Yuing
Farías, T.; Henríquez Flores, R.; Pradanos Salomon, N.; Cortés Villalobos, S. y
Curilem Gatica, C. (2019). Efecto
hipotensor agudo del ejercicio de oclusión vascular sobre adultos mayores /
Cute Hypotensor Effect of the Vascular Occlusion Exercise on Elderly Adults. Revista
Internacional de Medicina y Ciencias de la Actividad Física y el Deporte vol.
19 (74) pp. 197-208 Http://cdeporte.rediris.es/revista/revista74/artefecto1027.htm
DOI:
http://doi.org/10.15366/rimcafd2019.74.002
ORIGINAL
EFECTO HIPOTENSOR AGUDO DEL EJERCICIO DE
OCLUSIÓN VASCULAR SOBRE ADULTOS MAYORES
ACUTE HYPOTENSOR EFFECT OF THE VASCULAR
OCCLUSION EXERCISE ON ELDERLY ADULTS
Yuing Farías, T.1; Henríquez Flores,
R.1; Pradanos Salomon, N.1; Cortés Villalobos, S.1
y Curilem Gatica, C.1
1 Escuela de
Kinesiología, Facultad de Salud, Universidad Santo Tomás, Chile. tuillangyuing@santotomas.cl,ricardohenriquezfl@santotomas.cl, ninoska.pradanos@gmail.com, sebac-16@hotmail.com,
c.curilem.g@gmail.com
Código UNESCO / UNESCO Code: 321311 Fisioterapia / Physiotherapy
Clasificación Consejo de Europa / Classification
Council of Europe: 14 Fisioterapia y rehabilitación / Physiotherapy
and rehabilitation
Recibido 18 de julio de 2017 Received
July 18, 2017
Aceptado 15 de enero de 2019 Accepted
January 15, 2019
RESUMEN
Objetivo:
El objetivo de este estudio fue evaluar la respuesta cardíaca
aguda después de realizar una sesión de ejercicio con oclusión vascular en adultos
mayores (AM). Sujetos y método: 22
participantes voluntarios, fueron sometidos al protocolo
experimental de ejercicio dinámico de prensión manual con un 30% de presión de
oclusión (PO), después de registrar los valores basales y en reposo de presión
arterial sistólica (PAS), presión arterial diastólica (PAD) y frecuencia
cardíaca (FC). Evaluadas en condiciones basales y entre los 5
y 30 minutos post-oclusión. Resultados:
Al finalizar el protocolo se observó una reducción significativa en la PAS y FC
a los 15’, 20’ y 25’ (p<0,05) y para la PAD a los 10’ y 20’ (p<0,05). Conclusión: El efecto agudo del ejercicio
con oclusión vascular genera una reducción significativa de PAS, PAD y FC hasta
25 minutos post-oclusión, en los AM analizados.
PALABRAS CLAVES: Hipertensión;
Hipotensión post ejercicio; Oclusión terapéutica.
ABSTRACT
The
objective of this study was to evaluate the acute cardiac response after
performing an exercise session with vascular occlusion
in elderly adults (EA). Twenty-two volunteer participants underwent the
experimental protocol of dynamic manual grip exercise with 30% occlusion
pressure (OP), after recording the baseline values and resting systolic blood
pressure (SBP), diastolic blood pressure (DBP) and heart rate (HR). All
measures were taken in basal conditions and between 5 and 30 minutes’
post-occlusion. At the end of the protocol, there was a significant reduction
in SBP and HR at 15 ', 20' and 25 '(p <0.05) and for DBP at 10' and 20 '(p
<0.05).). The acute effect of exercise with vascular occlusion generates a
significant reduction of SBP, Basal Diastolic Pressure (BDP) and HR up to 25 minutes’
post-occlusion, in the EA analyzed.
KEYWORDS:
Hypertension; Post-Exercise Hypotension; Therapeutic
Occlusion.
INTRODUCCIÓN
La intolerancia al ejercicio es una
característica común de múltiples enfermedades crónicas no transmisibles,
incluyendo la hipertensión arterial (HTA). Se han postulado varios mecanismos,
como anormalidades en el metabolismo muscular, alteraciones en la absorción y
utilización del oxígeno muscular y especialmente restricciones del flujo
sanguíneo muscular, para explicar esta baja tolerancia al esfuerzo (1).
