Marins,
J.C.; Pereira, L.; Amorim, P.R.; Arnaiz-Lastras, J.; Sillero-Quintana, M. y
Alfenas, C.R. (2018) Suplementos de carbohidratos durante un ejercicio: Efectos sobre los electrólitos y
glucosa / Supplements of Carbohydrates Long During Exercise: Effects on the
Electrolytes and Glucose. Revista Internacional de Medicina y Ciencias de la
Actividad Física y el Deporte vol. 18 (70) pp.
269-287 Http://cdeporte.rediris.es/revista/revista70/artsuplementos890.htm
DOI: http://dx.doi.org/10.15366/rimcafd2018.70.005
ORIGINAL
SUPLEMENTOS DE CARBOHIDRATOS
DURANTE UN EJERCICIO: EFECTOS SOBRE LOS
ELECTRÓLITOS Y GLUCOSA
SUPPLEMENTS
OF CARBOHYDRATES LONG DURING EXERCISE: EFFECTS ON THE ELECTROLYTES AND GLUCOSE
Marins, J.C.1; Pereira, L.2;
Amorim, P.R.3; Arnaiz-Lastras, J.4; Sillero-Quintana, M.5
y Alfenas, C.R.6
1 Human Performance
Laboratory - LAPEH, Universidade Federal de Viçosa (Brasil) Prof. Titular; Universidad
Federal de Viçosa, Dep. Educación Física, MG (Brasil) jcbouzas@ufv.br
2 Faculty of Physical
Activity and Sport Sciences - INEF, Universidad Politécnica de Madrid (España)
Nutricionista; Universidad Federal Fluminense, RJ (Brasil) leticialeticia10@yahoo.com.br
3 Prof. Asociado; Universidad Federal de
Viçosa, Dep. Educación Física, MG
(Brasil) pramorim@ufv.br
4 Licenciado en Educación Física,
Universidad Politécnica de Madrid, INEF (España) javi.arnaiz.inef@gmail.com
5 Prof. Titular, Universidad
Politécnica de Madrid, INEF (España) manuel.sillero@upm.es
6 Asociado;
Universidad Federal de Viçosa, Dep. Nutrición, MG (Brasil) ralfenas@ufv.br
FINANCIACIÓN: El trabajo ha sido
financiado por Fundação de Amparo à Pesquisa em Minas Gerais (FAPEMIG).
Código
UNESCO / UNESCO Code: 2411.06 Fisiología Humana (del Ejercicio) / Human Physiology
Clasificación
del Consejo de Europa / Council of Europe Classification: 6.
Fisiología del ejercicio
Recibido 12 de
diciembre de 2015 Received December 12, 2015
Aceptado 10 de
julio de 2016 Accepted July 10, 2016
RESUMEN
Objetivo:
Identificar si la forma de presentación de los suplementos de carbohidratos
(SC) influye en la respuesta de la concentración plasmática de electrólitos y
glucosa durante un ejercicio de larga duración. Doce hombres realizaron cuatro
pruebas de 90 min en cicloergometro (55-60%VO2máx), seguidas por
PALABRAS
CLAVE: Nutrición
deportiva, Hidratación, Electrolitos plasmáticos.
ABSTRACT
Objective: To identify if the format
of carbohydrate supplements (CS) influence the response of the plasmatic
concentration of electrolytes and glucose during long duration exercise. Twelve
men performed four tests of 90 min on a cycle ergometer (55-60% VO2max),
followed by 6 km at maximum speed, consuming CS in different forms (liquid, gel
or solid) and one day just consuming water. It was analyzed the
concentrations of sodium, potassium and blood glucose before exercise, every 30
minutes of test, and after 6 km. There was no significant difference in the
response of electrolytes during the study. However, the glucose showed
significant differences (p <0.05) when it was consumed CS regardless of
their form, whenever just water was consumed. In this way is possible to
conclude, that the format of the SC does not affect the blood glucose
concentration during long duration exercise.
KEY WORDS: Sports Nutrition, Hydration, Electrolytes plasmatic.
