó una valoración objetiva de parámetros
técnicos registrados en tiempo real mediante el cálculo de las frecuencias
relativas (porcentajes) de aciertos-errores, evaluando tanto la precisión como
la potencia de los golpes mediante zonas marcadas en la pista (figura 1). Los
jugadores realizaron los golpes de izquierda a derecha de la pista
(derecha-revés) desplazándose en sentido lateral e intentando enviar la pelota
dentro de la zona marcada (diana). Los golpes se evaluaron como aciertos o
errores en función de los criterios de precisión (la pelota enviada por el
jugador debía botar en la diana) y de potencia (una vez la pelota había botado
dentro de la diana, debía sobrepasar la línea de potencia antes de realizar el
segundo bote). Para que un golpe se considerara como acierto debía cumplir los
dos requisitos (precisión y potencia).
Efectividad técnica (ET) (% aciertos): Cálculo objetivo del porcentaje de aciertos durante la prueba en
función de los criterios de precisión y potencia. Es el porcentaje de aciertos
por periodo y a intervalos de 30 segundos.
Punto de deflexión de efectividad técnica (PDET) (núm. periodo):
Punto de inflexión determinado mediante el último valor de ET por periodo a partir
del cual el sujeto está por debajo de su media de ET (media aritmética de los
valores durante toda la prueba) y ya no vuelve a superar este valor medio
(Baiget et al., 2008; Baiget et al., 2011).
Análisis
estadístico
La
normalidad de la distribución de las variables se evaluó mediante la prueba de
Kolmogorov-Smirnov. La relación entre las variables cuantitativas se estableció
con un análisis de correlación lineal, mediante el cálculo de coeficiente de
correlación lineal de Pearson (r). El nivel de significación se estableció en un valor de p
< 0,05. Todos los análisis se realizaron con el programa
estadístico SPSS para Windows 15.0 (SPSS Inc., EE.UU.).
RESULTADOS
La prueba tuvo una duración media máxima de 13:36 min:s correspondiente
a 6.6 ± 0.83 periodos. La tabla 1 muestra la relación entre los parámetros
técnicos representados por el PDET y la ET y los parámetros fisiológicos
representados por el UV1, UV2 y VO2max. Se observa una relación débil, pero estadísticamente
significativa, entre el PDET y el UV2. Este hecho sugiere que los
sujetos mostraron una tendencia a disminuir su ET a partir del UV2.
Por otro lado, la relación significativa moderada entre la ET y el VO2max,
indica que los jugadores con un mejor perfil aeróbico tienden a obtener una
mejor ET, y por lo tanto, a cometer un menor número de errores durante la
prueba.
Tabla I.
Coeficientes de correlación (r) entre los parámetros
técnicos (PDET y ET) y parámetros fisiológicos (UV1, UV2
y VO2max) registrados durante la prueba de resistencia específica.
Parámetros
técnicos |
|
Parámetros fisiológicos |
||||
|
UV1 (mL·Kg·min-1) |
|
UV2 (mL·Kg·min-1) |
|
VO2max (mL·Kg·min-1) |
|
PDET (periodo) |
|
0.306 |
|
0.365* |
|
0.332 |
ET (% aciertos) |
|
0.296 |
|
0.324 |
|
0.459** |
*Correlación significativa
p<0.05; **Correlación significativa p<0.01; PDET: punto de disminución
de efectividad técnica; ET: efectividad técnica; UV1: primer
umbral ventilatorio UV2: segundo umbral ventilatorio; VO2max:
consumo máximo de oxígeno. |
El PDET se detectó en el periodo 5.2 ± 1.1 correspondiente a un 80.6 ±
14.5% de periodo máximo conseguido. Este punto coincide con el periodo en que
se observa el UV2 en 10 sujetos, representando el 27.7 % de los
casos. Se encontró una relación estadísticamente significativa entre el PDET y
el periodo en que se observa el UV2 (r=0.408; p<0.05). La figura 2 muestra un ejemplo de la evolución de
los parámetros técnicos (ET) y fisiológicos (VO2 y VCO2)
a lo largo de la prueba en un sujeto. Se observa como en los primeros periodos
hay una ligera evolución positiva de la ET hasta que coinciden en el tiempo
(10:00 min:s; periodo 5) el parámetro técnico PDET y el parámetro fisiológico
submáximo UV2, a partir de este momento se produce un descenso
pronunciado de la ET.
Figura 2.