La HTA es una enfermedad y un factor de
riesgo cardiovascular, se caracteriza por un aumento elevado, progresivo y
mantenido en el tiempo, de la presión arterial sistólica (PAS), diastólica
(PAD) o ambas. La HTA es más frecuente en los adultos mayores (AM) (2),
producto de cambios que ocurren con el envejecimiento (3, 4). En la
HTA se puede alterar la regulación del tono vascular, generando un predominio
de la vasoconstricción sobre la vasodilatación, lo que se traduce en un aumento
de la resistencia vascular periférica (RVP) y que puede ir acompañada de
restricción del flujo sanguíneo periférico (5).
Varios factores han sido involucrados en
la RVP, tales como: aumento del tono vasomotor, irregularidad del lumen de los
vasos y procesos de inflamación de bajo grado; que aumentan la resistencia al
flujo de sangre. Sin embargo, estudios realizados en diversos modelos sugieren
que estos factores no son suficientes para explicar el aumento en la RVP, por
lo que han sido evaluados otros factores que están íntimamente relacionados,
como propiedades del flujo sanguíneo o la restricción del flujo por una capa
macromolecular sobre la superficie endotelial (6).
El ejercicio regular es una intervención
bien establecida para la prevención y tratamiento de la HTA (7). Las
personas pueden beneficiarse clínicamente de hipotensión post-ejercicio (HPE) (8,9)
que tiene una mayor duración cuando se realiza de 2-3 veces por semana (10,11).
Los efectos hipotensores del ejercicio parecen estar inducidos principalmente
por una mejora en la sensibilidad barorefleja (12), supresión de
actividad simpática (9), incremento en el gasto cardíaco (13)
y la liberación de vasodilatadores (14).
Por lo mencionado hasta ahora, es que se
ha indagado en metodologías que reduzcan la RVP, con la consecuente reducción
en la presión arterial (PA), así como también generen una hiperemia durante el
ejercicio, esta respuesta sigue siendo un punto de controversia. Algunos
mecanismos involucrados en esta respuesta son: regulación neural, respuesta
endotelial y regulación de la función cardíaca. Dentro de las metodologías más
utilizadas se menciona al entrenamiento intervalado de alta intensidad (HI), el
cual ha demostrado muy buenos efectos en hipertrofia muscular y reducción de la
PA de manera aguda (post ejercicio) y crónica con el entrenamiento planificado (15).
En AM se ha demostrado que el entrenamiento de HI presenta altos riesgos de
lesión, dificultando la adherencia de los sujetos(16). En este
contexto, la oclusión vascular ha sido destacada por su seguridad y los efectos
similares a los obtenidos por el entrenamiento de HI, pero a intensidades más
bajas y con menores riesgos de lesión(17). De la oclusión vascular
se han identificado diferentes usos y beneficios, de los cuales los más
estudiados son el aumento de la fuerza e hipertrofia muscular. Estos resultados
generarían una mayor vasodilatación periférica y un aumento del metabolismo muscular
(18,19). Estos efectos permiten optar por el entrenamiento con oclusión vascular,
como un método seguro, aplicable en AM y con efectos similares a la HI.
Por otro lado, en un estudio de Neto (20)
uno de los efectos observados es la disminución de la PA en sujetos normotensos
luego de la aplicación del ejercicio oclusivo pasando de 119 ± 8,9 mmHg de
presión arterial media en reposo a 113 ± 11,1 mmHg, luego de 60 min posterior
al entrenamiento (20).
En base a estos antecedentes, el entrenamiento
de oclusión vascular podría ser una herramienta útil en el trabajo con
poblaciones de riesgo, como lo son los AM. En normotensos se sabe que puede
controlar de manera aguda la PA, pero se desconoce cuales podrían ser sus
efectos en AM con presiones arteriales elevadas.
Por lo tanto, el propósito de este
estudio es evaluar los efectos agudos posterior a la realización de una serie de
ejercicio bajo oclusión vascular en AM.
MATERIAL Y MÉTODOS
Se seleccionó una muestra a
conveniencia, donde se invitó a los participantes mediante una carta dirigida a
la agrupación de AM “Luz de luna” de las comunas de Los Vilos, IV región Chile,
la cual fue acogida por un total 22 sujetos de ambos géneros. Todos los
participantes de esta investigación leyeron y firmaron el consentimiento
informado antes de participar en el estudio. El proceso de selección y
tratamiento de los sujetos fue aprobado por el Comité de Ética centro/norte de
la Universidad Santo Tomás. Se seleccionó a los sujetos que cumplieran con
criterios de inclusión referentes a que fueran ≥ a 65 años, con
residencia en la comuna de Los Vilos, IV región-Chile y que hubiesen firmado el
consentimiento informado. Los criterios de exclusión para la muestra fueron:
que presente un grado de dependencia que limiten la práctica de ejercicio,
presentar patologías cardiovasculares, presentar antecedentes trombóticos o
evento cardiovascular en los últimos 2 años y que haya realizado ejercicio
vigoroso durante las últimas 24 horas previas a la recolección de datos (Fig 1).