INTRODUCCIÓN
Durante la
práctica de ejercicio físico se produce un aumento de la temperatura
interna (Marins, 2011).Dependiendo de la intensidad del trabajo, de las
condiciones ambientales y del tipo de ropa utilizada, se puede aumentar la
carga térmica y producirse un importante aumento en la temperatura corporal
(Cheuvront et al., 2010). Como mecanismo de control de esa temperatura
corporal, se produce un aumento en el flujo sanguíneo hacia la piel y,
consecuentemente, un incremento en la producción del sudor. La evaporación del
sudor es la vía primaria de pérdida de calor que revierte en una continua
pérdida de líquidos corporales y electrólitos, principalmente sodio y potasio (Cheuvront
et al., 2010; Sawka et al., 2007).
En el caso
que los líquidos y electrólitos perdidos no sean repuestos
adecuadamente, se puede generar un importante desequilibrio hidroelectrolítico,
resultando así en perjuicios a la salud y que comprometen el rendimiento físico
y pueden causar problemas de salud (Hernández et al., 2009; Casa et al., 2005; Marins et
al., 2001; Casa et al., 2000).
La
deshidratación además de reducir el rendimiento durante los ejercicios
aeróbicos, principalmente los de larga duración(Cheuvront
et al., 2010; Kenefick et al., 2010; Casa et al., 2010; Sawka et al., 2007) puede alterar el balance osmótico intra y
extracelular, aumentar el esfuerzo cardiovascular debido al incremento
desproporcionado de la frecuencia cardiaca con una concomitante reducción del
gasto cardíaco (Marins et
al., 2000; Montain y Coyle, 1992) así como disminuir la capacidad del organismo
de disipar calor (Fortney
et al., 1984).
Un grado
de deshidratación superior al 4% se relaciona con un empeoramiento en
actividades de perfil anaeróbico (Kraft et al., 2012). Por lo que, una
reposición de líquidos y electrolitos durante un ejercicio, previene la
deshidratación y el desequilibrio electrolítico.
Además de
los electrolitos, los carbohidratos son frecuentemente incluidos en bebidas
deportivas para proporcionar energía exógena, ayudara la absorción y retención
de líquidos, y para mejorar el sabor y aumentar así su consumo durante un ejercicio
(Osterberg
et al., 2009).
La mayor
absorción de líquidos generada por la presencia de carbohidratos en las bebidas
deportivas se debe al mecanismo de co-transporte de agua en el intestino delgado
por medio del transportador de glucosa sodio-dependiente (SGLT1), que tiene un
papel importante en la absorción de agua (Marins,
2011). Por cada
molécula de glucosa absorbida vía SGLT1, se absorben también 260 moléculas de
agua, independiente del gradiente osmótico (Loo et
al, 1996). Por
medio de ese mecanismo, un aumento en la absorción de glucosa tendría un
beneficio adicional en el aumento de la absorción de agua. Además, la presencia
de carbohidratos también puede generar mayor retención de líquidos debido a la
respuesta de la insulina producida por la hiperglucemia que puede llevar a un
aumento en la reabsorción del sodio y líquidos en los túbulos renales(Sechi y
Bartoli, 1996).
A parte de
las bebidas deportivas, existen otros tipos de presentación de suplementos de
carbohidratos (SC) que son fuentes de electrolitos y carbohidratos, como geles
de carbohidratos y barritas energéticas, los cuales proporcionan a los
deportistas otras alternativas para ingerir dichos nutrientes durante el
ejercicio. Cuando esos SC son tomados con agua, en teoría se garantiza además
de un aporte energético, una hidratación gracias a la reposición parcial de
electrolitos. Sin embargo, la forma de presentación del SC generará diferentes
velocidades de vaciado gástrico(Bergmann
et al., 1992; Vincent et al., 1995).
El tiempo
de vaciado gástrico del agua es relativamente rápido no existiendo grandes
alteraciones hasta unos 60 g/CHO por litro (Silva et
al, 2009).Por otro lado, es posible que al consumirse
CHO a base de geles o barritas energéticas de forma simultánea con agua, no
lleguen a mezclarse totalmente en el estómago, ya que se ha observado que éste
hace de filtro reteniendo partículas más densas y mayores en el antro (Schulze,
2006),
perjudicando así la velocidad de vaciado gástrico y, consecuentemente, la
absorción tanto de CHO como de electrolitos en el intestino, afectando así su
respuesta plasmática durante el ejercicio.