Evolución de la efectividad técnica (ET) (A), consumo de oxígeno (VO2)
y producción de dióxido de carbono (VCO2)
(B), a lo largo de la prueba en un sujeto. Se indica el punto de disminución
de efectividad técnica (PDET) (A) y el segundo umbral ventilatorio (UV2)
(B). Mediante la franja oscura se señala la coincidencia en el tiempo entre
PDET y el UV2.
DISCUSIÓN
Los resultados de este estudio indican que en el desarrollo de una prueba
de resistencia específica que evalúa paralelamente parámetros técnicos y
fisiológicos (Baiget et al., 2014), los jugadores con mejor perfil aeróbico
tienden a obtener mejores resultados de ET y que existe una tendencia a
disminuir la ET a partir de la aparición del UV2.
El tenis de competición es un deporte de elevadas exigencias tanto a
nivel técnico como a nivel fisiológico (Kovacs, 2007). Se han observado
relaciones entre el rendimiento competitivo en jugadores de competición y
parámetros tanto técnicos como fisiológicos (Birrer et al., 1986; Vergauwen et
al., 1998; Smekal et al., 2000; Vergauwen et al., 2004; Banzer, Thiel, Rosenhagen y
Vogt, 2008; Baiget et al., 2014). Aunque se ha descrito el perfil
fisiológico (Smekal et al., 2000; Baiget et al., 2008) y técnico (Vergauwen et
al., 1998; Vergauwen et al., 2004; Moya et al., 2010; Landlinger et al., 2012;
Baiget et al., 2014) de tenistas de competición en relación a pruebas de
resistencia o de rendimiento de golpeo, existe poca información sobre la
relación entre estos parámetros determinantes del rendimiento.
La
relación significativa encontrada entre el PDET y el UV2 (r=0,365; p<0.05) y entre el PDET y el
periodo en que se observa el UV2 (r=0.408; p<0.05), a pesar de no ser muy estrecha, indica que los jugadores
muestran una clara tendencia a disminuir la ET a partir del UV2.
Esta relación podría suponer que los sujetos que alcanzan este umbral en una
carga más elevada experimentarán el PDET más tarde. En esta misma línea, se han
descrito relaciones entre el PDET y el punto de deflexión de frecuencia
cardíaca (PDFC) en jugadores de competición (Baiget et al., 2008). La evolución
de la ET expuesta de un sujeto (figura 1), está en la misma línea que los
resultados encontrados por Baiget et al. (2014), los cuales identifican 3 fases
diferenciadas. Se observa una primera fase de adaptación (del 1er al
3er periodo) en la que, aunque la intensidad es reducida, el nivel
de ET es menor. Posteriormente se observa una fase de intensidad moderada en la
que se observa la máxima eficacia (4º y 5º periodos) para finalmente, a partir
del UV2, se produce una disminución progresiva de la ET (6º y 7º
periodos).
A
partir de una intensidad superior al UV2 el jugador entraría en un
estado de acidosis metabólica como consecuencia del aumento de la concentración
de lactato. Este hecho ocasionaría la disminución del pH, factor que está
asociado a la inhibición de la enzima fosfofrutoquinasa (PFK) y a una reducción
en la glucólisis pudiendo contribuir con el proceso de fatiga precoz (Shephard
y Astrand, 1996; Gómez, Cossio, Brousett y Hochmuller, 2010). Esta situación
metabólica esta relacionada con un descenso de la fuerza muscular (Sahlin,
1992) y afectaría negativamente al rendimiento técnico del jugador provocando
un descenso de la ET, posiblemente debido a una interacción de diferentes
factores como la disminución de la sincronización de los golpes, afectación de
la coordinación dinámica general o una inadecuada posición de golpeo. La
acumulación de ácido láctico en el músculo ejerce una influencia negativa en el
rendimiento de golpeo en tenis. Concentraciones de lactato superiores a 7-8
mmol·L-1 se asocian a una disminución del rendimiento, tanto técnico
como táctico en tenis (Lees, 2003; Davey, Thorpe y Williams, 2002). En esta
misma línea, Davey et al. (2002) observan una elevada disminución de la
exactitud de los golpes (69%) entre el comienzo de una prueba intermitente
específica (Loughborough Intermittent Tennis Test) y la exactitud observada al
final de la prueba (35,4 ± 4,6 minutos) y lo atribuyen a la elevada
concentración de lactato sanguíneo (9,6 ± 0,9 mmol·L-1).