Fig. 1. Diseño del estudio. Treinta sujetos respondieron a la invitación a
participar en este estudio. Dos sujetos no se presentaron a la sesión y seis no
cumplieron los criterios de inclusión / exclusión. Veintidós sujetos realizaron
la sesión de ejercicio.
Procedimientos del estudio
A los sujetos seleccionados se les
recolectó su historia clínica y sus medidas del peso corporal, estatura e
índice de masa corporal (IMC).
Protocolo de
ejercicio oclusivo
La sesión tuvo duración de 40 minutos,
se inicia tomando las presiones pre-ejercicio, la Presión arterial basal (PAB)
se registra posterior a 5 minutos de reposo en posición supina y la Presión
arterial en reposo (PAR) será posterior a 3 minutos en la posición sedente, la
presión sedente se utilizará para determinar la presión de oclusión (PO)
calculada como PO= (PAS*0,3) + PAS.
Posteriormente se realizó 1 minuto de
ejercicio dinámico con el miembro dominante, donde el segmento de antebrazo
estará apoyado sobre una mesa, con la articulación de codo en un ángulo de 90°.
Una vez aplicada la PO se le solicitó al paciente un minuto de prensión manual
o hasta el fallo muscular.
Posterior a esto se evaluó la PA post-ejercicio
a los 5, 10, 15, 20, 25 y 30 minutos post-oclusión. Las mediciones de la PA se
tomaron de acuerdo a lo descrito por la guía clínica de HTA primaria o esencial
en personas de 15 años y más.
Análisis estadístico
Para la realización de este análisis se
utilizó estadística descriptiva, utilizando medida de tendencia central a
través del promedio o media aritmética y de dispersión mediante el error
estándar de la media. Para comprobar la distribución normal, se utilizó la
prueba de Shapiro Wilk. Para la estadística inferencial, los datos se
procesaron con prueba de t-student pareado para grupos que tuviesen una
distribución normal y se utilizó la prueba de Wilcoxon para los que no tuviesen
una distribución normal. Los valores se muestran como media ± DE y la
significancia estadística se definió con un p<0,05.
RESULTADOS
Un total de 22 participantes, 17 mujeres
y 5 hombres, completaron la totalidad del protocolo. En la tabla 1 se resumen
las características demográficas de los participantes del estudio. El 53% de
las mujeres y el 60% de los hombres se encuentran en la categoría de sobrepeso
para su rango de edad (21). Además, el 11,76% de las mujeres y el
20% de los hombres tenían PAS basales sobre el rango normal para su edad, al
registrar la PAD, el 5,9% de las mujeres y el 20% de los hombres, se
encontraban sobre el valor normal para su edad. De la misma forma, al medir su
PAS y PAD en reposo, un porcentaje no menor de mujeres y hombres se encontraban
por fuera del rango de normalidad (PAS=17,64%, 40%; PAD=17,64%, 0%, mujeres y
hombres respectivamente).
Los cambios que se producen en la PAS y
PAD antes y después de la sesión de ejercicio con oclusión vascular se muestran
en la figura 2. Existe un aumento significativo en la PAS al pasar del basal a
la posición sedente en reposo (p<0,05) y en la PAD (p<0,001). Este aumento
persiste a los 5 minutos después de realizar la sesión de ejercicio con
oclusión, tanto para la PAS como para la PAD (p<0,01). A los 10’, 15’ y 20’
hay una reducción significativa con respecto al valor basal para la PAD
(p<0,05; p<0,01; p<0,05 respectivamente).
Por último, hubo una reducción
significativa en la PAS con respecto a la PAR a los 15’, 20’ y 25’ (p<0,05)
y para la PAD a los 10’ y 20’ (p<0,05).