La mayor
parte de los estudios sobre reposición hídrico-electrolítica y energética se
centran únicamente en bebidas deportivas (Yanagisawa et al., 2012; McRae y Galloway, 2012; Phillips et al., 2010; Anastasiou
et al., 2009; Osterberg et al., 2009; Carvalho et al., 2007; Rogers et al., 2005; Gisolfi et al., 2001;
Vrijens y Rehrer, 1999; Ryan et al., 1998) no siendo frecuentes los
estudios que contrasten diferentes formas físicas de aporte de energía además
de electrólitos.
Sin
embargo, hay estudios que contrastaron el efecto los SC en forma sólida frente
a líquida (Pfeiffer
et al., 2010b; Rauch et al., 1999; Robergs et al., 1998; Lugo et al., 1993;
Mason et al., 1993) o en la forma de gel frente a la líquida (Pfeiffer
et al., 2010a; Patterson y Gray, 2007). El trabajo de Phillips et al. (2012) estudia
únicamente el efecto del consumo de gel, sin contrastar con otras formas
físicas de aporte energético y electrolitos.
Así pues, es
interesante comparar el efecto de una bebida deportiva frente a otras formas de
presentación de SC como son el gel y la barra, ingeridos de forma simultánea
con agua, para observar la influencia sobre la respuesta de los electrolitos
plasmáticos y la glucemia. Esto podrá proporcionar una información importante
sobre qué tipo de SC que debe consumir el deportista para rendir mejor durante
los ejercicios de larga duración.
Por lo
tanto, el objetivo de este trabajo ha sido identificar si el consumo de las diferentes
formas de presentación de los SC (gel, sólido o líquido) influye en la
respuesta de la concentración plasmática de sodio, potasio y glucosa a lo largo
de un ejercicio de larga duración.
MATERIAL Y
MÉTODOS
Muestra
Doce
hombres practicantes habituales de ciclismo o carrera (edad = 22 ± 3 años, peso
= 71,5 ±
Pruebas
Preliminares
Tras cumplir los criterios de inclusión, los voluntarios
fueron sometidos a una toma de datos antropométricos. Para medir el peso
corporal se utilizó una báscula digital con precisión de
Seguidamente,
los evaluados realizaron un test en cicloergómetro electromagnético (SCIFIT
modelo ISO1000, Oklahoma, Estados Unidos), con carga incremental para
determinar el consumo máximo de oxígeno (VO2max). La prueba se
dividió en dos partes: un calentamiento de 3 min con carga de 50 W y una parte
principal en la que se estableció para cada sujeto una carga inicial en vatios
que los individuos consideraron como “un poco pesado” según la Escala Subjetiva
de Esfuerzo (ESE) (Borg,
1982). A partir
de ese punto la carga era incrementada en 30 W cada minuto hasta el máximo,
según los criterios propuestos por Howley et al. (1995).
Se
midieron los cambios respiratorios durante toda la prueba a través de un
analizador de gases metabólicos (MedGraphics VO2000, Minnesota,
Estados Unidos), la frecuencia cardíaca (FC) mediante un monitor cardíaco (M31,
Polar, Kempele, Finland), en cuanto que la ESE era obtenida a cada 2 minutos.
Al final de la prueba se obtuvo una muestra de lactato capilar evaluada por un
analizador portátil (Accutrend, Roche®,Mannheim, Germany). Con los resultados
de la prueba máxima se determinó la carga correspondiente a la franja entre el
55 y 60% de la VO2max para ser utilizada como carga inicial en las
pruebas experimentales.
Diseño
Experimental
Cada
evaluado participó en cuatro pruebas experimentales realizadas en
cicloergómetro a lo largo de 90 min a una intensidad del
Inmediatamente
finalizados los 90 minutos de ejercicio, los evaluados pedaleaban durante
Composición
de los SC
Los SC
utilizados fueron producidos y comercializados en Brasil, sin haber manipulación en sus propiedades
nutricionales. Los SC tenían una composición nutricional diferente (Tabla 1) en
cuanto a electrolitos y proteínas en el gel, así como grasa, proteína y fibra
en la barra energética.
