Rev.int.med.cienc.act.fís.deporte – vol.3 - número 9 - marzo 2003 - ISSN: 1577-0354
Garatachea Vallejo, N. y De Paz Fernández, J.A. (2003). Exactitud del
método de monitorización de la frecuencia cardíaca en la estimación del coste
energético. Revista Internacional de Medicina y Ciencias de
Exactitud del método de monitorización de
ACCURACY OF MONITORING HEART RATE METHOD FOR
QUANTIFYING ENERGY
EXPENDITURE
Garatachea Vallejo, N. 1 y De Paz
Fernández, J.A. 2
1 Email:
nugarata@posta.unizar.es
Departamento
de Fisiatría y enfermería
Facultad
de Ciencias de
C/
Valentín Carderera, Nº 4
22071 Huesca
2 Email:
dfiapf@unileon.es
Departamento
de Fisiología
Instituto
Nacional de Ciencias de
Campus
de Vegazana.
24.071
León
El método de
monitorización de la frecuencia cardíaca (MFC) es utilizado para la estimación
de la energía gastada. Sin embargo, una de las principales críticas a dicho
método es su exactitud. Por ello que nuestro estudio se centró en cuantificar
la exactitud del referido método cuando se aplica a diferentes intensidades de
esfuerzo.
Participaron 9
sujetos que realizaron primero una ergoespirometría para la determinación de la
recta VO2-FC
y otra posterior para comparar la estimación con los resultados del VO2
medido.
No existen
diferencias entre el VO2
estimado y medido. El porcentaje de error medio fue de 1.47%, ocurriendo el
mayor porcentaje de error a la intensidad más baja. Diferenciando por sexos,
ocurre que para las mujeres el VO2
se sobrestima y en los hombres se subestima.
Este método es
de una elevada relación beneficio/coste por lo que puede ser de gran utilidad
en estudios de poblaciones.
PALABRAS CLAVE: frecuencia cardíaca, consumo de
oxígeno, energía gastada.
ABSTRACT
Monitoring heart
rate method is used for quantifying energy expenditure. However, one of major
criticals to this method is its accuracy. For it, our study is focused in
quantifying accuracy when is used in different effort intensity.
9 subjects
performed a exercise test for calculating VO2-FC linear relationship first, and later other exercise test for
comparing VO2 measured with VO2
estimated.
There are no
differences between VO2 measured and estimated. Error percentaje was 1.47%, and the higthest
error percentaje was in the lowest intensity. When we differ by sex, VO2 is overestimated for women and underestimated for men.
This method has a
hight ratio benefit / cost, for this reason it has great utility for studying
populations.
KEY WORDS: heart rate,
oxygen consumption, energy espenditure.
1. ANTECEDENTES
Distintas investigaciones utilizan el método de monitorización de la
frecuencia cardíaca (MFC) para la determinación de la energía gastada y varias
de ellas han demostrado su potencial para estimar el coste energético (Moon,
J.; Butte, N., 1996).
Una de las principales críticas a este método es su exactitud, en tanto
en cuanto nos proporciona información lo más ajustada posible a la realidad
(Ceesay, S. y cols., 1989; Eston, R. y cols., 1998; Racette, S., 1995; Moon,
J.K. y Butte, N.F., 1996; Kalkwarf, H.J. y cols., 1989). Es por ello por lo que
muchos autores centran sus investigaciones en el estudio de su exactitud y en
consecuencia cómo mejorarlo.
Son varios los
que proponen mejorar la predicción de la energía gastada (y por lo tanto de
consumo de oxígeno (VO2))
utilizando, a la vez que un pulsómetro para el registro de la frecuencia
cardíaca, acelerómetros y podómetros para el registro del movimiento corporal (Moon, J.y Butte, N., 1996;
Eston, R. Y cols., 1998; Luke, A. y cols., 1997; Haskell, W. Y cols., 1993). Otros autores, por su parte, se centran
en la mejora de la ecuación de predicción (Moon, J.y Butte, N., 1996; Kalkwarf,
H.J. y cols., 1989; Li, R. y cols., 1993;).
Su principal limitación ocurre cuando la
linealidad existente entre
También se produce un error a niveles
elevados de gasto de energía ya que toda la producción de energía no depende
únicamente de la vía aeróbica sino que también participa la vía anaeróbica
(Scott, C.B., 1997)
Otra crítica importante son los
numerosos factores que influyen en la frecuencia cardíaca, como pueden ser:
factores emocionales, estrés, excitantes, fármacos, tipo de ejercicio...(Luke,
A. Y cols., 1997; Van Den Berg-Emons, R.J.G. y cols., 1996)
Uno de los estudiosos del tema que nos
ocupa, Ceesay, S.M. (1989), encuentra que este mismo método subestimó el VO2
(equivalente de energía gastada) en solo un 1,2 % (con un rango entre
–11.4 y +10.6%) lo que nos da idea de su exactitud.