Tabla 1. Características demográficas de la muestra (n=22).
|
|
Promedio
± Desviación estándar |
Intervalo
de Confianza (95%) |
Mínimo |
Maximo |
|
Edad (años) |
71,86
± 4,06 |
(68,5-74,5)
|
Min
65 |
Max 81 |
Peso
(Kg) |
74,45
± 12,78 |
(64,5-85,5)
|
Min
49 |
Max 97 |
|
|
Talla (m) |
1,573
± 0,1 |
(1,52-1,63)
|
Min
1,34 |
Max 1,84 |
|
IMC
(Kg/m2) |
29,95
± 3,4 |
(27,5-32)
|
Min
24 |
Max 36 |
|
PASB
(mmHg) |
131,4
± 8,4 |
(124-138,5)
|
Min
116 |
Max 149 |
|
PADB
(mmHg) |
72,86
± 10,95 |
(61-79)
|
Min
58 |
Max 96 |
|
PASR
(mmHg) |
135,1
± 10,59 |
(126,5-141,5)
|
Min
119 |
Max 163 |
|
PADR
(mmHg) |
79,05
± 7,98 |
(61-85,5)
|
Min
65 |
Max 95 |
IMC, índice de masa corporal; PASB, presión arterial sistólica basal;
PADB, presión arterial diastólica basal; PASR, presión arterial sistólica
reposo; PADR, presión arterial diastólica reposo; IC, intervalo de confianza;
Min, valor mínimo; Máximo, valor máximo.
Fig. 2: Cambios en la presión arterial sistólica y presión
arterial diastólica, antes y después de la sesión de ejercicio con oclusión
vascular. PAS: presión arterial sistólica (Línea continua), PAD: presión
arterial diastólica (Línea discontinua). *: Diferencia significativa con
respecto al valor basal, #: diferencia significativa con respecto al reposo.
*=p<0,05; **=p<0,01; ***; p<0,001; #=p<0,05
Con respecto a los cambios que se
producen en la FC, estos se muestran en la figura 3. Existe un aumento
significativo entre la posición basal y la de reposo y que se mantiene elevada
a los 5’ y 10’ después de realizar el ejercicio con oclusión vascular
(p<0,01 para posición de reposo y 5’; p<0,05). Por otro lado, se muestra
una reducción significativa (p<0,05) a los 10’ posteriores a la ejecución de
la sesión de ejercicio con oclusión vascular y muestra una reducción
significativa cada vez mayor y que se extiende hasta los 30’ de finalizado el
ejercicio (p<0,05 a los 15’, 20’, 25’ y 30’ respectivamente).
Fig. 3: Cambios en la frecuencia cardíaca, antes y
después de la sesión de ejercicio con oclusión vascular. *: Diferencia significativa con respecto al
valor basal, #: diferencia significativa con respecto al reposo. *=p<0,05;
**=p<0,01; #=p<0,05.
DISCUSIÓN
El objetivo del presente fue evaluar la
respuesta aguda sobre la PA y FC después de realizar una sesión de ejercicio
con oclusión vascular en AM. En este contexto, los resultados obtenidos en la
presente investigación ponen de manifiesto reducciones significativas de la PAS
(p<0,05) a los 15’, 20’ y 25’; y de la PAD a los 10’, 15’ y 20’ (p<0,05;
p<0,01, p<0,05 respectivamente), posteriores a la realización de una
sesión de ejercicio con oclusión vascular.
Estos datos confirman que la PA puede
disminuir hasta 25’ minutos después del ejercicio y la prescripción de esta
modalidad, con una breve duración y alta intensidad percibida por la oclusión,
es segura para los AM (cambios en la presión no eran riesgosos). Si bien es
cierto se generaron reducciones significativas en la PAS y PAD una vez
finalizado el ejercicio con oclusión vascular, antes de la sesión de ejercicio,
los niveles de PA estaban adecuadamente controlados según las directrices
internacionales (22).
En nuestros resultados existe un aumento
en la PAS y PAD al pasar de la posición basal a la de reposo y este cambio
persiste 5’ posteriores a realizar el ejercicio con oclusión vascular, cabe
mencionar que la menor masa muscular y menor capilaridad de los miembros
superiores, en conjunto con el aumento de la resistencia al flujo sanguíneo
impuesto por la oclusión vascular, conlleva a un aumento en la PA. Este efecto
es similar a lo que ocurre al realizar las últimas repeticiones de una serie de
ejercicios aumentando la PA intraesfuerzo(26). Se ha postulado que
la realización de ejercicio de resistencia de grandes grupos musculares genera
una HPE (28,229) tanto en personas normo tensas como en personas
hipertensas y que el mayor efecto de reducción de PA se daría en estas últimas.