Se ingirió
agua durante las pruebas tanto en las que se consumió carbohidratos en forma de
gel como en barra energética. El consumo de líquidos durante cada una de las
situaciones experimentales fue de 3 mL.kg-1 del peso corporal,
inmediatamente antes del inicio del ejercicio, así como a cada 20 minutos a lo
largo del ejercicio, como después de los 6 km finales.
TABLA 1: Composición nutricional
de los SC adoptados en el estudio.
|
Bebida ( |
Gel ( VO2+Energy Gel® (Integral Médica) |
Barra Energética ( Plátano, avena y miel Trio® (Trio) |
Energía (kcal) |
76 |
80 |
88 |
Carbohidratos (g) |
19 |
19 |
19 |
Proteínas (g) |
0 |
1 |
1,2 |
Grasas (g) |
0 |
0 |
0,8 |
Fibra (g) |
0 |
0 |
0,6 |
Sodio (mg) |
143 |
58 |
65 |
Potasio (mg) |
38 |
13 |
0 |
Cloro (mg) |
133 |
3 |
0 |
Orientaciones
antes de las pruebas experimentales
Se les pidió a los
voluntarios que se abstuvieran de consumir alcohol y realizar ejercicios
agotadores el día anterior de cada prueba, además de mantener el mismo tipo de
dieta y programa de entrenamiento a lo largo de todo el estudio. La dieta de
los participantes fue registrada por medio de un recordatorio 24 horas(Cintra et
al., 1997),
realizado antes de cada prueba, para comprobar que la cantidad calórica y
nutrientes consumidos en el día anterior a los cuatro experimentos fueran
semejantes. Dichos análisis fueron realizados por un nutricionista experto.
Protocolo
de ensayos experimentales
Las
pruebas fueron realizadas durante el horario de mañana (entre las 6 y 9 horas).
El horario de la primera prueba elegida por el evaluado, determinaba todas las
demás, debiendo los sujetos llegar siempre tras un periodo de ayunas de entre
10 y 12 horas. Así pues, los evaluados llegaban al laboratorio y desayunaban
Una hora
después del desayuno, cada evaluado ofrecía una muestra de orina, para evaluar
su estado de hidratación antes del ejercicio por medio de métodos como la
gravedad específica de la orina o la densidad de orina. En caso de observarse
un cuadro de deshidratación no se continuaba con la prueba. Tras el análisis de
orina, los evaluados se pesaban sin ninguna ropa, utilizando una báscula
digital con precisión de
A
continuación, un enfermero introducía un catéter Yelco intravenoso no
22 en una vena del antebrazo y fijaba un aparato tipo tornillo de 3 vías que se
limpiaba con una solución fisiológica al 0,9% tras cada toma de sangre, para
evitar una coagulación en la sangre y mantener el acceso venoso, permitiendo
realizar las tomas de sangre durante el ejercicio. Antes de cada toma de
sangre, la solución salina era eliminada con una jeringuilla desechable,
aproximadamente 1 ml de sangre era retirada y descartada antes de ser obtenida
la muestra para el análisis.
Tras la
primera toma de sangre, los evaluados iniciaban los 90 minutos de ejercicio en
cicloergometro a una intensidad entre el 55 y 60% del VO2max. Las
muestras de sangre fueron realizadas al inicio del ejercicio, y cada 30 minutos
durante la prueba, además de los
En cada
una de las pruebas los evaluados ingerían una de las tres formas de SC con agua
(bebida deportiva en polvo diluida en agua, gel + agua o barra + agua) o
únicamente agua, al inicio del ejercicio, cada 20 minutos durante el ejercicio
y al final de los
Todas las
pruebas experimentales fueron realizadas en condiciones ambientales de
temperatura y humedad relativa del aire (HR) semejantes siendo de 22,6 ± 0,8oC
y 72,3 ± 5,5% HR (agua); 22,5 ± 1,1oC y 73,3 ± 5,4% HR (bebida
deportiva); 22,2 ± 1,2oC y 73,0 ± 5,3% HR (gel); 22,3 ± 0,8oC
y 72,9 ± 6,3%HR (barra energética).