Por
otro lado, atendiendo a que el tenis es un deporte con marcadas características
aeróbicas y anaeróbicas alàcticas (König, Huonker, Schmid, Halle, Berg y Keul, 2001; Smekal et
al., 2001; Elliott, Dawson
y Pyke, 1985; Chandler, 1995; Renström, 2002) y que durante la actividad
competitiva raramente se participa a intensidades superiores al UV2
o cercanas al VO2max (Ferrauti et al., 2001; Christmas, Richmond, Cable, Arthur y
Hartmann, 1998; Smekal et al., 2003; Fernández et al., 2005), cabe suponer que el
jugador de tenis no está preparado específicamente para realizar los golpeos en
estado de acidosis metabólica.
Considerando
el probable efecto negativo de la acumulación de lactato en el rendimiento de
golpeo, es lógico pensar que tener un UV2 más elevado hará retrasar
la aparición de fatiga en una prueba progresiva y la consecuente disminución de
la ET. Como futura línea de investigación, sería interesante observar cómo
afecta el nivel de UV2 en determinadas situaciones de juego, como
por ejemplo durante la disputa de puntos, de elevada intensidad y duración.
La
calidad de los patrones de movimiento y la coordinación de acciones específicas
en el tenis depende del esfuerzo fisiológico producido durante el ejercicio
intermitente a corto plazo (Kovacs, 2006). La relación observada entre la ET y el
VO2max (r=0.459; p<0.01) indica que los jugadores con un mejor perfil aeróbico
tienden a obtener una mejor ET, y por lo tanto, cometen un menor número de
errores durante la prueba. Aunque la relación entre estas variables no es muy
estrecha, seguramente debido a que el tenis es un deporte multifactorial y
existen diferentes factores que pueden afectar a la ET, parece que el nivel de
resistencia puede afectar a componentes de carácter técnico, posiblemente
debido a los efectos negativos de la fatiga sobre el rendimiento técnico del
jugador. La fatiga se va instaurando de forma progresiva desde
prácticamente el inicio de un esfuerzo (López Calbet y Dorado García, 2006).
Posiblemente, los jugadores con un VO2max superior, ante una misma
carga o periodo, soportan una intensidad fisiológica relativa inferior, y por
lo tanto, participan con menores niveles de fatiga. La fatiga afecta el
rendimiento de las habilidades de raqueta y se manifiesta con un pobre juego de
posición y con una disminución de la precisión de los golpes (Lees, 2003;
Fernández, 2007). Se han observado disminuciones significativas de velocidad de
servicio (3.2%) y precisión del golpe de derecha (21.1%) después de un
ejercicio que inducía fatiga en jugadores de competición (Rota y Hautier,
2012). Es lógico pensar que un VO2max superior puede colaborar a
obtener mejores resultados de ET en una prueba de resistencia progresiva. Se
ha constatado que la fatiga inducida por un entrenamiento específico de
tenis de 2 horas de juego se traduce en un aumento significativo del porcentaje
de errores y en una disminución también significativa de la velocidad de golpeo
(Vergauwen et al., 1998).
Aunque el rendimiento en tenis es de carácter
multifactorial, parece que son necesarios unos adecuados niveles de resistencia
para hacer frente a las demandas competitivas. Una buena
capacidad aeróbica permite una adecuada recuperación entre puntos y mantener la
intensidad de juego a lo largo de la duración total del partido (Konig et al.,
2001; Smekal et al., 2001). En esta línea, se ha
sugerido que para un adecuado rendimiento competitivo los jugadores de tenis de
competición deben tener un VO2max superior a 50 ml·kg·min-1,
no obstante, niveles extremadamente altos (por ejemplo, > 65 ml·kg·min-1)
no aseguran una mejora en el rendimiento en este deporte (Kovacs, 2007). Se
han encontrado relaciones entre el rendimiento competitivo y parámetros
fisiológicos máximos como el VO2max (Banzer et al., 2008; Baiget et
al., 2014) o fisiológicos submáximos como el UV2 (Baiget et al.,
2014) o el PDFC (Baiget et al., 2008).
CONCLUSIONES
Los jugadores con mejor perfil aeróbico tienden a obtener mejores
resultados de ET en una prueba de resistencia específica que evalúa
paralelamente parámetros técnicos y fisiológicos, posiblemente debido a que
participan con niveles inferiores de fatiga durante la mayor parte de la prueba.
Existe una tendencia a disminuir la ET a partir de la aparición del UV2,
probablemente como consecuencia del impacto que ejerce la acumulación de ácido láctico
sobre el rendimiento técnico de los
golpes.
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Número de citas
totales / Total references: 35 (100%)
Número de citas propias de la revista / Journal's own references: 1 (2,9 %)
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- vol. 16 - número 62 - ISSN: 1577-0354