Además de ello, se comparó el efecto de realizar este tipo de ejercicios 2 a 3
veces por semana, en donde no se encontraron diferencias significativas en las
reducciones de los valores de PA según el número de sesiones de entrenamiento
semanal.
Un estudio realizado el año 2010 (21),
comparó la HPE de un ejercicio dinámico con oclusión vascular en AM hipertensos
sedentarios versus los entrenados. En él se encontró que en ambos grupos
redujeron significativamente la PA, pero el mayor cambio se generó en el grupo
sedentario. Esto indicaría que es posible realizar este tipo de ejercicio en
pacientes AM con HTA y que podría generar un cambio importante en los valores
de PA con o sin el complemento del tratamiento farmacológico.
Tanto los tratamientos farmacológicos
como el ejercicio físico contribuyen a reducir la PA y los riesgos asociados a
su aumento. Es bien conocido que los beneficios del ejercicio físico se
manifiestan a largo plazo y cuando existen adaptaciones crónicas al ejercicio y
estos efectos han estado asociados principalmente a diferentes modalidades de
ejercicio aeróbico (23,24,25). De esta misma forma, en un estudio se
comprobó sólo una reducción significativa de la PAS a
los 60’ de realizar el protocolo de alta intensidad en prensa de piernas. Por
otro lado, al realizar un ejercicio con oclusión vascular, al 20% de 1 repetición
máxima (RM) y con una oclusión de 200 mm Hg que resultó sin cambios
significativos a los 30’ y 60’ después de realizar el ejercicio. Si bien es
cierto, no hubo diferencias significativas, se consideró que la PO no fue lo
suficientemente intensa para desarrollar una HPE y que existiría una relación
directa entre aumento de la resistencia a vencer y la respuesta hipotensiva,
siendo a mayor oclusión, mayor disminución en las variables de PA.
Aunque
se han postulado algunos mecanismos fisiológicos para explicar la HPE, aún no
se ha llegado a un consenso al respecto. La reducción de la actividad autonómica simpática es una de las
hipótesis identificadas como responsables de la HPE, esta a su vez estaría
asociada con vasodilatadores que conducen a una reducción en la RVP y, en
consecuencia, disminución de la PA (30).
Otro aspecto para mencionar con respecto a
la posible reducción de la actividad simpática es la reducción de la FC.
Nuestros resultados muestran una reducción significativa después de realizar la
sesión de ejercicio con oclusión vascular, con una clara tendencia hacia la
disminución y que se extiende hasta los 30’. Estas dos características de
reducción de la PA y FC, pueden deberse a una reducción de la actividad
autonómica simpática o a su vez debido a una mejora en la perfusión tisular, lo
que traería como consecuencia una mayor eficiencia en el trabajo cardíaco (31).
Todos los efectos mencionados hasta ahora
son producto de períodos de entrenamiento, vale decir, la respuesta crónica de
respuesta hipotensora frente a ejercicios de resistencia o de oclusión
vascular, pero no se había investigado la respuesta aguda frente al ejercicio
de oclusión vascular. Esta pareciera ser similar a la respuesta crónica, pero
limitada en el tiempo, no extendiéndose más allá de los 30’, pero al considerar
la respuesta frente a una sola sesión de ejercicio de oclusión vascular, además
de lo documentado como respuesta crónica, sentaría las bases para la aplicación
de este tipo de entrenamiento en el manejo y control no farmacológico de la HTA.
Los datos reportados en este estudio,
junto con la evidencia actual respecto a la utilidad clínica que podría tener
este tipo de metodología en el manejo y control de la HTA, aún quedan muchos
aspectos fisiológicos por explorar y aclarar, sin embargo, se ha postulado que
los ejercicios con grandes grupos musculares, así como también la PO utilizada,
influyen en la intensidad y duración de la respuesta post ejercicio.
CONCLUSIÓN
El efecto agudo de un ejercicio dinámico
con oclusión vascular genera una disminución significativa en la PA y FC
durante los primeros 25 minutos post ejercicio en los AM estudiados, por lo que
podría ser una opción de tratamiento no farmacológico de la HTA.
AGRADECIMIENTOS
A
la Dirección de Investigación y Post grado de la Universidad Santo Tomás por su
constante apoyo en el desarrollo de proyectos de investigación y difusión científica.
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vol. 19 - número 74 - ISSN: 1577-0354