Análisis
sanguíneos
Las
muestras de sangre, de 1 ml, eran obtenidas en jeringuillas y transferidas
inmediatamente a cubetas Eppendorfs,
donde eran retirados 100 µL de sangre por medio de una pipeta automática
(Labtec, São Paulo, Brasil). En seguida, esa muestra de sangre total era
inyectada en un cartucho desechable de uso único y analizada por amperimetría
mediante un aparato portátil de análisis sanguíneo (i-STAT, Abbott®, Illinois,
Estados Unidos) para determinar la glucosa, el sodio y el potasio. El sodio y
el potasio fueron medidos por potenciometría de electrodos iones-selectivos,
siendo sus concentraciones calculadas por medio de un potencial determinado con
la ecuación de Nernst.
Teniendo
en cuenta la integridad de los evaluados, solamente era permitida la
realización de las pruebas experimentales en el caso de que los parámetros
sanguíneos estuviesen en las franjas de normalidad propuestas por Soares et al.
(2002), siendo de
Análisis
Estadísticos
Inicialmente
se probó la normalidad de datos por el test Kolmogorov-Smirnov.
Los datos presentaron una distribución normal permitiendo así un análisis
descriptivo. Para comparar entre los diferentes tratamientos experimentales y
las distintas fases del entrenamiento se emplearon test One-Way ANOVA de
medidas repetidas asociados al post-hoc de Tukey HSD. Se consideró los
valor de α <0,05 para establecer el nivel de significación estadística.
Los análisis estadísticos fueron realizados por medio del software SPSS® 15 for
Windows (Chicago, Illinois, Estados Unidos).
RESULTADOS
Las
concentraciones de sodio y potasio en reposo, durante el ejercicio al 55-60%
del VO2max y tras los
No fueron
observadas diferencias en las concentraciones de sodio entre los diferentes
tipos de SC. Ninguno de los evaluados presentó hiponatremia (concentración de
sodio por debajo de 137 mmol.L-1) o hipernatremia (concentración de sodio
por encima de 145 mmol.L-1) durante todas las muestras sanguíneas
del estudio.
No hubo
diferencias significativas entre los valores plasmáticos de potasio en reposo
durante los cuatro momentos experimentales. Sin embargo, las concentraciones de
potasio fueron significativamente mayores (p<0,05) durante los 90 minutos de
ejercicio entre el 55-60% del VO2max y tras los
No fueron
observadas diferencias significativas en la respuesta del potasio plasmático
entre los diferentes tipos de suplementación. Ningún evaluado presentó
hipocalemia (concentración de potasio abajo de 3,5 mmol.L-1) en
todas las tomas de sangre realizadas. Sin embargo, cuadros de hipercalemia
(concentración de potasio por encima de 5,5 mmol.L-1) se vieron
durante las pruebas. Durante el consumo de la bebida deportiva un sujeto
presentó hipercalemia a lo largo de los 90 minutos y después de los
Las
concentraciones plasmáticas de glucosa en reposo fueron semejantes entre todos
los tratamientos experimentales (Figura 3). Por otra parte, a lo largo del
ejercicio, las concentraciones plasmáticas de glucosa con el tratamiento con
agua se mantuvieron estables por encima de los valores de reposo, exceptuando a
los 90 minutos de ejercicio.
Las
concentraciones plasmáticas de glucosa fueron significativamente mayores
(p<0,001) para todas las presentaciones de SC comparándolos frente al
consumo de agua en todos los momentos de ejercicio y tras los
En
todos los tratamientos, se observó que las concentraciones de glucosa fueron
significantemente mayores (p<0,05) tras los
Durante
el consumo de bebida deportiva solamente dos evaluados presentaron una concentración
de glucosa superior a 120 mg.dL-1 después de los
DISCUSIÓN
Las concentraciones
plasmáticas de sodio (Figura 1) se mantuvieron dentro de los rangos de
normalidad (137–142 mmol/l) (Soares et
al., 2002), a lo
largo del ejercicio y tras los
Resultados
semejantes fueron encontrados por Campbell et al. (2008), que compararon
bebida, gel, caramelo y agua durante un ejercicio al 75% del VO2max al
no observar cambios en las concentraciones plasmáticas de sodio durante el
ejercicio en relación al reposo y entre los diferentes tratamientos. Marins et
al. (2003) registraron que en dos tipos de bebidas deportivas que contenían 22
mg y 4 mg de sodio por 100 ml además de carbohidratos, tampoco fueron capaces
de alterar la respuesta del sodio plasmático cuando fueron comparados los datos
con el consumo de agua mineral.