Es importante destacar que la
mayoría de las investigaciones relacionadas con nuestro objeto de estudio no se
centran en el ámbito de la actividad física y el deporte, sino que su principal
ámbito de estudio es más bien clínico o médico (Racette, S., 1995; Christensen,
C., 1983; Van Berg-Emons, R.J.G., 1996).
A la vista de
los estudios comentados nos hemos planteado analizar la exactitud del MFC para
la estimación de la energía gastada (VO2)
a diferentes intensidades de actividad física, para así poder tomar decisiones
posteriores que hagan mejorar la estimación.
Para la realización de este estudio participaron 9 voluntarios (169,78±
Para determinar la relación individual entre VO2
y FC se realizó una primera prueba de esfuerzo triangular discontinua máxima en
cicloergómetro Ergoline 900. Registrando en todo momento
Primero se procedía a pesar y medir al sujeto, utilizando una bascula
Tefal 200 y una cinta métrica Holtain, siempre descalzo y con pantalón corto y
camiseta deportiva. Después se realizaba un calentamiento de 5 minutos sobre
cicloergómetro a una potencia de 75 vatios para los hombres y 50 vatios para
las mujeres, precedido de estiramientos de la musculatura del tren inferior en
un tiempo determinado por el propio sujeto.
A continuación daba
comienzo la prueba en sí tras la colocación del aparataje (pulsómetro y
boquilla). Primeramente se registraba un minuto en reposo y seguido empezaba el
sujeto a pedalear a una potencia 25 de vatios, incrementando dicha potencia en
25 vatios cada minuto hasta la extenuación del sujeto.
Al tercer día después de la primera prueba se realizó una segunda. Antes
de dar comienzo la prueba se realizaba el mismo protocolo que en la prueba
anterior. Cada escalón tenía una duración de 3 minutos. Las intensidades de
cada uno eran del 40%, 50%, 60%, 70%, 80%, 90% del VO2
max. El sujeto debía de completar el máximo número posible de escalones.
El tratamiento gráfico se
llevó a cabo en el programa informático Origin V.6.0 y el estadístico en el
Programa Spss V.10.
Se presentan los
resultados como media Media ± desviación estándar (D.E.)
Primero se realizó la
prueba de Normalidad de Kolmogorov-Smirnov.
Para calcular las diferencias
de medias se utilizó el test de la “U de Mann-Whitney”, necesitando una
p<0,05 para asumir diferencias significativas.
Las características de los
sujetos se muestran en la tabla 1. Entre paréntesis se especifica el sexo (1:
mujer; 2: hombre).
|
DESCRIPCIÓN DE
LOS SUJETOS
|
|||||||
SUJETOS
|
EDAD (años) |
TALLA* (Cm) |
PESO* (Kg) |
I.M.C |
VO2 max * (ml O2/min) |
FC max (puls/min) |
|
|
V.S.(1) |
20 |
164 |
57,8 |
21,49 |
3654 |
183 |
|
|
I.E.(1) |
23 |
160 |
62,2 |
24,30 |
2812 |
192 |
|
|
C.P(1) |
22 |
164 |
56,7 |
21,08 |
2537 |
204 |
|
|
M.M.(1) |
22 |
165 |
56,6 |
20,79 |
2782 |
197 |
|
|
Media
±D.E.
|
21,75
±1,25
|
162,67
±2,21
|
58,94
±2,63
|
22,29
±1,61
|
2946.24
±487.6
|
194
±8.83
|
|
|
J.M(2) |
24 |
180 |
75,5 |
23,30 |
4516 |
200 |
|
|
S.S.(2) |
22 |
171 |
68,0 |
23,26 |
3882 |
198 |
|
|
L.A.(2) |
24 |
172 |
80,4 |
27,18 |
4589 |
197 |
|
|
E.A.(2) |
27 |
170 |
67,4 |
23,32 |
4081 |
189 |
|
|
A.A.(2) |
27 |
182 |
74,0 |
22,34 |
4770 |
193 |
|
|
Media
±D.E.
|
24,31
±2,16
|
173,33
±5,56
|
72,87
±5.43
|
24,31
±1.89
|
4367.65
±371.1
|
195.44
±4.39
|
|
|
Tabla 1: Edad, talla, peso, índice de masa corporal (I.M.C.), VO2
max y FC max de cada uno de los sujetos y su correspondiente media para cada
sexo expresada como: media ± D.E.