Los
resultados demuestran claramente que el contenido de sodio en los SC no
influencia las concentraciones plasmáticas de sodio y que el ejercicio
propuesto no generó pérdidas importantes por el sudor (1,67 ±
Los
resultados obtenidos ratifican que es muy difícil que suceda un cuadro de
hiponatremia durante la práctica de ejercicios con las características que
fueron realizadas en ese estudio. Los casos de hiponatremia están normalmente
relacionados con más de cuatro horas de actividad continua, con calor elevado,
gran producción de sudor (normalmente superior a los
El hecho
de no haber diferencias en la respuesta del sodio plasmático no significa que
no deba estar presente en esos productos, ya que su presencia en los SC
desempeña otras funciones, tales como: a) auxiliar el mecanismo de
co-transporte de absorción de glucosa a nivel intestinal; b) auxiliar en la
palatabilidad del alimento; c)estimular el mecanismo de sed; d) auxiliar a
retener los líquidos consumidos(Marins,
2011; Marins et al., 2001 y 2003;).
Las
respuestas obtenidas en las concentraciones plasmáticas de potasio (Figura 2),
indican que no existen diferencias estadísticas (p>0,05) entre los
diferentes tratamientos. Sin embargo, al contrario de lo sucedido con el sodio,
a lo largo del ejercicio y tras los
Durante el
ejercicio, el potasio es liberado desde el medio intracelular hacia el medio
extracelular del músculo esquelético y, posteriormente, hacia la corriente
sanguínea (Nielsen
et al., 2004), produciéndose así un aumento de concentración
de potasio frente a los niveles basales. El potasio plasmático, que se origina
en los músculos durante el ejercicio, aumenta al inicio pero tiende a
estabilizarse en ejercicios con intensidades por debajo del 100% del VO2max(Hallen,
1996). Este
comportamiento se observó en dicho estudio, teniendo en cuenta que no hubo
diferencias estadísticamente significativas entre los valores durante el
ejercicio. Por otro lado, durante la fase de los
Es
importante destacar que el comportamiento del potasio (Figura 2) es claramente
ascendente a lo largo del ejercicio, cuando se consideran como referencia los
valores de reposo. Teniendo en cuenta que la duración del ejercicio estuvo
limitada a 90 minutos los casos de hipercalemia fueron excepcionales. Sin
embargo, durante los entrenamientos de ciclismo o bicicleta de montaña, con
duraciones cercanas a los 180 minutos, es posible suponer en una mayor
aparición de casos de hipercalemia.
Los únicos
casos de alteraciones plasmáticas dentro del rango de normalidad observados en
este estudio, estuvieron relacionados con cuadros de hipercalemia, ya descritos
en el apartado de resultados, todos concentrados al final de los 90 minutos o
tras el sprint. Esa respuesta fue similar a la obtenida por Marins et al.
(2002) tras evaluar doce ciclistas durante 120 minutos al 65% VO2max, donde
observaron una elevada frecuencia de cuadros de hipercalemia, principalmente en
la fase final del ejercicio. Un estado de hipercalemia puede provocar modificaciones
en la conducción de los impulsos nerviosos en el músculo cardíaco (Armstrong
et al., 2007; Clausen, 1998). En los músculos esqueléticos dichas
alteraciones pueden favorecerla aparición de calambres musculares perjudicando
el rendimiento. Así pues, mantener las concentraciones de potasio en la franja
de normalidad es interesante para el rendimiento, ya que su aumento puede estar
relacionado con la fatiga muscular(Green et
al., 2011;Marins et al., 2001 y 2002;Paterson, 1996).
Tomando
como base las respuestas plasmáticas del potasio en este estudio, se puede
afirmar que el contenido de potasio presente en los SC consumidos no
representan un riesgo para la salud del deportista, ya que las cantidades que
lo componen son bajas. Por otro lado, cabe destacar que existen SC con
cantidades de potasio en su composición muy superiores a las utilizadas en este
estudio, que pueden suponer un aumento del riesgo para producir situaciones de
hipercalemia.
Es posible
establecer que las concentraciones de electrolitos presentes en los alimentos
consumidos en este estudio durante 90 minutos de ejercicio no tiendan a
producir una elevación de las concentraciones de electrolitos en el organismo,
no habiendo así riesgo biológico alguno para su consumo. También es importante
destacar que esas concentraciones (Tabla 1) mantuvieron la homeostasis mineral
sin haber un riesgo de alteración plasmática de los niveles de normalidad,
tanto en el sodio como en el potasio. Una limitación del presente estudio fue
la ausencia de medición de la concentración de electrolitos en el sudor. Esto
hubiera podido aportar más información sobre el equilibrio mineral durante el
ejercicio.
Las
diferentes formas de SC (bebida, gel y barra) fueron igualmente eficientes para
mantenerlos niveles de glucosa plasmática durante el ejercicio. Sin embargo,
esos niveles fueron superiores a los de cuando se consumió solamente agua pura
(Figura 3). Diversos estudios demuestran el mantenimiento de los niveles de glucosa
plasmática con el consumo de SC durante un ejercicio (Pfeiffer
et al., 2010a, 2010b; Campbell et al., 2008; Ivy et al., 2003; Febbraio et al.,
2000; Patterson y Gray, 2007; Mason et al., 1993).Cabe
destacar que entre aquellos que compararon SC con diferentes presentaciones
ninguno encontró diferenciasen las concentraciones plasmáticas de glucosa entre
los tratamientos. Lo que parece señalar que al igual que pasaba con la
presencia de partículas sólidas en el estómago, no hubo retención en el
estómago ya que el alimento pasó rápida y de forma directa al intestino, puesto
que los valores fueron estadísticamente semejantes a los de después del consumo
de una bebida deportiva.
Un
estado de hipoglucemia durante un ejercicio es determinante para una situación
de fatiga (Marins, 2011; Faria et al., 2011; Pérez-Guisado, 2009).
Es muy importante que durante los ejercicios de larga duración se mantengan los
valores de glucemia en los rangos de normalidad. En este estudio,
independientemente del tipo de aporte de carbohidratos, ha sucedido así,
indicado que un deportista podrá elegir la mejor forma de consumo de
carbohidratos según su preferencia personal. Es importante destacar que tanto
el consumo en gel o barra energética deberá estar acompañado de agua, para
mantener hidratado el cuerpo.
A
pesar de no haber sido registrado ningún caso de hipoglucemia, ni si quiera en
el caso del consumo solamente de agua, se ven claramente en la figura 3 las
diferencias de tendencias cuando se aportaron los carbohidratos. En el caso que
se prolongara el ejercicio por más tiempo, como suele ser habitual en
entrenamientos de ciclistas, se puede predecir que el consumo solamente de agua
implicaría en un mayor riesgo de casos de hipoglucemia.
El
hecho de no haber sido detectados casos de hipoglucemia solamente con el
consumo de agua, se puede justificar de dos maneras: a) que existió un aporte inicial
energético en el desayuno que dispuso de nutrientes suficientes para sostener
la glucemia normalizada durante los 90 minutos; b) que la intensidad de
ejercicio propuesta, entre un 55 y 60 % del VO2max sea un porcentaje
muy bajo teniendo en cuenta el nivel físico de los evaluados, produciendo un
mayor predominio de la grasas en los substratos energéticos y consecuentemente
ahorrando la glucemia sanguínea.
Una
respuesta interesante fue el aumento de la glucemia sanguínea tras finalizar el
período de
El
presente estudio demostró que, durante un ejercicio de intensidad moderada, en
las condiciones ambientales en que fueron realizados (22,40 ± 0,97oC
y 72,90 ± 5,45% HR), los SCen forma de gel o barra energética asociados al
consumo de agua (3 mL.kg-1 peso antes del ejercicio, cada 20 minutos
durante el ejercicio y en los
Considerando
las condiciones ambientales y de ejercicio propuestas en este estudio,
concluimos que, a igual cantidad de carbohidratos y líquidos ingeridos, los SC
en forma de gel o barra generan semejante reposición energética y electrolítica
que los SC en forma de bebida deportiva. Lo que ofrece a los deportistas más
opción esa la hora elegir cómo reponerse energética y electrolíticamente
durante el ejercicio.
REFERENCIAS
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