*
Diferencias estadísticamente significativas (p<0.05) entre hombres y
mujeres.
Existen diferencias significativas entre
sexos en la talla, peso y VO2
max (p<0,05). En la edad y en el I.M.C. no hubo diferencias significativas.
En la tabla 2 aparecen las rectas de
regresión lineal FC-VO2,
para cada uno de los sujetos, junto con el coeficiente de correlación lineal R2
y el valor de la pendiente de la recta (coeficiente de la x). Estas rectas
fueron calculadas apareando los datos del VO2
y
VO2
estimado = aX + b
a = pendiente de la regresión lineal.
b = constante de la regresión lineal.
X = FC de la actividad sobre la que se estima el VO2.
SUJETOS
|
RECTAS
DE REGRESIÓN |
R2 |
PENDIENTE* |
V.S.(1) |
Y = 35.68X-3010.61 |
0.97 |
35.68 |
I.E.(1) |
Y = 26.19X-2379.94 |
0.96 |
26.20 |
C.P(1) |
Y = 17.46X-1218.62 |
0.95 |
17.46 |
M.M.(1) |
Y = 21.61X-1218.67 |
0.94 |
21.61 |
|
|
0.96±0.014 |
25.23±7.82 |
J.M(2) |
Y = 34.28X-2561.93 |
0.97 |
34.28 |
S.S.(2) |
Y = 49.44x-5747.44 |
0.98 |
49.44 |
L.A.(2) |
Y = 55.70X-6179.85 |
0.90 |
55.70 |
E.A.(2) |
Y = 39.22X-3395.39 |
0.94 |
39.22 |
A.A.(2) |
Y = 37.96X-2864.46 |
0.96 |
37.96 |
|
|
0.95±0.031 |
43.31±8.91 |
Tabla 2: Rectas de regresión
lineal VO2
-FC, coeficiente de correlación (R2), y pendiente de la recta para
cada sujeto y su correspondiente media para cada sexo expresada como media ± D.E.
Y = VO2
estimado (ml O2 /min) X = FC
(Puls /min)
* Diferencias estadísticamente
significativas (p<0.05) entre hombres y mujeres.
En la figura 1 se representa una de
dichas rectas a modo de ejemplo.
Figura 2: Rectas de regresión individuales VO2 -FC de los 9 sujetos.
Existen diferencias estadísticamente
significativas (p<0.05) en las pendientes de las rectas entre hombres y
mujeres
La figura 2 muestra todas las rectas de
regresión individual VO2
-FC de los 9 sujetos.
La tabla 3 muestra los valores de VO2
medidos en la segunda prueba en cada uno de los estadíos que completó el
sujeto. El valor de cada estadío corresponde a la media de los últimos dos
minutos de cada escalón, considerando así que este valor se estabiliza después
del primer minuto de adaptación a la carga.
VO2 observado en
la segunda prueba (ml O2/min) |
||||||
SUJETOS
|
40%*
|
50%*
|
60%*
|
70%*
|
80%*
|
90%
|
V.S.(1) |
1441 |
1746 |
1956 |
2404 |
2702 |
- |
I.E.(1) |
1172 |
1481 |
1716 |
2017 |
2451 |
2635 |
C.P(1) |
1107 |
1379 |
1701 |
2033 |
2336 |
2657 |
M.M.(1) |
1279 |
1535 |
1835 |
2135 |
2442 |
2670 |
Media
±D.E.
|
1250,3
±145.89
|
1535,8
±154.67
|
1802,7
±118.88
|
2147,9
±178.96
|
2483,0
±155.21
|
2653,9
±17.24
|
J.M(2) |
1972 |
2304 |
2842 |
3321 |
3872 |
4221 |
S.S.(2) |
1691 |
2454 |
3218 |
3785 |
3852 |
- |
L.A.(2) |
1694 |
2305 |
2563 |
3198 |
3775 |
- |
E.A.(2) |
1562 |
2231 |
2648 |
2866 |
3365 |
3435 |
A.A.(2) |
1838 |
2450 |
2926 |
3362 |
3742 |
- |
Media
±D.E.
|
1751,7
±157.30
|
2349,2
±98.88
|
2839,9
±256.84
|
3307,1
±330.93
|
3721,7
±206.18
|
3827,7
±555.78
|
Tabla 3: VO2
(ml O2/min) en cada uno de los diferentes estadíos de la segunda
prueba para cada uno de los sujetos y su correspondiente media para cada sexo
expresada como: media ± D.E.
* Diferencias estadísticamente
significativas (p<0.05) entre hombres y mujeres
Existen diferencias estadísticamente
significativas (p<0.05) entre hombres y mujeres en el 40%, 50%, 60%, 70% y
80% del VO2
max.
En la tabla 4 se presentan los valores
de VO2
(ml O2/min) estimados según las rectas de regresión (Tabla 2) y a
partir de
VO2 estimado para la segunda
prueba (ml O2/min) |
|
|||||||||||||
SUJETOS
|
40 % |
50 % |
60 % |
70 % |
80 % |
90 % |
|
|||||||
|
V.S.(1) |
1947 |
2485 |
2915 |
3310 |
3661 |
|
|||||||
|
I.E.(1) |
753 |
1128 |
1608 |
2058 |
2447 |
2558 |
|||||||
|
C.P(1) |
1143 |
1434 |
1714 |
1997 |
2181 |
2299 |
|||||||
|
M.M.(1) |
1680 |
2169 |
2492 |
2817 |
3043 |
3209 |
|||||||
|
Media
±D.E.
|
1380,9
±535.8
|
1804,7
±630.1
|
2182,6
±627.5
|
2545,9
±631.7
|
2833,3
±659.4
|
2689,3
±468.8
|
|||||||
|
J.M(2) |
1549 |
1866,97 |
2491 |
2876 |
3210 |
3546 |
|||||||
|
S.S.(2) |
1246, |
2004 |
2939 |
3438 |
3728 |
|
|||||||
|
L.A.(2) |
978 |
1713 |
2370 |
3287 |
4053 |
|
|||||||
|
E.A.(2) |
1227 |
1948 |
2566 |
2989 |
3528 |
4023 |
|||||||
A.A.(2) |
1630 |
2427 |
3153 |
3659 |
4050 |
|
|
|||||||
Media
±D.E.
|
1326,5
±264.4
|
1992,2
±266.7
|
2704,2
±328.9
|
3250,2
±320.8
|
3714,5
±359.2
|
3785,2
±337.5
|
|
|||||||
Tabla 4: VO2
estimado (ml O2/min) y calculado en función de FC registrada y según
la recta de regresión lineal para cada uno de los sujetos y su correspondiente
media para cada sexo expresada como: media ± D.E.
No existen diferencias estadísticamente
significativas entre hombres y mujeres en ninguno de las intensidades de
trabajo para el VO2
estimado.
Entre el VO2
observado y el VO2
estimado, según las rectas de regresión individual, no existen diferencias
estadísticamente significativas en cada uno de los sexos
Las figuras 3
y 4 nos aportan información gráfica de las diferencias entre el VO2
observado y el estimado en cada uno de los escalones de la segunda prueba, para
cada uno de los sexos.
Figura 3: VO2
medido y estimado en mujeres a
diferentes intensidades de trabajo.
Figura 4: VO2
medido y estimado en hombres a
diferentes intensidades de trabajo.
A partir de los datos anteriores se ha
calculado el porcentaje de error de la estimación en cada uno de los
porcentajes de trabajo. Estos quedan expresados en la tabla 5 y 6.
Intensidad de esfuerzo
|
% de error |
40% |
-9,88% |
50% |
-1,42% |
60% |
6,14% |
70% |
7,01% |
80% |
5,94% |
90% |
1,01% |
Media |
1,47% |
Tabla
5: % de error en la estimación del VO2
en cada intensidad de esfuerzo.
% error en la estimación de VO2 |
|
||||||||
|
|
40% |
50% |
60% |
70% |
80% |
90% |
MEDIA |
|
|
MUJERES |
8,50 |
15,99 |
19,85 |
17,49 |
13,34 |
1,29 |
12,74 |
|
|
HOMBRES |
-24,53 |
-15,31 |
-4,76 |
-1,32 |
0,04 |
0,59 |
-7,55 |
|
Tabla
6: igual a la tabla 5 pero diferenciando por sexo
El método de la estimación del VO2
a partir de la monitorización de
Al ser un método de estimación es
importante determinar la exactitud de éste, pues es imprescindible que los
datos que se obtienen de este método sean lo más ajustado posible a la
realidad.
La pendiente de la recta de regresión VO2-FC
en los hombres es significativamente mayor que la de las mujeres (p<0,05) ya
que a igual incremento de FC le corresponde un mayor incremento de VO2
para los hombres. Puesto que los hombres consiguieron alcanzar valores más
altos de VO2,
con diferencias estadísticamente significativas (p<0.05), que las mujeres,
mientras que los valores de FC max no presentan diferencias estadísticas
significativas
Respecto a
nuestro estudio podemos decir que la recta de regresión se adapta casi
perfectamente a todos los puntos pues los coeficientes de regresión (R2)
oscilan entre 0.90 y 0.98. Sin embargo no hay que descartar la posibilidad de
buscar otras rectas que se ajusten mejor a los parámetros registrados. Además
de mejorarla con la posible utilización de acelerómetros y podómetros.
En cuanto a la
exactitud de este método, podemos decir que teniendo en consideración los
totales de los porcentajes de error en cada uno de las intensidades de trabajo
(Tabla 5) su exactitud es bastante elevada pues el error máximo es de –9.88%
cuando el esfuerzo requiere el 40% del VO2.
Como ya se ha notado anteriormente este mayor porcentaje de error corresponde
con el más bajo nivel de actividad. Varios autores confirman estos mismos
resultados (Moon, J.K. y Butte, N., 1996; Christensen, C.C. y cols., 1983). La
razón de esta disminución en la exactitud del método para intensidades bajas de
trabajo es debido a la influencia de varios factores: emocionales, estrés… Una
de las soluciones, tal como propone Kalkwarf, H.J. (1989), para mejorar esta
predicción es considerar dos rectas de regresión, una recta para las
frecuencias cardíacas bajas y otra recta para las frecuencias cardíacas altas.
Nuestro
estudio sobrestimó en total el VO2
en un 1.47% (con un rango entre -9.88% y 7.01%).
A la vista de
estos datos podemos decir que la predicción resulta bastante fiable. Sin
embargo al tratar por separado hombres y mujeres este porcentaje de error
cambia notablemente (Tabla 6); de tal manera que este método, en nuestro
estudio, sobrestimó el VO2
en las mujeres con un porcentaje medio de error de +12.74%. Mientras que en los
hombres se subestima dicho valor con un porcentaje medio de error de -7.55%.
La justificación podríamos encontrarla
al analizar los datos de FC en cada estadío. Esta es siempre mayor para las
mujeres aunque las diferencias no sean estadísticamente significativas. Las
razones pueden ser achacadas a que las mujeres generalmente poseen un menor
volumen sistólico que los hombres por lo que sus aumentos en el VO2
se hacen más a expensas de un aumento de
Por último anotar que la estimación de
la energía gastada será tan exacta como lo sea la estimación del consumo de
oxígeno puesto que en el total de la energía gastada a lo largo de un día
proviene principalmente de la vía aeróbica.
1.
Es
necesario que este método se base en una recta de regresión individual, pues
esta es diferente para cada individuo, pero existe una mayor semejanza entre
individuos de mismo sexo, teniendo una mayor pendiente los hombres que las
mujeres.
2.
Otra
vez más se confirma que este método conlleva un porcentaje de error mayor
cuando se aplica a actividades físicas de baja intensidad.
3.
El
método de estimación de la energía gastada a partir de
1.
MOON, J. K.;
2.
CEESAY, S.; PRENTICE, A.; DAY, K.; MURGATROYD, P.;
GOLDBERG, G.; SCOTT, W. “The use of heart rate monitoring in the estimation of
energy expenditure: a validation study using indirect whole-body calorimetry”
Br. J. Nutr., 1989; 61: 175-186.
3.
ESTON, R.; ROWLANDS, A.; INGLEDEW, D. “Validity of
heart rate, pedometry, and accelerometry for prediccting the energy cost of
children’s activities” J. Appl. Physiol., 1998; 84(1): 362-371.
4.
RACETTE, S. B.; SCHOELLER, D. A.; KUSHNER, R. F.
“Comparison of heart rate and physical activity recall with doubly labeled
water in obese women”. Med. Sci. Sports Exerc., 1995; 27(1): 126-133.
5.
KALKWARF, H. J. y cols. “Accuracy of heart-rate
monitoring and activity diaries for estimating energy expenditure” Am. J. Clin.
Nutr., 1989; 49: 37-43.
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LUKE, A.; MAKI, K., BARKEY, N.; COOPER, R.; McGEE, D.
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Rev.int.med.cienc.act.fís.deporte – vol.3 - número 9 - marzo 2003 - ISSN: 1577-0354